YOU CAN DRAG ME DOWN

CAPITULO 2

HAY COSAS QUE NUNCA TE DIJE l Capitulo 2

Owen abrazaba a Claire de una manera profunda mientras la besaba apasionadamente, así fueron los pasados 5 minutos, sus labios no podían separarse.

Un minuto después el blazer de Claire comenzó a vibrar, Owen se alejó un poco, pero manteniendo sus brazos alrededor de ella. Y con el aliento cortado le susurro algo al oído.

-wow, no sabía que tenía ese efecto....- le dijo de manera seductiva.

Ella inmediatamente lo empujo lejos de ella, tomando su blanco Samsung Galaxy S5, pero sin responder en ese momento.

-urgh.-exclamo molesta.-tenemos que volver a la sala de operaciones.

Owen se dio cuenta que su natural modo de control y trabajo estaba de nuevo en ella y no pudo evitar hacer un comentario de ello.

-oh, no, la Claire divertida se ha ido.-dijo en tono burlón.-creo que tu personalidad tan imposible queriéndome dar órdenes está de vuelta, al menos no de las divertidas...

-basta con eso.-y le trono un dedo.-solo entra al coche

Owen dio un paso hacia ella, tocando su perfecta cintura con su mano derecha.

-realmente no discuto cosas de negocios en los autos pero si funciona para ti....-le sonrió burlonamente.

Ella quito su mano sin mucho esfuerzo y le dedico una mirada irritada, el solo la miro con diversión.

-está bien, me estoy viniendo.- una enorme sonrisa apareció en su cara cuando el vio las mejillas de Claire ponerse rosadas al entender el doble sentido de lo que dijo.-quise decir...que ya vengo...al coche, tenemos que trabajar....ya.

Ella rodo sus ojos y lo siguió.

-¿Qué piensas que estás haciendo?.-le grito cuando lo vio deslizarse sobre la piel beige del asiento del piloto.

Él le respondió con un tono serio.

-tenemos que regresar a la sala de controles, solo entra al auto.-le dijo, para después sonreírle, mientras que ella apretaba sus dientes, había repetido sus palabras.

Ella lo miro, el también a ella, ella puso sus ojos en blanco y suspiro.

-bien, solo conduce con cuidado.- y ella camino para entrar en el asiento del copiloto.

-¿Qué hay de divertido en eso?.-el pregunto en tono de broma, ella le dedico una mirada fría desde su lugar.

-sí, sí, conduciré con cuidado, y no te llevare al oscuro bosque y te hare comer bombones derretido frente a una fogata...lo prometo.

De nuevo, todas sus defensas se derritieron ante él, así que decidió voltearse hacia la ventana, tratando de ocultar la sonrisa que Owen había provocado en ella. Sin embargo, ese intento fue nulo, el noto la sonrisa y encendió el coche.

-¿puedo preguntarte algo?.-le dijo, mientras emprendían el camino hacia el edificio principal.

-claro, ¿Qué quieres saber?.-le respondió, con su mirada aun en el camino.

-¿Por qué vives ahí en el lago? Quiero decir...todos los empleados tienen condominios.-dijo, con una voz diferente, muy lejos de ser su voz de negocios.

-si lo que quieres es que me mude contigo, solo tienes que pedírmelo.-el bromeo.

Claire fue tomada con la guardia baja, su corazón por poco se le sale del pecho, y su boca se quedó seca, pero supo mantener su compostura y de manera calmada pudo responderle.

-no...solo no entiendo porque prefieres quedarte allá, y no en algún condominio de empleado.

No estaba ofendido, pero si parecía estarlo.

-¿Por qué preferiría quedarme en uno de esos lugares "perfectos? Me gusta el lago y me gusta la comodidad que me brinda mi cabaña, la tranquilidad del lago me mantiene enfocado, y necesito estar enfocado si quiero trabajar con los raptores. Además, las mujeres aman a los hombres robustos de las montañas

Ella se mantuvo en silencio por un momento, y antes de poderle responder Owen agrego algo más.

-quiero decir, funciono contigo.

Su mecanismo de defensa inmediatamente se activó.

-¡conmigo no funcionó nada!, yo fui enviada por el señor Masrani para discutir la posibilidad de utilizar tus servicios sobre el comportamiento del I-rex.

-¿es por eso que me atacaste poniendo tus labios en los míos? No me estoy quejando, eres excelente besando. La cosa es que no estoy seguro de querer una novia que discute las cosas de trabajo de esa manera porque digo tienes tantas conferencias y reuniones en un día que quien me asegura que tú no tratas así a todos tus socios con la misma.... ¿pasión?.- no pudo esconder la gran sonrisa que le apareció cuando termino la oración.

Ella quería objetar ante la palabra "novia", pero sus palabras salieron disparadas sin siquiera pensarlas.

-no soy así, y no fui yo quien puso sus labios sobre los tuyos. ¡Tú me besaste!

-¿estas bromeado? No podías quitar tus manos de mí, no puedo juzgarte, seguramente me has deseado desde la primera vez que nos conocimos, era obvio que esto iba a pasar tarde o temprano. Pero nunca imagine que ibas a venir a mi cabaña y seducirme de esa manera, muy sexy, debo aceptar.-la miro de reojo, y por poco se carcajea al ver su reacción, mero enojo e incredulidad.

Sus palabras se quedaron en la garganta de ella, quería cachetearlo, pero se contuvo, muda y quieta, solo mirándolo.

El quito su mano derecha del volante, conduciendo únicamente con la izquierda, para después poner su mano derecha sobre la parte baja del muslo de Claire, cerca de la rodilla, le dio un apretón y después la acaricio con su meñique.

-no te preocupes, no le diré a nadie.-bromeo.

Ella quiso gritarle "tú fuiste quien hizo el primer movimiento", pero después sintió su mano sobre su pierna, sintió mil mariposas volando por todo su estómago.

El esperaba que Claire actuase de una manera muy diferente, de hecho esperaba que le gritara que había sido el quien la había provocado, esperaba que se molestara con él, pero Claire solo se mantuvo en silencio, mirándolo con lo que se podría decir una mirada tímida. Poco después sintió como se le erizaba la piel en su pierna. Tal vez estaba siendo demasiado imbécil, debía admitir que sí. El seguía siendo un caballero ante todo, y si su mano en su pierna la hacía sentir incomoda inmediatamente la iba a quitar.

Él puso su mano de nuevo en el volante.

-no soy esa clase de hombre.-le aseguro.

Ella no tenía idea de lo que hablaba, ella deseaba que su mano estuviera justo ahí, en su pierna.

-¿Qué clase de hombre?.-le pregunto bastante confundida.

Owen se dio cuenta que estaba completamente equivocado, y que había malinterpretado toda la situación. Se dio cuenta que ella no tenía idea que su mano en su pierna podría parecer inapropiado debido a las circunstancias, de hecho por increíble que pareciera se dio cuenta que ella realmente quería su mano sobre su pierna. El rápidamente le respondió, siendo cuidadoso en evitar cualquier clase de momento raro.

-la clase de hombre que toma ventaja de una indefensa mujer en la oscuridad....-la miro, y le dedico una dulce sonrisa.

Y las mariposas dentro de ella la estaban matando.

"¿Qué es lo que este hombre me está haciendo? ¿Cómo es que me siento tan atraída hacia el cuándo dos horas atrás no podía ni cinco minutos con él? ¿Por qué le atraigo a él? ¿Por qué estoy haciéndome todas estas preguntas?..." ella miro por la venta al no poder responder ninguna de sus preguntas.

-eso me parece bien, ahora por favor, mantén tus ojos en el camino.-le respondió de la manera más tranquila que pudo.

-como digas.-le sonrió abiertamente.