La historia detrás de los grandes himnos de Guns N' Roses, el gran amor oculto detrás de la banda más peligrosa del mundo, una ficción que es más realidad que fantasía.
Una mujer joven que quiere comerse el mundo y un hombre que todo lo que toca lo...
"Hay muchas formas de quererse, ¿sabes? Pero la suya era... total. Un amor puro, increíble, alucinante. Un amor especial como hay pocos. Y ellos lo sabían. Todos los enamorados del mundo creen que su amor es único y distinto, pero el de ellos si lo era. Estaban hechos el uno para el otro. Se tenían y deseaban fundirse en uno solo. Cuando estaban juntos el tiempo se aceleraba, y cuando estaban separados se hacia eterno. Cada beso, cada caricia, era un puro sentimiento desnudo. Podían pasarse horas mirándose a los ojos y nada más, pero cuando se acariciaban, se besaban... entonces... no hay palabras para describir esa emoción." —El diario de Noah
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Capítulo 16: Bound To You
Christina
Termine de pintar la pared de la ventana mientras Steven y Dave lo hacían con las otras dos de la gran sala. Todos los muebles, los sofás y las cosas estaban cubiertos por sábanas para evitar que se salpicarán.
Escuche desde arriba a Mariah pidiendo más pintura, todos estaban colaborando con la remodelación, por suerte, entre más manos, mejor quedaría.
Fui hacia el garage y saque otro bote de pintura, con mucho esfuerzo lo logré subir por las escaleras sin pedirle ayuda a alguno de los chicos. Yo era fuerte o intentaba serlo más bien. La verdad mi masa corporal no cooperaba mucho.
Llegue hasta el cuarto de Joe donde estaban pintando, Britney estaba subida en la escalera rellenando lo más alto de la pared, Mariah limpiaba las gotas de pintura que habían caído en el suelo antes de que se secaran y fuese peor quitarlas. Joe con un largo palo pintaba el techo regando pintura por todo lado.
Le lanzó una toalla con las que limpiaba a la cabeza. —Idiota, mira como tienes el piso, ya lo vas a dejar blanco.
—Mejor que todo quede blanco igual pondremos la alfombra encima así que ni se verá —se encogió de hombros despreocupado con toda la ropa y su rostro manchado de pintura.
Resopló, —¿Y no me lo pudiste decir antes?
Se sentó en el suelo cansada.
—¿Dónde están los pequeños diablillos? —les pregunte curiosa al no escucharlas por ningún lado.
—Abajo con mi mamá pintando la oficina de mi abuelo.
—Vamos amigos, trabajen que dentro de poco nos darán comida para tomar fuerzas nuevamente —los animé riendo y salí detallando como mi ropa estaba toda manchada a pesar de que había intentado tener cuidado, por suerte era ropa vieja.
Al subir mi mirada me encontré con Izzy y Axl de pie en el pasillo con cara de perturbados, sonreí divertida al ver sus caras. —¿Vieron un fantasma? —pregunté acercándome y ellos se giraron mirando en mi dirección.
