🌹 Capítulo 2 🌹

289 31 16
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


 Tocan la campana y la maestra se levanta con una gran sonrisa en el rostro.

—Muy buenos días alumnos, quisiera presentarme, me llamo Beatríz White y seré su maestra de química. Quiero que dejen de pesar en este mismo instante que la química es difícil o aburrida porque yo les probaré todo lo contrario —habló con mucho entusiasmo.

Vaya, parece demasiado sincera e idealista.

(...)

Salgo de mi penúltima clase y miro mi horario... Oh no, es Inglés. No quiero ir a esa clase con ese profesor. Entro al salón y lo primero que veo es al maestro borrando algo del pizarrón, no me ve así que con cuidado y sin hacer ningún ruido voy hasta el último asiento en la esquina, saco mis cosas y mantengo la cabeza abajo.

Escucho como entran más personas y algunas pasan a mi lado. Por alguna razón levanto la cabeza y veo con sorpresa que mi profesor está parado delante de mí y mirándome fijamente, frunzo el ceño y me sonrojo... ¿Cuánto tiempo lleva ahí?

—Necesito que te quedes a la salida unos minutos —dicta bastante serio y antes de que pueda responderle se va.

¿Y ahora qué quiere? ¿Volver a humillarme frente a todos? Me estoy planteando seriamente en irme sin esperarme como me lo pidió.

Tal vez esté exagerando las cosas, pero me hizo pasar un mal rato, un muy mal rato. En toda la clase ni siquiera me mira y me da curiosidad el por qué quiere que me quede al terminar. ¿Acaso maté a alguien? Así parece.

Toca la campana y rápido recojo mis cosas, estoy por librarme cuando escucho que llama mi nombre y sin más remedio regreso cansada.

—¿Qué pasa, profesor? —pregunto poniendo los ojos en blanco.

—Me gustaría que pudieras aclararme algunas cosas —dice metiendo algunos papeles en su maletín. Frunzo el ceño.

—¿De qué habla? —pregunto confundida.

—¿Por qué faltaste ayer? No sólo a mi clase —pregunta volteándome a ver muy serio y enojado... ¿Por qué le enoja? Sólo falté un día.

—Tenía resfriado —me excusé falsamente sin interés.

Relajó lentamente el ceño.

—¿Y ya estás mejor? —pregunta con voz más suave y yo asiento.

Me mira fijamente a los ojos y yo bajo la mirada sonrojada. ¿Por qué se comporta así conmigo? Primero me humilla y ahora se preocupa no sólo por mi asistencia sino también por mi salud. Se acerca más a mí y yo retrocedo confundida.

Alone... In The Dark (Gerard Way)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora