La puerta de mi habitación se abrió lentamente. Con mi mirada en el suelo visualice unos bobos vans negros. Un pantalón negro y una estúpida y sexy camisa roja con negro. El camino hacia mi cama y se sentó a mi lado.
Saco una pequeña carta de su bolsillo y me la entrego. Quise abrir la carta pero me detuvo.
-Puedes leerla cuando nos alejemos-suspiro- promételo.
Lo mire a los ojos.
-Lo prometo.
Mis brazos rodearon su espalda y juntos creamos un abrazo. No sé porque lo hacíamos, pero se sentía bien.
Mire de nuevo la carta.
''Puedes leerla cuando nos separemos''. Sus palabras se quedaron en mi mente.
-¿Le has hablado a alguien sobre mí?- pregunto Luke.
Me quede callada.
-¿Por qué no lo has hecho?-volvió a preguntar.
-¿Tú le has hablado a alguien de mi?
-Sí-el mintió.
-Es malo decir mentiras.
-No estoy mintiendo-bajo su mirada.
-Estoy cansada de esto.
-¿Cansada de qué?
-Cansada de ti. Cansada de mí. Cansada de nosotros.
-Nunca ha existido un nosotros.
Con esa frase entendí. El tenía razón. Nunca existió y nunca existirá un nosotros. La respuesta ya la sabia, solo... solo que me cegaba pensando que tenía una oportunidad.
-No quise decir eso- tartamudeo.
-Dijiste todo Lucas, todo.
Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.
-Era-trato de abrazarme, pero me negué. – No quise decir eso, en serio.
-Es mejor que te vayas.
Se quedo sentado sin decir nada. Sus manos tapaban su rostro. Las lágrimas salían de sus bellos ojos y su respiración era rápida.
-Es mejor que me valla yo.- tome mi sudadera. Antes de salir de la habitación tome todo el aire que podía.- Antes de irme, sólo diré que nunca había querido a alguien de una manera tan bonita, de una manera tan pura, nunca había querido a alguien como te quiero a ti.
ESTÁS LEYENDO
365 cartas para ti
Teen FictionCada día hay una nueva carta. Cada carta tiene un sentimiento diferente. ¿Leerias las 365 cartas que te escribí?