Rebeldía II. (Luke Hemmings)

51. you broke me first

De nuevo, siento como si tuviese que resumir la historia entera para poneos en contexto, pero intentaré aclararlo lo máximo posible: en anteriores capítulos Mickie descubrió que Luke se veía con Peyton, su ex con la que estaba cuando Mickie regresó de Australia, y que se lo ocultaba a Mickie. Después de que Mickie tuviese un encontronazo con Ryan (El ex de Charlotte, su mejor amiga, que casi abusa de ella) tuvo que ser llevada al hospital por Kai (Su ex, hermano de Charlotte) siendo que una vez allí fue a recogerla Luke, el cual no contestaba al teléfono inicialmente, después de que Mickie haya descubierto que Luke venía de estar con Peyton, este ha confesado que realmente no sabe cuales son sus sentimientos hacia Peyton. 

"you broke me first" canción de multimedia encaja totalmente con el capítulo, recomiendo escucharla mientras

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—Creo que entonces no hay más que hablar —le dije mirando hacia otro lado, intentando disimular el daño que me estaba haciendo, otra vez.

—Pero... Peyton se me pasará, ni siquiera sé por qué he dicho esa mierda de no saber si siento cosas por ella, solo estoy confundido, de verdad, se me pasará.

—No puedo estar esperando a que te decidas, no puedo seguir contigo sabiendo que en tu cabeza existe una confrontación entre cuál de las dos vale más la pena, con quién prefieres estar.

—No, escucha, quiero estar contigo, ángel —intentó acercarse a mí pero retrocedí, sabía que si lo hacía acabaría por romperme frente a él.

—No puedo competir, Luke, no puedo hacer esto otra vez —le hice saber.

—Pero te quiero —lanzó en mi rostro y nunca aquella palabra me había dolido tanto.

—Yo también te quiero, pero eso no significa que debamos estar juntos, toda nuestra relación ha sido un caos, ¿es que no lo ves? No dejamos de hacernos daño, no dejamos de alejarnos y volver a estar juntos, somos tóxicos pero no queremos darnos cuenta de ello. —Vi lágrimas en sus ojos, le estaba haciendo daño pero también podía ver reflejado en su azul que sabía que yo tenía razón.

—Pero no puedo estar sin ti —aquella frase que yo le había dicho una vez, cuando me fui a Australia y él decidió que no podíamos seguir juntos porque siempre había algo que nos dañaba aún más, y ahora era yo la que estaba dando el paso, porque a veces soltar algo a lo que estás atado tan profundamente duele menos que seguir aferrándose.

—Sí puedes, nadie se muere de amor —intenté sonreír dulcemente, haciéndome creer a mí misma esa frase. —Ya verás como me olvidas.

—No.

—No creo que sea algo que se pueda rebatir, Luke.

—No puedes hacerme esto. —Y de nuevo, él dio un paso hacia delante y yo lo retrocedí. Quería tirarle en la cara que yo nunca había puesto a nadie delante de él, que siempre le había elegido sobretodo y que realmente era un infierno cuando él no podía hacerlo por mí, pero solo haría todo esto más doloroso y largo, de nada servía ya.

—Todo estará bien, solo tenemos dieciocho años, esto no es el fin del mundo. —Me estaba costando tanto mostrarme fuerte ante él, ser yo quien intentaba reconfortarle cuando ni siquiera podía hacerlo conmigo misma. Saqué mi móvil para llamar a un taxi que viniese a recogerle y llamar a Travis para que viniese a por mí.

—Por favor —rogó en un llanto ahogado y levanté mi mirada de la pantalla después de hacer las llamadas para observarle con los ojos llorosos frente a mí, cogió mi rostro entre sus manos y me besó, dejando que sus lágrimas saladas se juntasen con las mías que no sabía en qué momento habían comenzado a descender por mi rostro.