Parte 12 Despecho tormentoso

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Y mientras tigresa llevaba una vida de difícil adaptación; en el valle de la paz las cosas se habían puesto algo tensas,  pues con la llegada de Misato los cuatro furiosos parecían tener discrepancias entre ellos, y ahora eran más distantes y discutían por cualquier cosa... pero víbora era la más afectada pues no podía soportar la idea de que Miasato se había convertido en una excelente estudiante y su kung fu había mejorado mucho, ella era arrogante y no dejaba solo a Po en ningún momento, ella no perdía la oportunidad de coquetear con el resto de los varones del palacio solo quería ser el centro de atención y llevar todas miradas sobre ella; el tema de tigresa había pasado a nada todos parecían haberla olvidado,  víbora debía soportar que ella les acompañará a cada misión que tenían y lo que le era peor era que peleaba al lado de po, tomando ese lugar que para ella siempre le correspondió a tigresa, el maestro shifu les había multiplicado las responsabilidades, sus entrenamientos eran duros y cada día tenían mucho trabajo con poco tiempo libre, durante todo ese tiempo la actitud de Po era peor que nunca se había vuelto amargado e insoportable y un tanto cínico cada vez que podía se escapaba noche tras noche en busca de placer, ignoraba todo lo que podía a víbora casi ni se hablaban solo en sus misiones cuando era necesario que lo hicieran, grulla, mantis y mono hacían lo mismo para no entrar en contienda con ella, Misato era coqueta y siempre que podía buscaba sacarle fiesta a los machos con sus insinuaciones ella era la más cuidada y la más atendida por todos  sin embargo hasta ahora entre ella y po todo había quedado relegado a intentos fallidos de conquistas, pero a pesar de todo esa aparente transformación de po sus habilidades se habían incrementado, entrenaba con pasión y gran dedicación podía percibir cuando alguien venía a él sin siquiera mirarlo, sus enemigos pocas veces podían ocultarse de el, su fuerza se había incrementado, era ágil, rápido y no se cansaba como antes, todos estaban asombrados con el, misato cada día estaba más impresionada y cada vez su deseo por el panda se intensificaba, pero no entendía como no había logrado a traerlo hacia ella, estaba clara que todo tenia un limite y que el panda no podía serle indiferente  a todas sus insinuaciones el tenia que caer tarde o temprano no le importaba seguir esperando después de todo lo tenia para ella sola....

era temprano, aun no amanecía del todo y una figura sigilosa se desplazaba por el palacio de jade, buscando no ser visto ni escuchado, se trataba de po que llegaba a esa hora de sus frecuentes salidas nocturnas,  pero esa mañana cuando llegaba algo cansado y somnoliento Misato lo espero y se fue directo al ataque al verlo llegar ....

Misato: hola po, hasta que al fin llegas- le hablo recostada de un columna, llevaba puesto una bata muy insinuante y sexy

Po: Misato, ¿qué haces allí a esta hora?- dijo sin sorprenderse

Misato: esperando por ti porque, necesito que hablemos y bueno todos duermen la ocasión es perfecta

Po: Misato estoy cansado quiero dormir antes que el maestro shifu nos levante a entrenar

Misato: ¿por que eres tan duro conmigo po? Prefieres vivir buscado allá afuera lo que perfectamente podrías tener acá mismo y cuando se te antoje, mírame Po ¿acaso no te gusto?-decía seductora arrimandosele casi encima

Po: Misato tu eres hermosa pero  podrían vernos por favor no aquí

Misato: no seas tonto po, todos están dormidos tu me encantas demasiado y además estamos completamente solos mi amor- cuando le dijo así po revivo aquella palabras cuando estuvo con tigresa y  lleno de ira la empujo atrapándola contra la pared

Po: ¿eso quieres? ... ¿quieres lo que toda hembra? ¿divertirte?... pues yo soy el macho y no sera cuando tu quieras, si no cuando yo lo desee

Misato: oh po eres increíble todo un semental anda puedes hacer conmigo lo que quieras yo te autorizo me canse de intentar conquistarte si tengo que ir de frente contigo lo haré porque tu me gustas enormemente....- ante aquella palabras po hecho a un lado su cansancio y con frenesí se volvió sobre ella besándola sin casi  permitirle respiro, ella estaba extasiada totalmente deseosa quería que po la poseyera allí mismo pero de pronto el paro y la dejó caer al suelo y se alejó un poco... llena de deseo a ella no le importo, se arrastró por el suelo y se le acercó se puso de rodillas frente a él y se atrevió a bajar sus pantalones, po estaba quieto inmóvil, ella le miró con aquella lasciva mirada dispuesta de darle  un momento único de placer, po bajo su mirada esperando que ella procediera... no le importaba nada, sin embargo cuando miro al frente entre la oscuridad le pareció ver los ojos ambarinos de tigresa, en seguida dio un salto y subiendo sus pantalones ignoro a misato y corrió a donde pensó que los había visto, su corazón palpitaba fuerte, pero allí no había nada ellos estaban solos

Cena para DosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora