Capitulo 30: Desesperación.

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- QUE MIERDA TE SUCEDE JAXON?- Gritó el jefe, aleje un poco el móvil de mi oreja.
- Gordon, esa chica está completamente mal de la cabeza, se lanzó por un puto puente.- Dije excusándome.
- Y POR QUÉ NO LA ATRAPASTE ANTES DE QUE SE LANZARÁ?- Su voz era totalmente irritante y más en estos momentos, el estaba molesto pero yo lo estaba el doble.
- Te recuerdo que su auto no es nada lento.- El suspiró pesadamente.
- Te lo advierto Jaxon, tu trabajo depende de esta misión, si llegas a fallar, todo lo que has hecho no será nada para el gran error que cometerás si no los atrapas.- Cerré los ojos y suspiré.- Si es que no te matan...- agregó.- tienes que atraparlos y punto.- Dijo y colgó. Coloque el celular en la mesa de madera y me levante de la silla, comencé a caminar en mi habitación, Mark estaba intentando dar con aquel chico "Luke", sin duda el era una pista. Pero, ¿Por que Emily busca a un bibliotecario? Mierda! Maldita chica, era tan extraña, tan impredecible y es que, ¿Quien tiene la mente tan jodida como para aventarse de un maldito puente?  En mi mente no encajaba la idea de que esa chica hiciese tal cosa, jamás imaginé que hiciese eso, fruncí el ceño al recordarlo, la impotencia que sentí al seguir de largo, demonios...
Salí del hotel y camine hasta mi auto, conduje hasta el lugar donde Emily había torturado a Jeff, donde estaba el auto del chico, aún no entendía cómo es que se me escapaba de las manos tan fácilmente, odiaba eso, como demonios es que huía sin previo aviso, la había tenido justo enfrente ese día, sin embargo lo único que logre fue dispararle, pero ayer se veía jodidamente normal, hasta se lanzó de un puto puente joder.
Me acerqué al auto, este se encontraba completamente quemado, abrí la puerta con fuerza, está cayó al suelo entre en el y empecé a revisar, nada era reconocible, el fuego había hecho su trabajo, movía todo lo que podía. En el asiento del conductor se encontraban unos fragmentos de vidrios medios quemados y por el acelerador otros, recojo todos los que hallé, sin duda era de una botella... rápidamente un click imaginario sonó en mi cabeza, Jeff dijo que Emily lo había golpeado con una botella de licor, subí a mi auto y conduje a la oficina de investigaciones, donde un pequeño equipo de agentes revisaba cada parte de la camioneta que Emily me había robado, entre al laboratorio, donde Britt estaba, me acerqué a el.
- Britt, necesito que me ayudes con algo.- Dije poniéndome a su lado, me miró.
- Dime Jax.- Contesto, quitándose sus anteojos de botella, Britt era un chico de tez morena y cabello oscuro, el cual se había especializado en pistas, y era el jefe de ello, por eso lo necesitaba, por qué esto era hasta ahora la pista más importante.
- Necesito que rehagas esto.- Deje la bolsa negra que contenía los pedazos de vidrio, ligeramente quemados. El abrió la bolsa y saco uno de los pedazos.
- Jaxon, esto está hecho mierda.
- lo sé.- respondí.- pero lo necesito urgentemente.
-Mmm, ven en tres días.- Dijo sacando todos los pedazos.- ¿se supone que es una botella?
- Si, lo es.- Palmee su espalda.- regreso en tres.- él asintió y salí de allí.
Regrese a el hotel, y me encerré en mi suite, sinceramente este día no tenía ganas de nada, detestaba la idea de que esa chica siempre se las ingeniaba para huir, pero yo no lo aceptaba, y es que ningún maldito criminal había logrado escapar de mi tantas veces como "La gran mafia" lo había hecho, este era el trabajo más duro con el que me había topado, estos hijos de puta sabían lo que hacían, "El" por lo visto era un completo experto, pero aún así yo iba a ingeniármelas, quizá la única forma de atraparlos era intentar pensar como ellos, ahora la pregunta era ¿Como mierda pensaba un mafioso? ¿Un asesino? ¿Un sicario? ¿Como pensaría la gran mafia? Mi mente comenzó a maquinar como cuando era pequeño, tantas ideas se venían, una tras otra. Pero no ninguna era 100% segura, ellos eran tan impredecibles, y siendo así tenían la ventaja, pero sabía que eso no era por mucho tiempo, intentaría de todo lo posible por dar con ellos, pero sabía que eso sería jodidamente difícil. Suspiré, me senté en la cama, Emily, Emily, Emily, MALDITA SEA! Tenías una malditas ganas de tenerla enfrente de mi, ella había destrozado la vida de mi mejor amigo y la de su familia, y yo quería hacer lo mismo con la de ella. Es que solo imaginármela me provocaba asco, ¿por qué esa chica tan hermosa tenía que ser tan despreciable, tan cruel? Sacudí mi cabeza ante esa pregunto, qué demonios me importaba eso, lo único que me importaba era tenerla frente a mi y destrozarla, hacerla añicos, hacerla sufrir, y que se arrepintiera por ti, y allí acabar con su vida. Tenía que empezar a planear el modo de encontrar a La Gran Mafia, y el momento que viera a uno de ellos, el que sea, no dudaría en matarlo...
- Encontré a 2567 Luke Streitz en Nueva York.- Dijo Mark entrando a mí habitación y sacando mi mente de esos pensamientos, lo mire.
- Pues busca a el que necesitamos.- Dije  mirando de nuevo hacia la nada. El rodo los ojos.
- Es lo que hago.- Se puso enfrente de mi.- Mientras tanto ¿Que haremos?
- ¿Que podemos hacer?- Dije encogiéndome de hombros, me sentía jodidamente estropeado, odiaba la idea de que por primera vez no sabía qué hacer.- demonios.- susurre.
- mierda...- Dijo Mark cruzándose de brazos. Suspiro.- Tranquilo Jaxon.- Puso su mano detrás de mi espalda.- estoy seguro que algo se te ocurrirá.- lo mire.- Siempre es así colega.- sonrió ligeramente, fruncí el ceño. Tal vez tenía razón, ¿pero como saberlo? Por ahora ellos tenían la delantera...
Entonces fue que lo recordé, ¡JODER! Mark tenía razón...
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Hey! Bueno, aquí está este nuevo capítulo, no está tan largo como esperaba pero espero y sea de su agrado.
Ahora vamos intentar a 60 votos y 15 comentarios, ¿Si?
Prometo que el próximo capítulo será más largo, y pues gracias por leer:)

La Gran Mafia (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora