365 cartas para ti

Carta 101

El timbre de la casa sonó. Una vez. Dos veces. Tres veces. Cuatro veces. El perro de mi hermano comenzó a ladrar muy desesperado. El cielo se nublo. Mi celular vibro una y otra vez. Era un mensaje. Es el segundo mensaje que me llega de esta persona. A veces me asusta.

Mensaje de Numero desconocido 3:43pm

Él cometerá errores porque es humano. La esa enamorándose de ti. Pero él no lo sabe. Puedo decirte que te estas convirtiendo en su todo. El es un hombre. Es un estúpido. Todos son así, pero debes aprender de él, porque él está aprendiendo a amar igual que tu.

Mire la ventana y todo el paisaje cambio. Había un hermoso arcoiris. Ñoño, el perro de mi hermano entro a mi habitación y se acostó en mi cama. Sin duda algo muy raro.

Note como la puerta de mi habitación se abría lentamente. Un perfecto ramo de girasoles se asomaba.

-¿Puedo pasar?- pregunto Luke.

-No, quédate ahí.

-Pero te he traído flores.

-Solo dame las flores, tú quédate ahí.

Su sonrisa derrochaba felicidad.

-Me alegra que estemos bien- dijo tímido.

-¿Quién dijo que estamos bien?

-Creí que-mordió su labio- nosotros estábamos bien.

Baje mi mirada. Pensé en el mensaje que me llego.

-Dame otra oportunidad-iba a decir algo, pero me tapo la boca con su mano- sé que me has dado miles de oportunidades, pero te prometo que esta será la última.

Mire sus ojos. Se veían sinceros. "Dile que sí, sabes que quieres." Decía mi interior.

-Bien, será la última.

Sus brazos me rodearon.

-Pero en serio, la ultima de todas. Ya te he dado más de miles, así que debes aprovechar esta. Debes jurarlo.

-Lo-beso mis labios-juro-volvió a besarles-lo juro.