Mi Debilidad |Liam Payne|

Capítulo 36. ''No dejaré que nada te pase''

Me hundía en mis propios pensamientos.Estaba totalmente desesperada pero lograr no dar a flote tal estado de ánimo. Liam me ayudó junto con Zayn a ordenar la sala.

- Creo que debería llamar a la policía. –Murmuré a los chicos, ambos me miraron al instante pero su vista se desvió hacía mi madre que venía bajando las escaleras.

- Mo, estamos hablando de tu padre. –Intervino mi madre haciendo gesto de compasión. Cielos.

- ¿Qué no ves el moretón que tienes en la mejilla? –Le escupí furiosa. Después de todo ella seguía siendo la misma mujer cobarde que dejamos antes de venir aquí.

- Y tú ¿No ves el daño que le provocaría a Allie ver a su padre en prisión? –Comenzó la discusión delante de Liam y Zayn. All se encontraba en su habitación en la planta de arriba, le dije que fuera allí a jugar con sus muñecas mientras ordenábamos el desastre en el que estaba hecha la casa.

- Mira mamá, en primer lugar ella ahora se está preguntando qué te ha pasado en la cara ya que gracias a Dios no ha presenciado el golpe, y segundo, él lo único que le provoca es temor. –Casi le grité pero contenía la rabia que tenía en aquellos momentos ¿Cómo se atreve a decir tales cosas? ¿No se da cuenta de que le ha golpeado como lo hizo anteriormente?

- Es el hombre con el que me casé ¿Qué es lo que no entiendes? –Dijo en gritos ahogados moviendo la mano hacia tras y adelante con los ojos cristalizados.

Iba a hablar, a responderle que lamentablemente fue el hombre con el que se casó pero Zayn me interrumpió antes de decir cualquier palabra.

- Yo tampoco creo que sea una buena idea. –Susurró levantando el sofá.

- ¿Por qué? –Le pregunté dejando a mi madre de lado. Liam había permanecido muy callado en todo este rato que ha transcurrido, como si no quisiera hablar del tema.

- No lo sé, hoy en día la policía no hace absolutamente nada por el bien estar común. –Dijo observándome, estaba mintiendo.

- Aun así estaría en una lista, no sería un ciudadano más. –Dije enfurecida, más con mi madre porque le he pedido cientos de veces que ponga la bendita denuncia y nunca lo ha hecho.

- De todas formas, no sería una buena idea. –Replicó el moreno ¿Quería llegar a un punto en específico?

- ¿Qué estás queriéndome decir? –Le pregunté dejando de hacer lo que estaba haciendo.

- Nada. –Susurró cerrando los ojos. Liam tan solo observaba.

- Zaaaaayn. –Le llamé acercándome ¿Enserio cree que lo dejaría hasta ahí? Había algo más en todo esto.

- Nada Mo, no te preocupes. –Murmuró sonriendo. –Liam, dile que todo está bien. –Dijo pidiéndole ayuda, lo que solo hizo provocar en mi más curiosas ya que era obvio que Liam sabía algo.

¿Acaso tiene que ver con el asunto del hospital? ¿O de que ambos la noche anterior, hayan tenido que salir de un momento a otro?

Liam dio un suspiro, miró a Zayn y luego a mí, y luego de nuevo a Zayn y después a mi madre.

-Ven Mo. –Dijo extendiendo su mano con un tono de devastado.

Acepté su mano y él la tomó suavemente. Me condujo hasta la terraza trasera de mi casa. De ahí podíamos observar las olas solitarias que teníamos en frente, pero aun así el paisaje por más hermoso que fuera y extravagante de ver no le ganaba a la tensión que se había apoderado de mí en las últimas horas.

- Escucha, no te alteres por lo que te voy a decir ¿Vale? –Susurró masajeando con las yemas de sus pulgares mis mejillas.

- ¿Qué? –Le cuestioné nerviosa.