Vientre en Alquiler #1

22.

NARRADOR

Harold Harris fue un hombre que da la cara a toda consecuencia, pero su ego fue destruido por las palabras de Erin. Pensaba que era estúpido huir y eso mismo fue lo que hizo primero.

En la habitación del descanso que llamaban los médicos se encontraba abandonado en un sillón, su mente viajaba a gran velocidad y sus ojos suplicaban permiso para soltar lágrimas. Sabía que Erin se había retirado del hospital junto con los demás. Su corazón pedía a gritos ir a ver a su hija. Eso hizo pero al encontrar al castaño de nuevo lo maldijo, pero por primera vez escucho la voz de la muchacha que se encontraba inconsciente.

Sintió su corazón hacerse pequeño, esa muchacha le decia al castaño que lo amaba y el levantarse de golpe.

FERNANDA SANTINI

Podía escucharlo muy bien, me hablaba con su voz quebrada y luego guardo silencio. Se sento y escondia su rostro mientras decía que me amaba.

Y una chispa recorrió mi cuerpo y me hizo ver aún mas cosas, él siempre estuvo conmigo indirectamente y cuando iba a su casa para ver a Javier y él estaba salía a saludarme, me abrazaba y me halagaba mis vestimentas, me sonreía y me preguntaba hasta mi salud. Carlos siempre me mostró su yo real, que estúpida fui al no verlo.

Me había enamorado locamente y obsesivamente de su hermano que lo llegue a ver como mi principe, mi ideal, como el amor de mi vida. Amé a Javier sin darme cuenta que él no hacía lo mismo por mí, comprendo que para él era solamente su amiga incondicional. Sabía que haria todo lo que me pidiera y a base de la completa confianza que le tenía me engaño, porque sean mentiras piadosas o no es una mentira por igual. Y puedo decir que ese amor disminuyó, puedo decir que él ya no es el amor de mi vida... Otro lo ocupa y merecidamente, otro me robó el corazón, otro me enamoró a mí, y ese otro esta aquí llorando por mi. Amo oficialmente a Carlos.

— Cre... creo que yo también...
Te Ammmo.

Levantó su vista y de inmediato se acerco a mi besando mis labios, lloraba como nunca lo hizo.

— Mi amor, ¿Estás bien?

— Tengo un poco de sueño.

Lo observaba.

Su pelo estaba muy grande, sus ojos eran diminutos con grandes ojeras, también tenía barba y bigote de unas semanas. Me asuste, ¿Cuanto tiempo pase aquí?

— ¿Por qué estas así?

— Porque...

Carlos no pudo terminar ya que entraron varias enfermeras y un doctor ya mayor, este sonrio con alivio y se acerco a Carlos.

— Debemos revisarla, hijo. —Carlos lo miraba feliz— Te asegure que haría todo lo posible y lo hice.

— Confíe en usted doctor, ¿Debo salir verdad?

— No, quédate.

El doctor palmeo dos veces el hombro de Carlos y luego se acerco a mi...

— Hola, Fernanda —.El doctor me hablaba— soy el doctor Samuel Garrido y te recibí la noche que entraste por lo que te haré unas preguntas.

— Claro.

—¿Sientes alguna clase de dolor?

— Siento mi cuerpo pesado, me duele el vientre.

— Es normal estuviste más de un mes en estado crítico, despiertas hasta ahorita.

Busqué con la mirada a Carlos, él me sonreía débilmente. ¿Es por eso que descuido su aspecto? ¿Mamá estara igual?

— No te alarmes querida, por lo que veo estas bien.

El doctor continuó preguntando, me explicó que el bebé tiene una enfermedad en la sangre y dijo que no podía tener movimiento alguno.

— ¿No puedo regresar a casa?

— En unos días, pero debes hacer reposo absoluto.

Carlos y el médico comenzaron con los trámites de mi salida del hospital. Mamá con Lourdes y Lauren llegaron unos minutos después, todas se miraban como el aspecto de Carlos. Por otra parte Carolin llamó por teléfono y prometió ir a verme, me explicó que renunció al trabajo y que ayudaba a Carlos con su bufete. Eso me aseguró que no era mala si no manipulada por Javier, mientras él y Josh estaban en un viaje de negocios. Si, a Javier le dieron el puesto de Carolin.

— Listo, en dos días podremos irnos de aquí.

Carlos entraba con los papeles en mano, lo veía tan feliz y todas sonrieron. Entre charlas y comentarios chistosos se pasó la mañana de ese día, todas acordamos que Carlos era el nuevo Tarzan moderno por su cabello. Aun que todas se miraban mal también Lauren y mamá se miraban fatales sin maquillaje y que decir de Lourdes.

-------------------------

Holaaaaaa beibis.

¿Quién quiere maratón?

Sí :)

No :(

La foto de multimedia muestra a Carlos descuidado por
Estar día y noche
en el hospital...

Las personas que te aman
No les importa su aspecto
Con tal de estar contigo
En el hospital.

He visto personas así en el
Hospital de mi país.
D:

Gracias por leerme, votar y comentar.

Es tan hermoso ver comentarios pidiendo que siga con los caps.

Besitos :*