*Narra Jennifer*
-No te separes de mi por ningún momento ¿entendido?- dijo Christian mirando hacia la escuela y rodeando mi cintura en su brazo mientras caminabamos.
Solo me limite a asentir mientras entrabamos a la escuela. Era grande y muy bonita, tenía pasillos muy muy largos y a cada lado habían casilleros. Había unos cuantos alumnos caminando y otros platicando en grupo, se sentía la tranquilidad en esta escuela. Pero solo en vacaciones, tal vez en tiempo de clases sea un infierno aquí. Llegamos hasta una puerta donde había un letrero en medio que decía "Oficina del Director" y abajo había un nombre del cual pensé que era del Director.
-Espereme aquí, no tardo- dijo Christian dándome un corto beso en los labios y entrando a la oficina.
Ya es costumbre que nos demos besos en los labios, me arrepentiré de todo cuando el señor Joseph se entere de esto. Pero no puedo evitarlo, los labios de Christian son una adicción.
Me di la vuelta y empecé a observar todo a mi alrededor, vi un marco en frente de mi que tenia varios diplomas pienso que son del Director de la escuela. Seguí viendo hasta que fui interrumpida por una voz muy ronca a mis espaldas.
-¿Eres nueva aquí?- pregunto el chico a mis espaldas. Me di la vuela y lo vi ahí parado a un lado de la oficina del Director.
-Oh, no, vine a acompañar a-a -No sabia si decir a mi jefe pero se escuchaba muy estupido, a mi novio? Ni siquiera se que somos- A un amigo- dije finalmente con una sonrisa.
-Oh vaya, y ¿como te llamas?- dijo mirándome.
-Jennifer Beadles, ¿y tu?- dije con una sonrisa
-Jake Smith- dijo regalandome otra sonrisa. Wow, que hermosa sonrisa, sus dientes eran blancos como las perlas y tenia el pelo negro como la oscuridad y unos ojos color miel hermosos.
-Un gusto conocerte Jake, y ¿estudias aquí?- dije mirándolo. El silencio era incomodo para mi. Así que si no lo quería debía sacar platica por que parece que Jake viene con el Director y no lo vera hasta que salga Christian.
-Si, voy en segundo semestre, en Marzo del año que viene pasare a tercer semestre- dijo sonriendo.
-Oh, muy bien por ti Jake- dije devolviéndole la sonrisa.
-¿Y tu? ¿Que me cuentas sobre ti?- dijo mirándome fijamente.
-Hm, pues no pude terminar la Universidad, ahora trabajo todo el día y no pudo ir a las clases, mi madre se separo de su segundo esposo y ella lo tomo muy mal. Ahora esta deprimida y no sale de casa. Me preocupa demasiado. Me ah llamado diciendo que ya no puede mas y que me necesita con ella pero mi trabajo me lo impide. Tenemos gastos en la casa y por eso tuve que trabajar de tiempo completo para poder salir adelante con mi madre- dije un poco triste recordando cuando mi madre me llamó, se escuchaba tan dolida, su voz cortada y se notaba que había estado llorando por semanas.
-Lo siento mucho Jenn, ojala pudiera hacer algo para ayudarte. Pero si necesitas un amigo aquí estaré yo- dijo el tomando mi mano mirándome profundamente. No me había dado cuenta que se sentó a mi lado hasta que lo oí hablar.
-Muchas Gracias Jake- dije mirándolo agradecida.
-Es hora de irnos- dijo una voz enojada enfrente de nosotros. Voltee al frente y vi a Christian mirando fijamente a nuestras manos unidas su rostro transmitía enojo, ira, y ¿celos? Su mirada pasaba de nuestras manos a Jake y al final conmigo. Me estremeci al momento que me miro. Me levante de inmediato y me volví hacia Jake para despedirme.
-Adios Jake, fue un gusto conocerte y hablar contigo- dije amable mostrándole una sonrisa.
-El gusto es mio, espero verte pronto Jenn- dijo el a punto de darme un abrazo cuando una mano me tomo el brazo y me jaló hasta quedar a un lado de Christian.
-Es suficiente- dijo el mirando fijamente hacia Jake demasiado enojado. Jake no se quedo atrás y lo miro también enojado.
-Vamonos Christian, por favor- rogué empujando a Christian por el hombro. Lo que menos quería era una pelea y menos en frente de la oficina del Director, podrían salir perjudicados los dos. Pero parece que el enojo los ciega.
Christian le dio una ultima mirada a Jake antes de que me tomara la mano y las entrelazara, salimos tan rápido que por poco y me tropiezo, me queje pero Christian estaba cegado por el enojo. Llegamos hasta el auto y me empujo haciendo que me estrellara en el auto. Estupido, ¿Quien se cree para hacerme esto?
-¿Que te pasa?- dije enojada.
-¿Que me pasa? ¿Enserio?- dijo rodando los ojos enojado.
-Me estas tratando como si fuera una basura- dije mirándolo furiosa.
-Me importa una mier*da, ¿no viste como te miraba ese imbécil? Y tu todavía le sigues el juego- dijo gritandome furioso.
-Es solo un amigo, no tiene nada de malo. Además no tienes por que enojarte- dije rodando los ojos
-¿Un amigo? Vi perfectamente como se miraban y como se tomaban las manos ¿eso es de amigos?- dijo rodeando el auto y acercándose a mi.
-El solo me estaba apoyando, le platique sobre lo de mi mama y el me dijo que podía confiar en el. Solo eso, yo no lo miro con otros ojos- Solo te quiero a ti Christian, dije para mis adentros.
-Pero el a ti si- dijo mirándome furioso.
-Pues entonces es su problema, por que yo no quiero nada, mas que solo una amistad- dije mirándolo firme. Confiaba en mis palabras. Me metí al auto sin decir nada mas. Me puse el cinturón y espere hasta que se subiera al auto. Escuche como se habría la puerta del piloto y Christian se sentaba en el, arranco el carro y salimos de ahi.
Mientras miraba por la ventana, pensaba en como christian reacciono a todo esto, y por que yo le di explicaciones? Enserio, esto cada vez era mas raro. Teniamos peleas como si fuéramos pareja y nos besábamos a cada 5 minutos pero no eramos nada. Son celos dijo la vocesita en mi cabeza. ¿Lo crees? Dije yo misma ¿No es obvio? dijo esa misma voz, parecia loca hablando sola.Yo solo te quiero a ti Christian pensé tristemente mirando por la ventana.
-Y yo a ti- dijo Christian mirandome fijamente.
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Holaaa!! Como estaaaan?
Bueno, aquí esta el capitulo 8 espero les guste, esto cada vez se pone mejoooorr!! Ggg.
Cuidense y nos leemos pronto!¡Chistian en Multimedia!
Angie®
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¿Sirvienta? ¿Enserio?
Genç Kurgu-¿Una sirvienta? ¿Es enserio?- dije demasiado alterado. Que les pasaba? -¿Que tiene de malo hijo? ¿Acaso te da miedo?- dijo mi padre Bah! -Claro que no. Es solo que no necesito que nadie limpie la casa, ni que me haga el desayuno. Yo puedo solo- B...