Capítulo 38. ''Los límites se acercan''

6.9K 249 5
                                    

Estaba preparada para oírlo.

¿A caso no llevo esperando esto demasiado tiempo? Claro que sí, me respondí a mí misma. Nos encontrábamos en el jardín trasero de mi casa. Era lo bastante lindo y acogedor para mantener una conversación con Liam en medianoche. No hacía frio, el tiempo ha estado templado y el viento que golpeaba nuestros rostros era bastante fresco.

Estaba balanceándome levemente en la silla-columpio del jardín. Liam estaba de pie observando el cielo estrellado de aquel invierno. A pesar de todo, los días han estado calurosos este último tiempo. Mi mano estaba ligeramente en la cadena plateada del columpio y mi cabeza descansaba sobre esta mientras lo observaba, impaciente.

- Bueno, el 6 de Marzo tengo que irme. -Dijo volviendo su vista hacia mí de la nada. Eso me pareció gracioso, la forma en la que de pronto anunció algo -que ya sabía- así sin más, pero contuve la risa.

- Eso ya lo sé. -Dije con tono de ''es obvio''.

- Ah sí, claro. A propósito ¿Quién te lo dijo? -Preguntó. ¿Es mi idea o estoy conociendo la faceta de un Liam distraído y nervioso?

- El Señor Clouston. -Susurré.

- ¿Enserio? -Preguntó con un tono sereno, no molesto si no sorprendido.

- Sí, y me ha dicho muchas más cosas. -Le informé orgullosa de aquella conversación, agradecida por su seguridad al contarme las cosas.

- ¿Enserio? -Su incredulidad era evidente.

- Sí ¿Qué hay de malo eh? Al menos él ha podido decirme más cosas que tú mismo. -Murmuré con cierto rencor en mis labios.

- No, absolutamente nada. Pero es que mi padre no habla con nadie ¿Estás segura de que mantuvieron una conversación? -Preguntó rascando su cabello castaño. Últimamente las acciones de Liam me provocaban risa. Verlo no tener el control de la situación como ocurría la mayoría del tiempo era grato.

- No estoy loca, Liam. He hablado bastante bien, he empezado a conocer sus gustos y su forma de pensar acerca de política y esas cosas. -Le hablé recordando plenamente las conversaciones con el hombre cuando Liam estaba en el baño o recibía alguna llamada o no estaba con nosotros por alguna u otra razón. Yo estaba consciente de que el Señor Clouston padecía del autismo, pero aun así hablábamos como si fuéramos unos conocidos intentando conocer de gustos, o entregándose opiniones, etcétera. Además de que él me revelara grandes secretos de Liam, como aquella historia del carrito de helados. Aun no lo olvido.

- ¿Enserio? -Repitió su pregunta. -Es increíble, eres con la primera persona con la que mi papá entabla una conversación en años. De verdad, es un avance muy grande. -Sonreí ante sus palabras.

- ¿A qué te refieres con un avance muy grande? -Pregunté desviando la conversación que me intrigaba desde un principio.

- Mo, él ni siquiera puede hablarle a Zayn, él... -Se calló por alguna razón ¿No quería decir que su padre era autista? ¿O era otro el punto?

- Él es autista. -Completé en el silencio. Liam me miró impaciente.

- ¿Cómo lo sabes? -Preguntó él.

- Vamos. -Dije poniéndome de pie. -No hace falta hacer una investigación para darse cuenta. -Murmuré acercándome a él.

- ¿Cómo dices? -Preguntó con tono de sarcasmo.

- Liam no tiene nada de malo, para mí es normal que... -Iba a continuar claro, pero su voz inminente y a la vez fuerte, ronca y pesada me hizo callarme con los ojos más abiertos de lo normal.

- No. No es normal y lo sabes, no tienes que fingir conmigo. -Dijo pero le interrumpí rápidamente.

- No estoy fingiendo, no tendría por qué. No hay ningún problema en que padezca de aquella enfermedad, no tiene nada de malo, no le veo el problema y no tienes por qué alterarte de esta manera. -Le reté molesta. Recordé al Liam de la playa la primera vez, aquel día cálido en que lo conocí.

Mi Debilidad |Liam Payne|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora