Aquí y Ahora

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Me deja realmente fascinada la capacidad que tiene Nick para que todo le salga como desea, me da curiosidad saber si lo pide como favor o como una orden, mi hermana se fue con mis padres, Bob y Ben. Wanda y Joseph también se fueron con ellos, Jeremy y la suripanta desaparecieron. Estamos deliciosamente solos.

Nick me echo de la cocina, va a cocinar el. ¡Me muero de la ternura! Dependerá de lo rica que este la comida el espectáculo que le daré hoy. Subo a mi cuarto y me meto en la ducha, no tengo tanto tiempo para darme un baño. Me cepillo lo dientes y me pongo crema, sonrío traviesa, busco la bolsa que compré hoy con un poco de nervios; me pongo la lencería y las medias negras. Cuando me veo en el espejo me sorprendo. ¡Madre Mía! Estoy caliente... Muy caliente. ¡Hoy me divertiré! Ya estoy mojada de la expectación, sonrío.

Busco mi perfume, ¡Amo mi perfume! Acaricio el frasco con adoración, su liquido rosa me fascina y suspiro. Me pongo un poco de Coco Mademoiselle de Chanel e inspiro profundo el aroma.

Hoy seré una gatita muy mala. Me seco el pelo y me hago unos suaves bucles; solo les doy un poco de forma y dejo que se acomoden en mi pelo largo, me lo despeino un poco. Me pongo sombra negra en los ojos, delineador y mucha mascara de pestañas; mis ojos parecen aun más claros. ¡Resaltan un montón! Me juego por un labial color bordó, me parezco a la suripanta con el maquillaje exagerado, pero quiero morbo en su máxima expresión; quiero conocer todas sus facetas en el sexo. Me observo en el espejo y soy otra mujer; mis ojos son turbios y peligrosos me muerdo el labio y sonrío; despeino mas mi pelo. Le daré lo mejor de mi a este hombre. Me tienta aparecer solo con el Babydoll, pero solo lograré que se desespere y todo se dará muy rápido. Me pongo su remera mas grande, pensé en una camisa pero todas son apretadas y marcan mi lencería, le saco un jogging; estoy nerviosa.

Bajo las escaleras e inspiro hondo, es un buen comienzo el aroma que se siente; me acerco a la cocina despacio y me siento en un taburete bien callada. Tiene el pelo húmedo pero despeinado como a el le gusta, en algún momento se dio una ducha rápida, ambos estamos ansiosos por lo que nos espera. Sonrío embobada cuando voltea... se queda duro; su expresión concentrada cambia en un segundo, sus ojos se oscurecen y pone esa sonrisa peligrosa que hace estremecer mis entrañas. Mi expresión no cambia mientras quiero parecer tranquila, segura de si, mi peor versión de gatita cachonda. Quiero que me recuerde mas que a sus gatitas plásticas. Puedo ser mejor que eso. Lo único que me faltará es el látigo; estoy bien metida en mi papel. Larga un bufido y me mira fastidiado.

-Ahora es cuando me empieza a doler. No sonrío, solo me muerdo el labio y lo como con los ojos. Veo que puso la mesa aquí en la cocina, esta todo perfectamente ordenado; no se olvidó de nada. Las servilletas que puso son del color de mi labial, se acerca al mueble bar, saca dos copas y un vino tinto, duda un segundo y lo pone en la mesa Louis Jadot 2006 Chambertin Clos de Bèze no tengo idea de vinos caros pero presiento que debe salir demasiado.

-Si mañana muero que valga la pena. Sonríe mientras lo observo. Sip, debe ser muy caro.

Sirve el plato de entrada Aguacate relleno con camarones, es un plato afrodisíaco, ha pensado en todo con detalle, me lo esperaba. Antes de sentarse abre el vino y sirve un poco en cada copa, no quiero probarlo; siento que es un pecado hacerlo. Se sienta y se saborea, una punzada familiar se pega a mi sexo; pasa su mano por mi mejilla y yo entreabro los labios, pasa su dedo y exhala. Yo gimo. No tengo demasiada hambre, quiero empezar a jugar; se separa un poco y me señala el plato, empiezo a masticar lento para no parecer desesperada, aunque lo esté. Miro mi plato sorprendida, esta delicioso. Sonríe.

Comemos en silencio pero no dejamos de mirarnos ni para observar nuestros platos, el vino está maravilloso, nunca había probado algo así. Tiene una mezcla de gustos como a canela y cereza. Delicioso, casi tanto como el. Lo observo mientras que hace sus movimientos perfectos, se endereza y levanta los platos, aun no había terminado; se ve que esta ansioso. Entreabro los labios y respiro pausadamente, trae dos platos; cuando me lo pone al frente lo observo ¿Que es? Lo miro pero no le pregunto.