22. Antiguas vidas.

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             22. Antiguas vidas.

—¡Hemos ganado!—Escuché a Chris gritar cuando me acerqué a Ashton y los demás tras lo ocurrido con Luke. Chris saltó sobre Travis para celebrar la victoria y este le recibió con un empujón que casi le tira al suelo.

—Maldito gilipollas.—Chris le maldijo y Travis le miró con una sonrisa en sus labios.

—¿Qué haremos ahora?—Quise saber cuando llegué a su lado y sentí un brazo rodeando mi cintura, pegándose a mí por detrás.

—Podríamos ir a cenar.—Esa persona propuso; Kai. Travis nos miró con el ceño fruncido ante aquella muestra en público, alguna que otra vez nos había visto juntos pero no de aquella manera. Miró a Ashton que también nos observaba, al igual que Chris, éramos el ojo de mira de todos.

—¿Acaso...?—Ashton comenzó a hablar señalándonos y mordí mi labio inferior mientras sentía como Kai se tensaba.

—Estamos juntos.—Afirmé cuidadosa a sus reacciones.

—¿Juntos como pareja?—Quiso asegurarse Travis y observé como Chris miraba sobre toda la gente inquieto, y sabía que estaba asegurándose de que Luke no estaba viendo aquello.

—Sí.—Oí a Ashton suspirar fuertemente mientras se llevaba los dedos al puente de la nariz.

—Tío, vas a tener que comprar muchas cervezas por esto.—Advirtió un tanto furioso pero conteniéndose, al menos había decidido tomárselo con humor.

—Ya sé donde irá a parar mi sueldo.—Siguió Kai con la broma y sonreí mientras atraía su brazo a mí.

—¿Por qué no vamos a cenar para celebrar esta mierda o no sé...?—Travis propuso mientras que Ashton negaba con la cabeza.

—Hay fiesta en casa de Oliver por la victoria, normalmente, siempre hay fiesta tras un partido ganado.—Ashton afirmó y los ojos de Chris se iluminaron.

—¿En casa de quién?—Travis quiso saber confundido.

—¿Acaso importa? Es una fiesta.—Chris contestó.—Ash, pásame ahora la dirección, iré con Luke.—Le dio una palmada en la espalda a mi hermano y desapareció de allí. Chris me había contado que en el tiempo que Luke había llegado a separarse un poco de él por todos los problemas, para no tener un verano aburrido había sido un grano en el culo para Travis, el rubio había acabado hasta las narices de él, yo bien sabía que Chris podía ser un total incordio, pero al fin y al cabo, no había podido evitar cogerle cariño como a un perro, era así como Travis lo describía, que de vez en cuando, demostraba que su corazón no era de piedra.

Nos dirigimos hacia la salida con mi mano entrelazada a la de Kai, Ashton y Chris hablando sobre las jugadas y el partido que habían hecho.

—M.—Escuché una voz muy familiar cuando nos disponíamos a salir del gimnasio, una mano agarró mi mano libre para llamar mi atención.

—Hola, Brook.—Sonreí al verle, y es que no podía evitarlo, a pesar de todo lo que Brook había hecho y aunque lo que iba a decir me hiciese parecer más idiota de lo que ya era, Brook había sido muy importante en mi vida, y eso no podía olvidarlo de la noche a la mañana.

—¿Cómo has estado?—Brook quiso saber y observé como su ceño se fruncía cuando sus ojos vagaron a mi mano entrelazada con la de Kai. Le observé, estaba sudado después de haber jugado la mayor parte del partido, y sus mejillas incluso se mantenían rojizas del sofoco.

—Bien, ¿cómo va todo para ti?

—Bien, la verdad, a pesar de no haber encestado ni una jodida canasta en todo el partido.—Se quejó y reí suave mientras rodaba los ojos.

Rebeldía II. (Luke Hemmings)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora