Daelyn POV:
Mis ojos tardaron unos segundos en adaptarse a la luz porque, aunque no entraba mucha por las ventanas rotas de aquella fábrica, era mucha más de la que veía con la tela puesta. Una vez me recuperé, mis ojos viajaron por la habitación, dándome cuenta de que había cuatro hombres vestidos de negro, todos ellos altos y robustos; a mi lado se encontraba otro, que tenía la cinta que antes estaba en mis ojos entre sus manos.
Los miré, uno a uno, comenzando a llorar. El frío y el miedo se apoderaron de mí y, sintiéndome débil y frágil, me encogí, sin saber que sería lo próximo que pasaría.
De pronto unos pasos resonaron por todo el lugar; unos pasos que, sin duda, eran diferentes a los que había escuchado antes. Cuando la puerta se volvió a abrir la imagen que mis ojos contemplaron se volvió todavía más borrosa. Bajé mi rostro, sin querer hacerle frente a aquella surrealista situación.
Sus pasos se acercaron hasta que estuvo a un paso de mí. Noté como se agachaba y, con su mano, agarraba bruscamente mi barbilla y me hacía levantar la cabeza, clavando su mirada en la mía.
―No sabes cuánto he esperado por este día, querida Daelyn ―dijo, sonriendo.
―¿Por... Por qué? ¿¡Por qué estás haciendo esto!? ―le repliqué.
De pronto, su mano impactó en mi mejilla, provocando que girara mi cara con fuerza.
―No te atrevas a levantarme la voz, no estás en la mejor posición para hacerlo ―se levantó, dando pasos por la habitación, bajo la mirada de aquellos hombres, los cuales estaban un poco más apartados de la escena―. Y me preguntas el porqué... Me haces reír, Daelyn. Tú más que nadie deberías saberlo... ¡Deberías de saber lo que hiciste! Pero ya que insistes te lo explicaré palabra a palabra ―dijo, sacando una navaja del bolsillo de sus pantalones―. ¿Por dónde podemos empezar? Oh... Ya sé. Quizás por el momento en que una estúpida cría decidió robarme el amor de mi vida. Romper con Daniel... ¿De quién será la culpa? ―dijo, rozando la navaja contra mi mejilla izquierda.
Noté un pequeño pinchazo justo antes de que una gota de sangre cayera por mi rostro.
―Savannah... Para, por favor...
―¿Duele? ¿Escuece? Pues no es ni una mínima parte del dolor que sufrí yo... Porqué cuando volví con Danny todo el mundo creyó que yo había sido la mala, la traidora, ¡Cuando en realidad tú fuiste quien me lo robó primera! Y, por si fuera poco, cuando llegaste aquí te llevaste también al chico que me gustaba... Dime, como se siente el estar jugando a dos bandas con los gemelos, ¿Eh? ¿Crees que todo es un cuento de hadas?
―De... ¿De qué estás hablando?
De pronto algo se escuchó desde fuera de la sala. Savannah dejó de prestarme atención, ordenando a sus guardias que se ocuparan de lo que estuviera pasando afuera. Tras ello giró su rostro, mirándome de nuevo.
―Eres tan ingenua... Ni eres la única para Luke, ni mucho menos lo eres para James... Luke está en Los Ángeles, rodeado de chicas mucho mejores que tú; ¿Todavía crees que mientras estás en Sídney engañándole con su gemelo él no lo está haciendo con cualquiera? Y luego está James... Antes de que llegaras a su vida James y yo tuvimos algo. Pero lo importante es que él lo sabía todo, él sabía mi identidad... Él lo sabía todo y aun así ha dejado que todo esto llegara a este punto... Él te podía haber salvado de estar aquí ahora mismo, pero no le importas.
―¡Basta! ―grité, mientras la desesperación comenzaba a aparecer poco a poco en mí.
―¡No! Me vas a escuchar, porque esta vez soy yo la ganadora, porque yo merezco ser la ganadora por una vez en mi vida ―dijo, mientras sus ojos comenzaban a cristalizarse.
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Twins » Luke Hemmings
FanfictionDaelyn Jones se muda desde Londres hasta Sídney por el trabajo de sus padres. Cuando llega allí todo parece fantástico: sol, playa, surf; todo lo que un adolescente ama, pero... ¿Qué pasará cuando conozca a sus vecinos? Luke Hemmings: el típico chic...