NERD.

Capítulo 43

                                                                                                                                                                                                                               

                                                                                                                                                                                 

El aire abandonó mis pulmones por un momento, solo mirándolo, observando el dolor a través de sus ojos. Quedé sin palabras. Tan muda, con la voz estancada en la garganta. Mis manos mantenían un ligero temblor, sin poder quitar mis ojos de los suyos, sintiendo mi corazón tan rápido como una locomotora.

—Harry...

—Cierra la boca, Liam —calló Harry, sin alejar la mirada de mí. Y quité la mirada yo, quité mis ojos de los suyos, sintiendo éstos arder, dejando caer las lágrimas en silencio. Solté un sollozo, cubriendo mis ojos con las manos luego, negando una y otra vez.

—L-lo siento... Harry, lo siento, lo lamento —murmuré temblorosa, nerviosa. Di un paso adelante, y mi corazón se hizo añicos cuando él retrocedió uno a mi vez—. Harry...

—¿Fallé en algo para que me hicieras esto, Daphne?

—No es tu culpa.

—Me he debatido, y creo que no lo es. Pero entonces no puedo entender el problema. Sé que tuve que hacer algo mal, Daphne, dime qué es, por favor... No entiendo esto, no puedo c-comprender si... Si te di motivos alguna vez para hacerme esto —dice, con la voz algo rota, pero lo bastantemente dura. Sello mis labios, queriendo resistir los sollozos, más no puedo, y mi suave llanto sale por entre mis labios sobre casi un alarido.

—Lo siento, Harry. Es m-mi culpa. Sé que no debí hacerlo, yo, solo, e-estuvimos...

—Fue mi culpa, Harry —aclara Liam, tras de mí. Me giro, observándolo, negando; mas él asiente—. Yo la besé. Yo besé a Daphne, Harry.

La mandíbula de Harry se tensó notablemente, sus ojos ahora más que tristeza y dolor, poseían enojo y tanta furia. Sonrió de manera irónica de pronto, bajando la mirada y negando. Lo miré confusa, y sentí temor por lo que percibí que se aproximaría. Y sucedió: Harry me apartó, propinando pronto un puñetazo en la mandíbula de Liam. Solté un grito, alertada, mirando asustada a Harry. Sollocé bajito, me sentía tan tonta, sin saber bien qué hacer. Liam puso sus manos delante de su rostro, y Harry continuaba tras de él, propinando tantos golpes como podía, y sé que Liam iba a cansarse de aguantar.

—¡B-basta! ¡Harry, no! —intenté detenerlo, pero era más fuerte que yo notablemente y solo lograría lastimarme si me interponía. Estaba tan nerviosa.

—Te advertí, Liam. Te dije que te alejaras de ella. ¡Decías llamarte un amigo! —dice, con tanto enojo, fastidio. Mis mejillas húmedas y mi cuerpo tembloroso, colocándose delante de Liam, mis ojos siendo captados por los oscuros verdes de Harry—. Daphne...

—D-déjalo —murmuré, mirándolo con miedo.

Mi corazón latía tan rápido, sentía que explotaría en algún momento, que acabaría conmigo misma.

Me observa, tenso, y levanta la vista, mirando a Liam.

—Eres repugnante, Liam.

—No soy yo quien ha fallado desde un comienzo, te pediría que tengas la cortesía de callarte. N-no es por ti por quien soporto esto, Styles —murmura Liam, aún detrás de mí. Él toma mi mano y la baja con cuidado, pero me mantengo delante de él. Temo porque Harry pueda lastimarlo más.