CAPÍTULO (73)

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CAPÍTULO SETENTA Y TRES—
HARTA

 Corro por los pasillos del patio hacía la clase de Transformaciones. Se me había hecho tarde en la biblioteca terminando un larguísimo trabajo para Snape y no me había dado cuenta de la hora.

— ¿Estás tenso, Potter? —

Escucho a mis espaldas cuando cruzo con rapidez el patio. Me giro y veo a Draco subido a un árbol burlándose de mi hermano.

— Mi padre y yo hemos hecho una apuesta. Yo digo que no duras ni 10 minutos en este Torneo — baja de un salto al suelo y enseguida es respaldado por sus secuaces — Él difiere. Cree que vas a durar 5 —

— ¡Me importa un bledo lo que tu padre piense, Malfoy! — le responde Harry dándole un empujón — ¡El vil y cruel! Y tú un payaso —

— ¿Payaso? — saboreó Malfoy la palabra mientras saca su varita

— ¡Oh, eso no, hijo! — aparece Ojoloco lanzando un hechizo hacía Draco haciendo que se convirtiera en un hurón blanco — Te enseñaré a no maldecir a nadie a traición. Apestoso, cobarde, canalla, pedazo de... —

La profesora McGonagall interrumpe al profesor que subía y bajaba a Draco hurón.

— ¡Profesor Moody! ¿Qué está haciendo? —

— Educar —

— ¿Es eso un alumno? —

— Técnicamente es un hurón — se excusa el profesor metiendo al hurón en los pantalones de Crabbe

El animal sale por el hueco del pantalón de Crabbe y la profesora McGonagall lanza un contra-hechizo haciendo que Draco volviera a su aspecto habitual. Mira de un lado a otro tratando de ubicarse.

— Mi padre se enterará de esto — mira con desprecio al profesor Moody

— ¿Es una amenaza? —

Sale el profesor al trote a por Draco que empieza a correr despavorido, seguido de Crabbe y Goyle.

— ¡Te contaría cosas de tu padre que rizarían ese grasiento pelo! —

— Alastor — le mira seria la profesora McGonagall

— ¡Esto no acaba aquí! —

— ¡Alastor! Jamás, usamos la transfiguración como castigo. Seguramente se lo habrá dicho Dumbledore —

— Tal vez lo mencionara — balbucea con la mirada fija en las húmedas hojas en el suelo

— Haría bien en recordarlo. ¡A clase! —

El círculo de alumnos que nos rodeaba se disipa en un momento. El profesor Moody le dedica una mueca a McGonagall y se dio la vuelta cojeando.

— Harry, ven conmigo —

Nos despedimos y Harry sale corriendo detrás del profesor. Yo, puse rumbo a la clase de Transformaciones; sí la profesora McGonagall está aquí, aún puedo llegar a tiempo.

Mientras llegaba al aula mi cabeza pensaba en lo mismo: Draco. Draco burlándose de Harry. Otra vez. Pensé que lo habíamos superado, que habíais dejado atrás toda esa mierda... Parece que me equivoqué.

Me pasó la clase mirándole. Él me devuelve las miradas pero no me dice nada, no se acerca. Ni si siquiera después de clase. ¿Está enfadado? ¿Se atreve a enfadarse él después de lo ocurrido?

Después de comer, junto a mi hermano y Hermione, llegamos a la puerta de las mazmorra de Snape, los demás Slytherin y Gryffindor esperaban fuera. Cada uno con una insignia bien grande en la pechera de la túnica. Por un momento, tuve la absurda idea de que eran insignias de P.E.D.D.O. Luego vi que todas mostraban el mismo mensaje en caracteres luminosos rojos, que brillaban en el corredor subterráneo apenas iluminado: "Apoya a Cedric Diggory"

Una Potter serpiente                                            [DRACO MALFOY]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora