☽TSUKINOME☾ || ❣IchiRuki❣

~Capítulo Tres: Una mirada orgullosa~

Será mejor que no derramemos lágrimas, porque ésa es la derrota del cuerpo ante el corazón... Porque para nosotros, eso que llamamos corazón no es más que la prueba de una existencia vacía.

***

Narra Rukia.

     Ese idiota de cabello anaranjado. ¿Cómo pudo ser tan idiota como para cruzar esa calle sin mirar antes a ambos lados? ¿Es qué no le enseñaron de pequeño que podrían atropellarlo? La sangre huele muy extraño, mi sangre, se riega por todo el suelo y se diluye con el agua. La lluvia había cesado, pude verlo antes de desvanecerme. Ahora que lo pienso, ¿en dónde estoy? Todo está oscuro, tengo frío. Pero algo está tibio, mi mano está tibia. 

     Todo está tan oscuro nuevamente, el calor se ha ido, el frío ha vuelto por todo mi cuerpo. ¿Qué ha pasado? ¿Por qué se ha ido el calor y el dolor persiste? 

«La lluvia a cesado. Gracias. . . Rukia»

¿De quién es esa voz que suena. . . tan. . .cálida?

***

      Abro lentamente los ojos , la luz fosforescente blanca penetra mis pupilas provocando que se encojan al instante, inmediatamente me cubro los ojos con el antebrazo pero un dolor punzante me invade el costado, suelto un alarido. Me muevo involuntariamente y un nuevo dolor tan febril como las llamas del infierno carcome cada centímetro de mi cuerpo. Unas fuertes manos me toman con fuerza de los hombros y me obligan a quedarme recostada, no puedo diferenciar las formas frente a mí.

—Tranquila, Rukia— me dijo una voz familiar.

      Me quedé quieta, fije la mirada y la imagen frente a mis ojos comenzó a hacerse más nítida. Solté el aire contenido en mis pulmones acompañado de un ligero ardor. Sus manos me soltaron lentamente mientras intentaba acomodarme en la camilla.

—Renji, ¿qué ha pasado?— pregunte. Me llevé la mano a la frente pero la baje de inmediato cuando una punzada taladró mis costillas.

—Te atropellaron— intervino una voz temblorosa y femenina.

      Desvíe la mirada. Observé a Inoue de pie con sus manos echas un par de puños sobre su pecho, sus ojos estaba vidriosos, podía ver como temblaba. Le sonreí. Entonces la imagen del idiota de pie mirando el suelo a media calle vino a mi mente. En ese momento no pensé en nada, mi cuerpo actuó por sí solo y después el impacto del auto contra mi cuerpo. Pude sentir como mis huesos chasqueaban, no entiendo porque estoy aun viva.

—Kuchiki-san, me tenías muy preocupada— murmuró Inoue al borde del llanto.

—No te preocupes, Inoue— le dije sonriendo.

—Sí, no te preocupes, Inoue, fue mi culpa— masculló un hombre de pie en el umbral.

      Esa voz. . . yo conozco esa voz. . . es. .  cálida. Es alto, un poco más bajo que Renji, tiene el cabello anaranjado brillante, piel blanca y ojos marrones. Es él, el idiota que no se fija al cruzar las calles, lo mire atentamente. Tenía el ceño fruncido y se tallaba la nuca con la palma de la mano mientras soltaba el aire contenido de sus pulmones. Se acercó a nosotros, llevaba su traje puesto, un poco húmedo todavía, su saco estaba sobre su antebrazo y tenía la corbata floja.

—Por mi culpa estás así, sí hubiera mirado ambos lados al cruzar la calle no tendría cuatro costillas fracturadas y todos esos moratones y tallones por todo el cuerpo— me dijo, entorne los ojos —. No sé que más decir, lo siento.

—Da igual. Sólo procura no volverlo a hacer— musite.

— ¡Oh, también me alegro de que Kurosaki-kun esté bien!— exclamó Inoue de repente, agarró el brazo del pelinaranja mientras las lágrimas se desbordaban de sus ojos, él ni se inmutó.

      Suspiré.

— ¿Cuándo volveré a casa, Renji?— le pregunte al pelirrojo.

—El médico dijo que te querían tener en observación por una semana más, les preocupa el golpe que te diste en la cabeza.

      Asentí sin mucho ánimo. Entreabrí los labios para preguntarle algo pero Kurosaki Ichigo e Inoue seguían dentro de la habitación. Mire a Renji, él ladeo un poco la cabeza y asintió.

—Tuve que decirle, Rukia. Después de todo es tu. . .

      Alcé su mano en un ademán de silencio, él comprendió de inmediato y guardó silencio. Coloque mis manos sobre mi regazo, tengo que ser fuerte.

—Los gastos del hospital ya están pagados— me dijo Ichigo. Elevé la mirada un tanto preocupada —. Sólo me estoy haciendo responsable de mis actos.

      No sé que responder. Bueno, más bien no puedo contestarle nada, tengo la mente en blanco, mis pensamientos están con otra persona, tengo escalofríos. Renji coloca una mano sobre la mía pero la retiro de inmediato.

—Ichigo, será mejor que te vayas— dice Renji —. Yo cuidaré de Rukia, no hay necesidad de que te quedes más tiempo.

—Pero ya les dije que me responsabilizaré. . .

— ¡Qué te largues!— grité de pronto. Todos se alarmaron.

     Una lágrima cayó sobre mi mano, todo iría bien si Renji no le hubiera llamado a él. Llegué apenas ayer a esta ciudad y tengo este tipo de problemas, nunca me lo perdonará, es demasiada presión. Ichigo e Inoue salieron de la habitación dejándome a solas con Renji, estando sola no puedo llorar, no lo puedo hacer. 

—Tienes que calmarte. . . no puede ser tan. . .

     Algo interrumpió sus palabras, lo sé, todo está de nuevo en silencio, un horrible y gélido silencio. Mis manos están temblando y me es imposible tragar saliva, el nudo en mi garganta es muy grande. Debo elevar la mirada, con orgullo. Veo a a Renji cabizbajo, la puerta está abierta, y una la silueta de un hombre está de pie en él.

—Así que te atropellaron por culpa de Kurosaki Ichigo, Rukia— me dijo él con la habitual frialdad de siempre.

—Nii-sama. . .— es todo lo que pude decir en aquel momento.

Fin de la narración de Rukia.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Konnichiwa~ Jeejeejee:3

      Espero que se encuentren bastante bien. Gracias a todos aquellos que les dan una oportunidad a este libro, de verdad espero que este siendo de su agrado. Los amo♥~!

Cuídense. Un beso.

P. D.: Me encantó la foto de Rukia-chan que está en galería♥ :3