Naruko Uzumaki ( la salvación del mundo ninja) TERMINADA

Sabaku no Gaara

Aldea de Sunagakure

La reunión de los líderes de la aldea y el Kazekage había dado fin. En esa reunión se discutieron los últimos detalles respecto a su alianza con Orochimaru. Ya que según ellos la alianza con Konoha solo traía debilidad a la aldea. Fuera de la sala se encontraba dos de los hijos del Kazekage. Temari y Kankuro.
- No entiendo como planean hacer que Gaara obedezca. Causa demasiados problemas. Prácticamente ataca a enemigos y aliados. - decía Kankuro a su hermana Temari
- No estoy segura...y- iba a seguir hablando cuando los participantes de la reunión salieron de la sala.
Rápidamente los dos pusieron una postura más adecuada. Debían de mostrar respeto a esas figuras de autoridad. Su maestro Baki salió justo detrás del Kazekage quien no les presto mucha atención y siguió su camino.
- ¿Dónde está Gaara?- les preguntó al notar la ausencia del menor en ese grupo.
- Esta en el techo. Usted sabe que nunca nos obedece. No lo pudimos traer aquí. - le explico Temari
- Por mí que se quede allá.- murmuro Kankuro en forma de queja que se podía confundir con un deseo.
- Vamos por el. Tenemos que hablar. - dijo Baki se fue a la azotea seguido de los dos hermanos.

Gaara miraba fijamente el cielo oscuro. No había luna esa noche, ni estrellas. Solo a eterna oscuridad. Tan vacía tan simple y peligrosa. Como una mancha negra. Un hoyo negro sin fin. Como la desesperación. Igual a Gaara. Escucho unas pisadas que venían desde atrás.
- Esto.....Gaara- era la tonta de su hermana mayor- Tienes que bajar. Necesitan hablar con nosotros.
Gaara solo se movió y camino hacia las escaleras. Temari lo siguió en silencio, a una distancia prudencial.

- Dentro de poco serán los exámenes chunnin. Espero que no olviden lo que tienen que hacer. - les decía Baki a sus estudiantes- Y tu Gaara.....- dirigió su mirada fría a Gaara- más te vale controlarte...tch

Aldea de Konoha

La imagen era borrosa. Pero lograba distinguir sus brazos. Eran pequeños y regordetes. Es un bebé. Ese bebé era ella. Delante de ella había una figura. Un hombre. Le estaba sonriendo. Nadie le sonríe a ella. Sus bracitos tocaban cada centímetro de la cara de ese sujeto. El sonreía feliz y besaba sus manitas cada vez que ella tocaba su boca. El hombre la abrazaba con amor y la acunaba en sus brazos. La acerco más y le beso la frente. Pero no lograba distiguir su rostro. Pero era rubio. El color de su cabello se podía distinguir.
" Hora de dormir Naruko. Mi pequeña"

Naruko se despertó de un salto. Que sueño había sido ese. O un recuerdo.

Gaara miró el cielo. Una sonrisa macabra se asomó por su rostro. Pronto mamá tendría hambre.