Capítulo 33.

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-Mami... —Susurré al leer. Ayato salió del baño.

-¿Qué haces con mi computador? —preguntó un poco molesto.

-Estaba aburrida... Mi mami está aquí. —Ayato no dijo nada.

-¿Sabes que va a pasar hoy? —Le miré extrañada.

-Mmm, nop. Dime —Tenía el presentimiento de que no sería algo bueno.

-Podrás salir de Aogiri. —Pasó la toalla por su cabello.

-Pero ya podemos salir cuando se nos dé la gana, la única condición de las salidas o "libres" es que volvamos antes de las 24 horas ¿No?

-Dije que saldrás de aquí... Es una orden. —Le miré un poco desconcertada.

-Está bien. No estaré aquí. —Dije seria-: Pero quiero que me respondas ¿Por qué siempre tienes que tratar tan mal a todo el mundo? El mundo no tiene la culpa y es molesto, sobre todo para mí... ¿Por qué me tratas tan mal? —No me respondió, solo miró hacia troll. Me acerqué a él—: Ayato, somos amigos... Confía en mí... —Le tomé la mano y sentí un hormigueo que me llegó a hasta el corazón.

-Mis... —Miró a través de la ventana. Sus ojos mostraban rabia pura, ira. Me acerqué a él y le rodeé con mis brazos, abrazándolo con fuerza. Él estaba enojado con el mundo, con él mismo y quería descargar toda esa ira que tenía acumulada ¿Por qué estará tan enojado?

-No me tienes que decir nada si no quieres. —Me separé de él y le miré a los ojos, ahora era tristeza... Touka me había dicho que sus padres habían muertos y que ella tuvo que cuidar a su hermano, porque la vecina los había delatado ante la CCG. Estuvieron un tiempo en Anteiku y luego, Ayato se fue, desde entonces no se habían visto en mucho tiempo. Ayato era muy pequeño, debió haberla pasado muy mal.

-Mírame, Ayato. —Puse ambas manos en su rostro... Teníamos tanta cercanía el uno con el otro...

-Vuelve después de las 11:00 PM. —Le sonreí y le di un pequeño beso en la frente.

Suspiré y salí de la habitación con el corazón en un puño por haberle visto en esa fase tan sensible. Mi rostro ardía. Me llevé ambas manos a las mejillas y me di unas palmaditas.

-Vuelve en ti, ______. El está actuando como si no hubiera pasado nada, tu harás lo mismo y dejarás de sentir esto por él.

Comencé a caminar, pasando por una puerta abierta, en donde estaban Eto y Tatara hablando.

-¿Crees que es eso? —le preguntó Tatara a Eto.

-No puede haber otra opción, son demasiadas coincidencias... Es muy interesante todo esto. —Le respondió Eto. Tatara suspiró.

Seguí caminando ¿De qué estarán hablando? Deben ser cosas privadas, no debería haber escuchado eso.

Fui al departamento de Kaneki. Allí estaban Hinami, Tsukiyama, Banjo, sus seguidores y Nishiki.

-¡Llegué! —Dije. Todos se dieron vuelta a verme y me abrazaron, menos Tsukiyama.

-¡______-chan! —Gritaron apretándome.

-Me asfixian. —Dije. Me soltaron y les sonreí. Nos fuimos a sentar.

-Bonjour, belle princesse [Buenos días, bella princesa] —Saludó Tskiyama haciendo una reverencia y besándome la mano. —Le sonreí.

-Bonjour, Tsukiyama... Eh, necesito ocupar el baño ¿Dónde está? —Me puse de pie y vi una puerta que decía baño, me acerqué.

-¡No entres! —Gritaron todos.

libérate... [ayato kirishima y tu] •Editada•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora