Antesala del fin (Ritual Yulai I parte)
Yu Fei espero mucho tiempo por Han Xin, pero en vista que no aparecía se vendo la herida y fue a investigar ya estaba oscuro era entrada la noche y ellos no habían regresado como estaba planteado que lo hicieran, en el camino encontró la cabeza de Kento la tomo y siguió el rastro de Han Xin hasta muy cercano a la cascada y se orientó notando que la persecución probablemente había ido más allá del gran muro, la noche estaba oscura, aunque eso no le afectaba, puesto que en su condición de cazador sus ojos tenían una visión preparada para enfrentar la oscuridad, pero no podía continuar la búsqueda tenía que volver era menester que se reportara sin embargo el hecho de la tardanza de su compañero solo podía decirle una cosa él no podía estar con vida y además estaba percibiendo muchos olores diferentes que provenían de la frontera, por lo que alcanzaba a detectar sospechaba que se trataba de un ejército quizá revisando la zona y no podía exponerse, a pesar de estar lejos la sensibilidad de este cazador era abrumadora y bastante exacta, sospechaba que han Xin había sido presa de sus enemigo tras el muro y eso había ocasionado el movimiento de las tropas que alcanzaba a detectar; apretó su puño lamentero despreciando el descuido de su compañero, si bien era cierto que había caído solo demostraba que su torpeza no tenía límites y eso le costaría a él mismo delante de Yusei que no tenía compasión para corregir errores... sin más que hacer decidió regresar llevando consigo la cabeza de Kento como prueba, aunque sabía que a esa hora ya el ritual debía haberse iniciado, iba molesto estaba consciente de que al volver probablemente tendría que pagar caro el error de Han Xin y el suyo propio, pero aun así estaba dispuesto a enfrentar las consecuencias....
Volviendo al reino de Ryu Yuru, horas atrás antes de lo acontecido con Kento y las tigresas
La noticia del nacimiento del príncipe pronto recorrió el palacio y fueron enviados voceros para anunciar su llegada por todas las calles del pueblo aquel acontecimiento era anunciado con bongos y platillos, Yiru Maru dejaba ante todos por sentado que el príncipe el único heredero del trono había nacido y era un bengala sano y fuerte tal y como siempre lo había deseado, la orgullosa madre descansaba junto al infante con apenas horas de nacido, gracias a la intervención de tigresa que en su voluntad le pidió a Kiashi que lo sanara y el cachorro ahora gozaba de buena salud.
Por otro lado y a diferencia de Mikuma, la situación era bastante delicada para tigresa su vida estaba sostenida por un filo doble mientras que Kiashi entre ambos extremos permanecía creando aquel puente para que Kioki hiciera su trabajo de sanación lo más rápido posible tratando de no dañar la vida de Ling su que estaba en medio y aunque ciertos factores inesperados surgieron de pronto él se mantenía activo, sanaba el Shi buscando terminar con la separación que originalmente había hecho tanto estragos, pero también procuraba cortar el contacto que Po se empeñaba en mantener con tigresa dándole su propia vida para cubrirla de algo que Kioki ignoraba y que hasta ahora le había brindado la capacidad de resurgir de sus cenizas como el fénix y muchas habilidades que estaban ligadas a su psiquis incluso se había podido liberar de la prisión en que estaba pudiendo regresarla a su propio cuerpo, pero aquello resultaba ser mortal para Po que daba todo para mantener a tigresa a salvo, estable, y fortalecida, Kioki no dejaba de intentar romper aquel nexo, pero por alguna razón Po había generado una barrera que se lo impedía, Po permanecía tan unido a tigresa que el mismo maestro sanador estaba asombrado, solo podía pensar que algo grande ocurriría de continuar así, cada vez sentía más aquel peso que lo obligaba a él a salir del plano donde estaba, Po no lo quería allí porque usaba fuerza extra concentrándose para repelerlo y evitar que lograra romper la unión que mantenía con tigresa, una diferente a la del Shi....
KIASHI ANTE MIOGA...
Tigresa estaba en las catacumbas permanecía en aquel sueño profundo e inerte encadenada como se había ordenado, bien vigilada, sin visitas, sin su mucama al lado, nadie podía entrar o salir de allí no obstante acabara el último de los rituales. Los guardias estaban apostados alrededor de su celda cuando uno de ellos noto algo insólito e inusual y curioso se acercó lentamente para corroborar que lo que estaba viendo no fuera una ilusión producto de su imaginación, él se quedó impávido abrió sus ojos de asombro no podía creer lo que estaba mirando y para cerciorarse que realmente no lo estaba imaginando llamo a uno de sus compañero
ESTÁS LEYENDO
Cena para Dos
Romanceél solo quería un instante a solas con ella .... un instante para poder decirle lo que ella significaba para él ... y aquella cena era el momento indicado solos los dos sin que nadie mas interrumpiera .....pero hay circunstancias en que el destino...