A Nelly

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Apoyada la barbilla en tus manos, sentada miras tranquila el hondo océano, a que llegue el hombre amado.

Ah ser querida la vida nos enseña, pero ya deseas el tesoro aunque seas pequeña, y ves la respiración del mar lentamente subir y bajar esperando algo y no sabes qué será,
de dónde vendrá,
a dónde se irá,
sólo el viento suspira y dice
¡Ve!
Sumisa dejas el agua reflejarse en esos dos charcos que tiene tu mirar, ¡Tal vez!
Piensas en las maravillas qué encierra el mar, en los tesoros que no se pueden capturar, o en lo contrario de la vida que es corta y muy sufrida y te quedas ahí pasmada cuando la tarde toma su cobija
hace la cama y deja una estrella asomarse por una rendija.

León

14 octubre 03

Al sol lo abraza el frio.

Cachitos De Mi CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora