You •Rock Lee y Tú• ◀Naruto Shippuden▶ [EN EDICIÓN]

Capitulo 13: [Corto 1/3] La declaración de una mujer.

— Lee... — susurré su nombre y acaricié su cabello bajando hasta su mejilla, aquel se apoyó en mi mano e hizo un gesto de agrado hacia mi. — Lee... te quiero. — las palabras salieron por sí solas.

«¡Te lo dije! Te gusta Lee»

¡¿Es que siempre apareces en los momentos que más disfruto?!

«¿Lo disfrutas? ¡Pareces una de esas chicas que están perdidamente enamoradas del chico que les gusta»

Te equivocas, es una simple atracción.

«Ajá...»

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Aquel me miro con asombro, sus oscuros ojos me miraban ¡Demonios, ya comenzaba a ponerme nerviosa!.

Mi estúpida consciencia tenía razón, me gusta Lee, estoy enamorada de él. Pero no se da cuenta... yo no debo gustarle en realidad, ¿Qué persona puede pedirle a otra que recientemente conoce, que sea su novia?. Si, exacto. Solo alguien que no le gustas de verdad haría eso.

Estaba comenzando a desesperarme, mi respiración se cortaba y cada vez me ponía mas nerviosa. Baje la mirada y aquel me sostuvo abrazó con fuerza. Él por fin estaba reaccionando, pero... me causaba pánico pensar que me podría haber abrazado por pena a lo que yo le dije.

Me quedé con una mirada de asombro mientras este me acurrucaba en su pecho. Podía sentir su aroma de nuevo, definitivamente voy a desmayarme.

— __________... — dijo por fin. Yo escuché atentamente. Pero no dijo nada. Simplemente me separé de él, rompiendo aquellos lazos que nos unían.

Hice una cara de enfado. ¡Aunque sea ten el valor de rechazarme!

— ¡¿Crees que puedes tomar a la ligera la declaración de una mujer?! — grité haciendo que este se exaltara. Aún no decía nada ¡Rayos! Bien, _________, si el sentimiento que despertó Lee es amor... entonces lo cerraré para siempre y culminaré este capítulo.

Me di media vuelta, aquel quiso sostenerme de la mano pero me hice a un lado.

Salí de su habitación, corrí hasta llegar a la mía y cerré esta con llave. Me acurruqué en mi cama, haciendo que mi espalda y parte de mi cabeza se apoyaran en la pared. Esta estaba fría, pero no me importó. Me acobijé entre mantas y sábanas, poco a poco fui quedándome dormida.

Quizá... fue algo extremo gritarle, tal vez se sintió apenado y por eso no dijo nada.

«O tal vez no siente nada por ti y ya»

Sinceramente quisiera que te mueras pero... es que tienes razón, lo que pasa es que no puedo creer lo que me dices...