Carta 246

905 94 8
                                    

Luke Hemmings


Llegué a las 6 en punto de la mañana al apartamento, abrí la puerta y deje las llaves sobre la mesa. Ayer cuando Hera me estaba dando la espalda las tome sin que ella se diera cuenta. Me dirigí de inmediato a su cuarto. Me quite mi sudadera y miré a Hera. Lucia tan angelical dormida, alcé la colcha,noté que Hera tenia puesta mi sudadera,sonreí y me acosté a su lado.

No me moleste si quiera en quitarme los zapatos o quitarme el pantalón simplemente me acosté. Mi celular empezó a vibrar, tal vez era mi madre preguntando si había llegado bien al departamento de Hera, tomé el celular y allí estaba ella al apretar el botón de desbloqueo. 

-Maldición-dije en voz baja. 

Me levante de la cama y entre al baño. 

-¿Que pasa Melissa?-pregunté enfadado.

-Luke,¿si vendras por mi?

-No, lo siento. Me siento mal, faltare a la escuela.

-Pero si ayer estabas de maravilla, tus besos me lo dijeron.

-Mel, todo puede pasar de la noche a la mañana.

-¿Puedo ir a verte?-pregunto coqueta.

-No, no quiero enfermarte.

-No importa, yo iré.

-Te dije que no-alcé mi voz.

-Esta bien,te amo.

Me quede en silencio. Apenas llevaba una semana saliendo con Melissa y ya me dice te amo.

-Dije te amo-repitió molesta. 

-Mel, llevamos muy poco tiempo saliendo, no estoy listo para decirte eso.

-¿Decirme que?

-Ya sabes, esa palabra.

-Luke, mi amor por ti fue amor a primera vista. 

-Te veo mañana bebe.

Colgué y regrese a la cama. Esta vez sí me quite los zapatos y el pantalón, me recosté y cerré mis ojos.


Horas más tarde me desperté, tome mi teléfono para ver la hora. Exactamente era medio día. Me levante,camine hacia la cocina y prepare desayuno o más bien almuerzo para dos. Al termino regrese a la habitación para despertar a Hera.

-Buenos días Hera-le dije con una sonrisa.

Hera me miró mal y me golpeo con su pierna. Me regrese a la cocina y empecé a comer.

-¿Este es mi plato?-asentí-gracias.

-¿Como te sientes?

-Tanto físico como mental, me siento mal. Gracias por preguntar.

-De nada-rodee los ojos.

Hera comía como sí no lo hubiera hecho en años, parecía perro.

-¿Y tu novia?-preguntó mientras se limpiaba.

-No es mi novia. Ayer te lo dije.

-No es cierto, te quedaste callado.

-Eso significaba no.

-Luke,vamos. Sé que te gusta.

-No me gusta-mentí.

-Claro que sí te gusta.-me reto.

-¿Por qué dices eso Riley?

-Cuando choque contigo y me ignoraste, noté como la mirabas y la besabas.

-¿Y eso que?

-Sí seras idiota. Cuando a una persona le gusta otra persona, sus ojos brillan como dos diamantes. Los tuyos brillan así.

-Esas son tonterías de niñitas.

-Es verdad-alzo su hombros-no me importa si no me crees.

-Empecé a salir con ella hace una semana. Es muy linda,graciosa y me entiende. 

-Jamás te pregunté eso, ya ves, sí te gusta.

-Me gustas más tú-dije en voz baja.

-Habla más alto, no te escuche.

-Nada, que sí me gusta, solo un poco-dije con una sonrisa forzada. 



365 cartas para tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora