El excelente olor a café me despertó. Me di una ducha rápida, me vestí y corrí a la cocina. Ahí estaba la linda abuela de Eithan.
-Buenos días-dije con una sonrisa.
-Heri, querida. Buenos días-me devolvió la sonrisa. Su abuela me llamaba Heri, sonaba gracioso pero me parecía muy tierno.-¿Quieres un poco de café?
-Me encantaría.
Ella tomo una taza y lo sirvió. Camino hacia mí y me lo entregó. Se sentó y me pidió que me sentara al frente de ella.
-Heri, un pajarito me contó que tienes algunos problemas.
-¿Algunos problemas?
-Sí, problemas para olvidar.
Le di un sorbo a mi café.
-Ese pajarito me habló un poco sobre el chico-alzó su mirada al techo-, el te gustaba mucho pero el te lastimó.-hablaba de Luke.-Se que el amor en la adolescencia es muy hermoso. Yo también fui adolescente, pero hay personas que fueron hechas para nosotros.
-¿A qué quiere llegar con todo esto?-le pregunté confundida.
-Olvidar a alguien es muy difícil. Lo sé, olvidarlo es lo último que querrías hacer pero simplemente no queda otra opción. Han pasado los días, las semanas y es posible que hasta meses y sabes que lo que tiene para ofrecerte no es suficiente. Paradójicamente sientes que muchas veces él es justo lo que necesitas. En resumen, es la persona indicada pero no ahora, no en este momento y probablemente no en esta vida.-mordí mi labio- Olvidarlo es algo que debes hacer sí o sí y aunque no es ni nunca será sencillo, es importante hacerlo ahora que finalmente te has decidido.
-¿Cómo sabe que estoy decidida a hacerlo?
-Veo como miras a mi nieto.
Mis mejillas se sonrojaron.
-Usted ha dicho que no es fácil. ¿Cómo puedo olvidar a alguien que ame y que me hizo daño tanto físico como emocionalmente? Necesito ayuda profesional.
-La mejor estrategia que puedes tomar requiere unos pasos esenciales a seguir y de esta forma, aunque no dejes de quererlo, tu cerebro y tu corazón se unirán para comprender que él no es para ti y que las cosas que no logran concretarse no merecen un lugar en tu presente.-Tenía más que claro que el ya no era para mi.- Comienza mirando tu realidad de frente, porque es algo que pocos nos atrevemos a hacer. Puede que al principio parezca doloroso y hasta innecesario, pero repetirte la realidad de tu situación una y otra vez te hará convencerte de lo que realmente sucede.
Eithan entró, besó mi mejilla y luego la de su abuela.
-Intenta no idealizar tu situación, intenta no verlo como alguien que no es y luego, da un paso al lado y cuéntate todas las cosas que quieres para tu vida: tus sueños, tus planes, tus ambiciones. ¿Es posible llevarlas a cabo con alguien que claramente no está en lo mismo que tú, con alguien que realmente no es para ti ahora y no lo será nunca? –Eithan se sentó a un lado de mí y los dos le pusimos atención-Ponte en su lugar y pregúntate qué serías capaz de hacer por alguien que realmente amaras. ...Probablemente las respuestas son enormes y llenas de compromiso, pero si te fijas, las respuestas de él no son ni la sombra de las tuyas y ese es sólo otro factor que indica que no vale la pena esperarlo ni quedarte en tu ventana mirando como los días pasan. De hecho, si aún necesitas un motivo más y una forma más de olvidarlo, recuerda que cada vez que lo prefieres a él, a él que es inalcanzable y que no está disponible para ti, dejas pasar a alguien más, dejas pasar otras oportunidades y dejas de ver algo maravilloso que la vida tiene para entregarte. Sé que aunque estás convencida y aunque has decidido tomar la decisión, habrá días en los que simplemente no lograrás dejar de dudar, pero si hay algo que es infalible es recordar que si él quisiera estar contigo, lo estaría, y a pesar de eso, sigues caminando sólo con tus pasos y tu sombra.
-Olvidar no es algo negativo, olvidar es dejar de lado cosas que no te aportan mucho para dar paso a esas grandes vivencias que ocupan espacio y que te llenan de pensamientos positivos, de amor por la vida y de ganas de seguir caminando todos los días.-le dije y ella me sonrió.
-...Así que cuando vuelvas a dudar, simplemente recuerda que olvidarlo significa que estás haciendo más espacio para todo ello que realmente vale la pena, para tus sueños y sobre todo, para ti misma.
-Tal vez Luke es la persona indicada pero no ahora, no en este momento y probablemente no en esta vida.-me dijo Eithan. Lo miré y me sonrió de lado.
-Tienes a un lado a un chico asombroso-dijo su abuela-no es porque sea mi nieto, pero deberías darle una oportunidad.-se paró y se puso a un lado de nosotros.-Ya los veo con 4 niñitos hermosos corriendo por toda la casa.-me guiño un ojo.
Eithan se sonrojo y tapó su rostro. Estaba avergonzado.
-Mi abuela está loca-dijo Eithan nervioso.- perdóname.
-No debes disculparte-le dije riendo.-Tu abue es muy profunda, igual que tu.
-Supongo que de ella heredé lo filósofo-alzó sus cejas.
Eithan se paró y se sirvió café, le di un pequeño sorbo y sonrió.
-Hera ¿tú crees que todo pase por una razón?
-A veces lo creo y a veces no. No lo sé. ¿Tú si lo crees?-le pregunté.
-¿Alguna vez te has preguntado por qué te pasan ciertas cosas? ¿Por qué a ti? Me atrevería a decir que sí, pues es algo que suele rondar en la cabeza de todos, al menos una vez en la vida. Te cuestionas la razón por la que algunas cosas suceden y tratas de entender qué es lo que deberías hacer, pero te quedas ahí, preguntándote para qué, sin entender realmente.
-¿A ti no te pasa eso?
-Nunca.
-No creo que todo tenga un motivo-alcé mis hombros.
-Todo tiene un motivo, pero no es algo que debas entender de manera que no hagas nada por aprender de ello. Es una enseñanza, y es así como deberías creerlo, porque así todo será mejor y sabrás cómo enfrentar la vida más adelante. No es una forma de justificarse por algo, es una manera de aprender. Todo tiene un fin, un objetivo, una razón y un porqué. Sólo depende de ti encontrarlo.
-Ves...eres igual de profundo que tu abuela.-volví a decirle.
Tanto Eithan como su abuela tenían toda la razón, aunque me costara admitirlo. Lo único que debía hacer era profundizar un poco y adentrarme a la realidad.
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365 cartas para ti
Teen FictionCada día hay una nueva carta. Cada carta tiene un sentimiento diferente. ¿Leerias las 365 cartas que te escribí?