Tras estar un rato tirada en el césped del parque decidí que lo mejor sería volver a casa pronto si no quería que anocheciera y mamá se preocupara por mí. Al levantarme sacudí un poco mis pantalones; aun así se quedaron manchados por la hierba. Mientras iba caminando por las calles de Sídney iba atenta a todo lo que había a mi alrededor, si volvía a perderme en mis pensamientos tendría un accidente de nuevo, y ya había tenido demasiada suerte esta vez.
Al llegar a casa toqué al timbre, ya que al llegar por la mañana me había ido sin más. Esperé por unos segundos hasta que la puerta se abrió, dejando ver a la señora Hemmings detrás de ella.
―Buenas tardes Liz ―la saludé, intentando sonreír.
―¡Buenas tardes Daelyn! Entra, te estábamos esperando.
―¿Quién...? ―pregunté mientras la seguía hasta el salón, pero callé de repente al ver quien había allí.
―Oh hija, ya has llegado ―dijo mamá, dejando una bandeja con pastas y cafés sobre la mesa―. Ven, los Hemmings acaban de llegar.
Me dirigí hacia la mesa donde estaba ya sentado James. Le dediqué una mirada confusa pero decidí guardar silencio y escuchar.
―Bien, como iba diciendo ―empezó a decir Liz, o más bien retomó la conversación que había sido empezada cuando yo no estaba allí― tenemos una casa de campo a las afueras. Ahora que empieza el calor es un buen momento para ir antes de que sea Navidad. Además, los chicos tienen piscina y la casa es muy grande.
―No sé qué decir ―dijo mamá, sonriendo ―no queremos abusar de vuestra hospitalidad.
―Señora Jones, las invitamos porque queremos que estén allí, no es molestia.
Abrí los ojos cuando escuché a James hablar de aquel modo. Intenté ocultar una pequeña sonrisa burlona.
―No estoy segura... ¿Y el instituto? ―preguntó mamá, mirándonos.
―Tenemos una semana libre, por eso pregunté si podíamos ir a la casa de campo, creo que, como ha dicho mi madre, es bueno relajarse ahora que empieza a hacer el bochornoso calor de Sídney.
Miré a James cuando dijo que la idea era suya. Entrecerré mis ojos analizándole, sabiendo porque lo había dicho y que pretendía con ello.
―Visto de ese modo no parece mala idea... Gracias por la invitación, de todas formas, pero mi marido y yo tenemos que trabajar... Aunque a Daelyn le vendría bien, podría recuperarse del todo de la pierna y descansar.
―Perfecto ―dijo Liz―. Mañana por la mañana os iréis.
―¿Nos... Iremos? ¿Usted no viene? ―pregunté alarmada.
―Jack, Celeste, James y tú, Ben quería venir pero al final no ha podido.
Mientras mamá y Liz hablaban a la vez que se dirigían a la entrada James se quedó sentado, mirándome fijamente. Por un momento me quedé mirando como su lengua jugaba con el aro que tenía en su labio inferior. En su boca se formó una sonrisa.
―¿Quieres besarme? ―preguntó James, despertándome de la burbuja que empezaba a formarse a mí alrededor.
―¿¡Qué!? ¿Estás loco?
―Deja de mirar mis labios, entonces ―con esa sonrisa todavía plasmada en su boca, James los relamió mientras se levantaba de la silla donde todavía se hallaba―. Durante esta semana habrá tiempo para todo.
―¡Yo no estaba mirando tus...! ―quise reclamar, pero Liz me cortó desde la entrada, llamándole.
El rubio se acercó a mí y, aunque yo retrocedía, la pared se interpuso en mi camino, dejándome acorralada.
―Nos vemos, bebé ―susurró en mi oreja, justo antes de irse.
...
―¡No! ¡Otra vez no! ―exclamé cuando vi la maleta rodar escaleras abajo, acabando con toda la ropa esparcida y arrugada por el suelo.
Aparte de no haber podido dormir bien había hecho la maleta esa misma mañana, pensando que me daría tiempo, pero se me había caído de la cama cuando estaba casi terminada, por lo cual había tardado mucho y ahora iba con el tiempo justo. Todo eran problemas.
El timbre de casa sonó; abrí la puerta, dejando pasar a James.
―Jack y su novia están en el coche esperando. Dame tu maleta.
―Buenos días James, estoy bien, gracias por preguntar ―soplé, dirigiéndome hacia las escaleras de nuevo.
El chico de ojos azules rodó los ojos, mordiéndose el labio.
―Dame tu maleta, quiero llegar lo antes posible.
―Va a ser que no, chico duro.
―¿Estás en el periodo? Vaya humor, Daelyn.
―¡Estúpido, vete de mi casa! ¡Dile a Jack que tardaré un poco! ―le dije mientras le cerraba la puerta en la cara―. ¿Tanto se me nota? Maldito Hemmings.
Recogí toda la ropa, doblándola con cuidado hasta dejarla como estaba anteriormente. Cerré la maleta, al fin, y cogí las llaves de casa. Al salir vi a James apoyado en la pared, con los brazos cruzados.
―¿Qué haces aquí todavía? ―le miré con una mueca.
―¿Se puede saber qué te pasa? ¿Por qué estás a la defensiva?
―Tu eres lo que me pasa, tenías que dar la idea de ir a tu casa de campo solos. ¡Solos!
―No vamos solos, de hecho, mi hermano y su novia nos esperan en el coche, por si se te ha olvidado. Ahora me vas a dar tu maleta y la llevaré hasta el maletero, ¿Entendido?
Le hice una mueca y le miré mal. Entré en el coche e intenté ser agradable con ellos, no tenían la culpa de mis problemas.
Después de tres horas de viaje y de conseguir recuperar unas cuantas horas de sueño perdido noté como el coche paraba. Yo todavía estaba un poco somnolienta.
―Despierta a Daelyn, hemos llegado ―le dijo Jack a su hermano―. Celeste y yo llevaremos las maletas hacia dentro.
Escuché el ruido de las puertas cerrarse. De pronto, unas manos desataron mi cinturón de seguridad y me cogieron en brazos. Me aferré al cuello de James por miedo a caerme.
―¿Estabas despierta? ―noté su voz muy cerca de mí.
―A medias.
―Abre los ojos entonces.
Intenté hacer lo que me decía, pero la luz me molestaba demasiado. James se reía de mis muecas y, aunque no quería, una pequeña carcajada salió de mí al escuchar su risa.
Tras estar cargada por el rubio durante cinco minutos noté como mi espalda hacia contacto con una superficie acolchada.
―Descansa ―susurró James, dejando un beso en mi frente.
Después de eso cerré los ojos del todo, quedándome completamente dormida.
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¡HOLA! ¿Qué tal estáis?
Os dejo este capítulo *aunque se me ha ido toda la inspiración y no me convence del todo :(* ¿Qué creéis que pasará durante esa semana? Se aceptan hipótesis xd
Intento subir lo antes posible porque dije que subiría cada dos días y entre que se me rompió el ordenador y no estoy en casa hasta dentro de un mes se me hace difícil pero al menos esta semana quiero hacerlo bien.
Gracias por leer Twins.
PD: Os voy a ir dedicando capítulos por comentarios así que si queréis el próximo capítulo dedicado comentad pls.
Comentad y votad :)
Bye xx
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Twins » Luke Hemmings
FanfictionDaelyn Jones se muda desde Londres hasta Sídney por el trabajo de sus padres. Cuando llega allí todo parece fantástico: sol, playa, surf; todo lo que un adolescente ama, pero... ¿Qué pasará cuando conozca a sus vecinos? Luke Hemmings: el típico chic...