Un odio no normal. Ganadora De Los Premios Wabbys.

"Soquete."

POV Julieta...
Al fin llegamos, tras varias horas.
Dimos con la dirección de la familia Kendall.

De repente escuchamos una puerta abriéndose.
Cuando se abrió la puerta. Todos vimos a una señora pelinegra, ojos mieles. La señora Kendall tenía una mirada penetrante. Al verme puso una gran sonrisa.

-¡Julie!- Es cierto que siempre que iba a la casa de Barbara, Giselle me recibía con los brazos abiertos.

-¡Oh, Gis!- Ambas nos abrazamos hasta que la señora Kendall vió a mi madre.

- ¡Carol! ¡Cuánto tiempo!- exclamó sonriendo. Ambas se saludaron afectuosamente. -Wow, no sabía que vendrían tantos-

-Oh, ellos son amigos de Barbara y Armin ...- dije haciendo una mueca.

-¿Armin?- preguntó confundida.

-Oh, bueno... Barbara se fué con un chico...- dije nerviosa.

Ell hizo un gesto de disgusto -¿Qué no le gustan las chicas?- preguntó seria.

Todos nos sorprendimos por aquel comentario, pero la más "afectada" fue Lailo. Algo trama.

-¡MAMÁ!- interrumpió una voz masculina -Eso no te incumbe- "susurró" alguien detrás de la señora Kendall.

Asomé un poco mi cabeza, y me topé con aquel chico moreno con cabello negro, tenía unas perforaciones en ambas orejas.

-Vladimir...- susurré atontada.
Al parecer éste, me escuchó e inmediatamente me miró sorprendido.

-¿Julieta...?- dijo con la voz temblorosa.

Todos miraban el espectáculo algo confundidos.
Mamá se limitó a darme un pequeño golpe en el brazo para que reaccionara.

-¿Eh? Oh, esto...- dije algo ruborizada.

-Andando chicos, ésta es su casa- dijo la señora Kendall dándonos el paso.

Todos tomamos nuestro equipaje y nos adentramos a la enorme casa.

-Wow, ¡ésto es genial!- exclamó Fernanda.

Yo personalmente, no dejaba de mirar "disimuladamente" a Vladimir. Algunas cosas eran diferentes, sin embargo, lo miraba igual que siempre. De repente él me miró y nuestras miradas se cruzaron, algo incómodos desviamos la vista.

-Les asignaré las habitaciones por géneros- comentó Giselle.

-Gracias por dejarnos quedar aquí- dijo sonriendo mi mamá.

-Es un gusto- respondió.

***
Al fin habían quedado los cuartos, yo estaba con Fernanda y Lailo. Los chicos estaban juntos y mamá aparte.

POV Lailo...

-¿En verdad crees que estén aquí?- preguntó Fernanda.

-No lo sé...Pero haré todo para encontrarla.

Yo no dejaba de pensar en lo que comentó la madre de Barbara, ¿En serio le gustan las chicas?
No lo creo... Está con Armin...Joder, ¿ahora estarían juntos?.

-Tierra llamando a Lailo!- gritó Julieta mientras me arrojaba una almohada.

-¡Hey!- exclamé sonriendo tratando de disimular mi "enojo".

-Andando, es hora de cenar, la señora Kendall nos quiere llevar a un lugar-

-Pff , ok, ok.- todas nos cambiamos y salimos para encontrarnos con los chicos.
Nos pusimos algunas prendas lindas, ya que por lo que nos contó Julieta, la mamá de Barbara es algo..."delicada".

Yo llevaba un vestido blanco con unas decoraciones de rosas bordadas. Me puse un pequeño suéter beige arriba y unas balerinas rojas.

-Andando- dijo La señora Kendall sosteniendo unas llaves en las manos.

***
Al fin llegamos al sitio, era hermoso. Barcelona tenía un toque especial. Nos dieron una mesa en el balcón, la luna Realmente se veía hermosa.

POV Spencer...

Era genial éste restaurant. La madre de Barbara y la de Julieta se sentaron en una mesa aparte, el chico que al parecer es hermano de la peliazul, nos acompañó.

Me senté junto a Paul, quedando frente a Lailo. Con ese vestido se veía muy linda... Agh pero que digo.

Siempre he sido muy reservado, no tanto con los chicos pero normalmente me cuesta mucho relacionarme con los demás, no por miedo o pena, simplemente...No podía.

POV Leo...

Julieta se había puesto un vestido  anaranjado, le llegaba debajo de la rodilla, tenía el pelo recogido en un chongo.
Eso siempre me había gustado de ella, puede vestirse con cualquier cosa, pero nunca deja de ser ella.

El hermano de Barbara se sentó a su lado. No paraba de mirarla. Era muy molesto.

JAJA Spencer no paraba de mirar a Lailo. Así que le dí una pequeña patada a Paul y cuando éste me miró, le hice un movimiento con la cabeza para que pudiera ver a Spencer.

Pude ver cómo Paul le hizo un recado en una servilleta y se lo dió.

"Deja de mirarla soquéte"

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Ho... Espera, ¿¡Que Spencer pensó qué?!
Oh Dios...
En fin...
La cagó Giselle.
Nos leemos pronto 7u7