Es una historia de amor de dos almas que están destinadas a estar juntas, tendrán dificultades en el camino pero siempre encontraran la manera de volver a unirse.
Por que dicen que el amor todo lo puede
Habían pasado algunos días desde la cena en casa de mis papas y las cosas entre Alex y yo iban de maravilla, hoy me estaba preparando para salir a cenar con Lily y Luis, los cuatro quedamos en ir al billar y luego a cenar, si no sé jugar billar pero me quiero divertir.
Alex y yo pasamos por nuestros amigos, estamos abajo esperando por ellos y es que hoy seria la primera vez que Anelí se quedaba con niñera, ninguno de sus abuelos estuvieron disponibles el día de hoy así que niñera tuvo que ser.
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- Aww cariño míralos ahora hasta visten igual- entrecierro los ojos para ver a mi amiga y todos ríen- calla que fue un regalo y a mi me gusto- los cuatro nos dirigimos a un billar cerca del centro, hay poca gente para ser un Viernes por la noche pero es justo lo que necesitamos, Alex y Luis saben jugar mientras que mi amiga y yo observamos, tomamos unos tragos y de ahí a cenar unas deliciosas hamburguesas en food truck que se pone cerca del parque- y a donde es que van Alex- es una sorpresa- Lily rueda los ojos- y de seguro le vendaras los ojos- sonrió por que pensé lo mismo- no, claro que no Lilian pero si me gustaría poder ver la cara de sorpresa de Ana- al escuchar mi nombre me giro a verlo- ¿que pasa?- me mira mientras se come una papa- no nada- claro que pasa, cree que no he notado que ya tienes días en que me dice por mi nombre, donde quedo el "pequeña"- voy a los sanitarios ¿vienes Lily?- sip te acompaño- caminamos y ya que nos hemos separado unos cuantos pasos Lily comienza con sus preguntas- ¿todo bien?- si ¿por que lo preguntas?- haber Ana te conozco y ni creas que no me he dado cuenta que Alex te habla por tu nombre ¿por que el cambio?- no lo sé, tiene días que no se lo escucho decir y no se por que- ¿ han tenido problemas?- no Lily para nada, las cosas van bien en verdad- noto que mi amiga no se queda convencida pero no sigue con sus cuestionamientos- salimos de los sanitarios y vamos de nuevo a la mesa, al llegar me doy cuenta que Alex guarda su celular y luce un poco molesto mientras que Luis niega con la cabeza- ¿ todo bien ?- si Ana todo bien- Luis es el que contesta mientras Alex bebe su bebida- bueno creo que es hora de irnos ¿ mañana es cuando salen Alex?- si Luis nos vamos cuatro días- dejamos a nuestros amigos en su casa y nosotros nos vamos a mi departamento, la noche es tranquila ya que por la mañana Alex quiere salir temprano.
Salimos de casa de madrugada, cinco de la mañana para ser exactos y yo voy más que dormida, me tomo mi café antes de salir que sino de seguro me quedo dormida a mitad del camino- vamos anímate, son solo seis horas de camino pero el clima es agradable- ruedo los ojos porque trata de convencerme pero no le perdono aun que me levante tan temprano- subimos a la moto y salimos a carretera.
Según Alex vamos a mitad del camino y yo ya quiero llegar, disfruto estar con él pero me siento algo cansada, me siento adormecida, mi nariz debe de estar roja por el helado viento aunque lo agradezco porque me ha mantenido despierta; lo escucho hablarme pero francamente no le entiendo y supongo que se da cuenta porque baja la velocidad y orilla la moto en un mirador, se baja y me ayuda a bajar también, me quita el casco y me besa- hey ¿estás bien?- si es solo que me siento cansada, quiero dormir- me toma la cara con sus manos y pasa su nariz por mis mejillas, deja besos regados por toda mi cara- te prometo que cuando lleguemos te dejare dormir, la vista te encantara eso lo puedo jurar, ¿tienes hambre? ¿Sed? ¿Quieres algo antes de seguir?- sonrió por que me causa tanta ternura que se preocupe así por mi- no gracias, estoy bien- me gira para que pueda ver la vista y es hermosa, la playa está sola en estos momentos pero me gusta como se ve
