...
La inspiración que tenía era bastante. Lástima que mis bolígrafos ya no tenían tinta.
Tomé mi cartera y la sudadera de Hemmings. Le pedí permiso a mi madre y ella acepto. Aunque ya sea mayor de edad,me gusta pedir permiso para ciertas cosas. En mi mente siempre suena "Mi casa,mis reglas" y bueno,éste no era mi techo.
Al llegar a la papelería estacione mi bicicleta en la esquina.
-Hola,¿que es lo que necesitas?- me pregunto la señora.
-Que tal,necesito bolígrafos. Tinta negra,por favor.
-¿Qué marca?-me preguntó mientras los buscaba.
-No importa en sí- miré mi teléfono-con qué sea negro todo está bien.
-¡MARÍ ENCONTRÉ A TU NIÑA!-gritó una voz varonil-¡ESTABA EN LOS COLUMPIOS CON UN CHICO!
-No es cierto mamá-chilló la niña-Luke es un mentiroso...-mi garganta se convirtió en un nudo-...estaba con José,tú lo conoces.
-Ahorita hablo con ustedes-Marí miro a su hija con furia-Mira aquí tengo estos son muy diferentes. Éste(empezado de derecha a izquierda)es muy económico,pero no lo recomiendo. Bueno,éste no me gusta-hizo una mueca mientras giraba el bolígrafo que a ella no le gustaba-Y éste...
-Éste a mi me fascina,es el mejor bolígrafo que pueda existir-dijo Luke,lo mire y el sonreía.
-El tiene razón señorita,es fascinante.
Miré a Marí y le sonreí.
-Ah. Bueno¿que precio tiene?-dudé.
-Éso es lo malo. Vale $120.00
-Diablos-susurre-creó que mañana vengo por el.
-De acuerdo. Hasta mañana.
-Buenas noches.
Salí de la papelería con la mirada en el piso. Aún seguía avergonzada. Me subí a mi bici decepciona. Creo que está noche no habría carta.
-¡Espera!-grito Luke.
Perdí el equilibrio y caí de la bici. Mierda. Soy una tonta.
-Eres muy torpe-él río-déjame ayudarte.
Luke tomó mi mano y me paró. Limpio mi espalda y miró mis rodillas.
-Están sangrando. Tú pants se rasgo.
-Amm sí-estaba muriendo por dentro-debo irme.-Intenté subir a mi bici pero falle,al alzar la pierna sentía cómo mi rodilla se estiraba y ardía.
-Eres muy torpe-repitió-no podrás subir a la bici,te dolerá.
Giré mis ojos.
-Yo te llevó. El auto de mi padre no está muy lejos.
-No gracias.
Trate de ser firme. No quería irme con él porque terminaríamos discutiendo. Lo mire de pies a cabeza y seguía igual de lindo. Sus converse negros.Sus jeans negros ajustados. Su playera azul marino. Otra de sus sudaderas favoritas y su gorra al revés era lo que vestía.
-Deja de mirarme-río y sus mejillas se tornaron rojos-es incómodo.
-Lo lo siento Luky,perdón Lucas.
-Hace años que no me llamas así. Recuerdo que tú me pusiste así. Tus apodos me gustan. Eres muy creativa. Eso me encanta de ti.
No,no y no. Primero sonrojado y ahora esto. Sin duda alguna parecería que él...jajaja que cosas pienso.
-Debo irme,ya es muy tarde,son más de las 10.
-Es muy temprano-miró su celular-¿acaso te regañan en casa por llegar tarde?-preguntó burlón.
-Si lo hacen.
-OH.Bien. Iré por el auto.
Salió corriendo y me dejó con la palabra en la boca. Alce mi bici y me subí en ella. El dolor se apoderó de mi. Era horrible.
Pedalee lo más rápido que pude y de nuevo caí. Un auto. Un auto fue el que hizo que cayera.
-¿¡Éstas loco?!¡casi me matas!-grité.
-Eres muy torpe.
Giré para ver al hombre o idiota que me decía éso.
-¡DEJA DE DECIRME TORPE LUCAS!
-Mira señorita-me tomo del brazo y me alzó-yo te dije que yo te llevaría a casa y TÚ decidiste huir como si yo fuera un puto violador-me acercó a él con bastante brusquedad.
-Suéltame idiota-gemí de dolor. Las rodillas me estaban matando.
-Te dije"voy por el auto" y cuando volteó tú huías¿por qué? Dios mío. Te estaba haciendo un favor. Deja de pensar en ti. Todavía que ayer le pagaste a mi novia, vienes y huyes de mi. Creí que éramos amigos. -Me soltó y sus ojos dejaron de mirarme-me sentí mal. Sentí como si me abandonarán.
No dije nada. El dolor en las rodillas me dolía más que el sermón de él. Tomo mi bici y la subió al auto. Él se subió y abrió la puerta del copiloto.
-Sube,por favor-miró mis piernas-te estoy pidiendo algo Era.
Tomé todas mis fuerzas y me paré. Caminé hacia la puerta del copiloto y mire la puerta. Mi mirada se fue hacía Luke,el estaba recargado en el asiento. Sus manos rodeaban su cuello y sus ojos estaban cerrados.
-La noche es joven cariño-el motor se encendió-puedo esperarte toda la vida.
Resople y subí. Prendí el estéreo y Charlie Brown de Coldplay. Mi canción favorita.
-Tú canción favorita. Siempre la he odiado.
-Nunca me has dicho el motivo. Es perfecta.
-Me recuerda a alguien-mordió su labio
-¿Se puede saber a quien?
-A ti- el auto se paro. Estaba anonadada. -Ya llegamos-bajo del auto y abrió mi puerta-déjame ayudarte.
Sus brazos rodearon mi espalda. Un escalofrío apoderó mi cuerpo. Un sonrisa,bien dos sonrisas existían en el mundo. Su sonrisa y la mía. Está vez éramos sólo nosotros. Sin pelearse,sin gritarnos. Este momento fue perfecto.
Miré por mi ventana y el seguía ahí. Sus manos subieron a su rostro. Pude notar como sus mejillas volvían a tornarse rojas. Subió a su auto y aceleró.
Tal vez hoy no habría carta. Pero hubo un momento. Y ése fue nuestro momento.
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365 cartas para ti
Teen FictionCada día hay una nueva carta. Cada carta tiene un sentimiento diferente. ¿Leerias las 365 cartas que te escribí?