Cuando desperté lo primero que hice fue ver la hora. Eran casi las 5 de la tarde. Deje mi teléfono en la mesa y baje a la sala. Mis padres estaban ahí sentados viendo televisión, los salude y luego camine hacia la cocina. Me prepare un sándwich y me serví un vaso de jugo. Mi padre se despidió de mí y se fue a trabajar, al rato entró mi madre a la cocina y me observó sin gesto alguno.
-¿Por qué te despertaste tan tarde?-me preguntó mi madre.
-No lo sé, estaba cansado.
-Supongo que Hera también está cansada.
-¿Sigue dormida?
-¿La vez por algún lado?
-No.-reí.
Hera entró a la cocina y beso la mejilla de mi madre.
-Buenas tardes Liz. Buenas tardes Luke.
-¿Por qué tan tarde mi niña?
-No pude dormir bien, tuve pesadillas.
-Mas les vale que no me estén mintiendo.-dijo desafiante.
-Jamás.-dije.
-Eso sería pecado.-bromeo Hera.
-Bien, nos vemos más tarde, iré a ver a Kassy.
Espere a que mi madre se fuera y Hera golpeo mi cabeza.
-¿Qué haremos esta noche?-me preguntó.
-¿Dónde está Hera?
-Ya tonto, hablo en serio.
-Wow, no sé qué decir. ¿Qué quieres hacer tú?
-Primero quiero comer, muero de hambre-me quitó mi sándwich.-ahora quiero jugo-tomo un vaso, saco el jugo del refrigerador y sirvió un poco-y ahora quiero pensar.-se sentó en la silla e hizo una cara pensante.
-No tienes idea de lo que quieres hacer ¿Cierto?
-Cierto.
Me preparé otro sándwich y juntos terminamos de comer. Luego vimos televisión y algunas películas. A ninguno de los dos se nos ocurrió nada, terminamos jugando el juego favorito de Hera: preguntas random.
-... ¿Cuándo fue la última vez que tuviste sexo?-me pregunto Hera.
-Hace como 6 meses más o menos.
-¿En serio?
-Es broma, soy virgen.
-Ya, dime.
-En serio, virgen puro. Hasta el matrimonio.
- ¿Qué es lo que más te gusta de ti?
-Mi altura.
- ¿Aún hablas con tus ex?
-No, no son importantes para mí.-Hera sonrió orgullosa.
- ¿Alguna vez has hecho llorar a alguien por amor?
-No te mentiré, soy una marica cuando se trata de amor.
-Siempre eres una marica.-beso mi frente.
- Nombra un momento que quieres que llegue ya a tu vida.-era mi turno.
-Tener hijos.
- ¿Has conocido a alguien que te ha cambiado este año?
-Es obvio. A Eithan.- sonrió como una tonta enamorada.
- ¿Alguna vez te autolesionaste o algo parecido?
-¿Puedo confiar en ti?
-Sabes que sí.
-Sí, muchas veces.
-¿Por qué?
-Ya sabes, baja autoestima.
-¿Y eso qué?
-No puedes juzgar, tú también lo hiciste.
-Yo tuve mis razones.
-Y yo las mías.
-¿Cuáles eran?
-Quería ser delgada.
Me quede callado y mordí mis labios.
-Cuando era pequeña y hasta hace algunos años yo era llenita. Siempre se burlaron de mi, siempre. Desde mi familia hasta mis conocidos. En la secundaria empecé a vomitar después de comer y asi baje como 7 kilos, luego empecé a hacer ejerció y con eso termine bajando como 17 kilos. Luke, pesaba casi 100 kilos, ahora peso 65.
-¿Aun lo sigues haciendo?
-Algunas veces.-bajo su mirada.
Lo único que hice fue abrazarla.
-Todo va a estar bien desde ahora. Todo va a estar bien al final. Yo estaré contigo hasta el final, así que no te preocupes-bese su frente-en las mañanas y en la noches, junto a los ángeles y demonios te acompañaré.
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365 cartas para ti
Teen FictionCada día hay una nueva carta. Cada carta tiene un sentimiento diferente. ¿Leerias las 365 cartas que te escribí?