¡Bang! ¡Bang! You're dead

Capítulo 25 ✝ Bang Bang ✝

Ajetreo. Esto era todo lo que había en el inició, y eso era todo lo que hubo entonces.

Watari sintió como de pronto su corazón dejaba de latir, y el mundo a su alrededor se volvía rojo. Rojo. Ajetreo.

Soltó un grito ahogado, adolorido, y se estiró en su silla, tratando de alcanzar el botón rojo que haría aparecer el mensaje.

-Watari...- murmuró L a través de la pantalla de un monitor.

¿Y ella? ¿En donde estaba ella? ¿Es que ni siquiera tenía la decencia de aparecerse a mirar las muertes que había causado?... Pero por más que Watari tratase de luchar contra ello, la realidad era innegable: se estaba muriendo, y L también moriría.

-¡Watari!- dijo este, al otro lado de la pantalla.

Fue mi culpa. Todo fue mi culpa.

Alcanzó el botón y con un último esfuerzo lo pulsó para hacer aparecer el mensaje que ella, el monstruo al que había criado, le había ordenado hacer aparecer.

Bang, Bang, éstas muerto.

Y con ese último acto de cariño hacia los dos niños que había conocido alguna vez, Watari dejó de respirar.

🍡🍥🍬🍭

10 minutos antes:

-¿Que dices? Estás de broma, tienes que estarlo.-

-No entiendo por qué estás tan molesto. He convencido a L de que no volviese a encerrar a tu novia. Creí que eso era algo bueno-

-¡Maldición! ¿Cuando?-

-Hace como media hora, cuando llovía en la azotea. Me desviví convenciendolo, pues sabía que Misa no soportaría esa tortura otra vez. Prometió que no le haría nada. Quizá cambie de opinión en un futuro, pero mientras tanto, Amane está a salvo.-

-¡Eres una total idiota!- despotricó Light. Se encontraban en uno de los pocos puntos ciegos del edificio que les hacía de cuartel general, lo suficientemente cerca como para no ser extrañados por el resto del equipo. El plan de Yagami era simple. Al poner la vida de la rubia en peligro, el Shinigami tendría que matar a L para impedirlo. Al matarlo, también Rem moriría. Era perfecto. Y ____ lo había arruinado.

Quiso ponerle las manos alrededor del cuello y ahorcarla ahí mismo por su estupidez. Se contuvo solo por el hecho de que habría sido difícil deshacerse del cuerpo, con tantas cámaras en los pasillos.

-¿De qué hablas?- preguntó está, mirándole de soslayo, culpable como un cachorro después de mordisquear la zapatilla de su dueño.

-¡Rem iba a salvarla! ¡Se suponía que lo hiciera! ¡Esa es la única forma de matar a un Shinigami, haciendo que salve la vida de un humano! ¡Te lo dije!-

-Creí que estaba ayudándote. ¡Cálmate de una buena vez, Light.- ___ lo sacudió vigorosamente, empleando toda la fuerza de su menudo cuerpecito. Bastó para sacarlo de su estado de histeria. -Yo sé el nombre de L. No todo está perdido.-

El castaño quedó en silencio. Era verdad. ¿Cómo pudo olvidarlo? En ningún momento se le había ocurrido preguntárselo a ____, su compañera de infancia. Era casi absurdo.

-¿Y me lo dirás?-

"Si no está de mi lado, este será el momento en que se revelará su verdadero rostro. Si no me lo dice... Entonces es que me ha tendido una trampa."

-Si, te lo diré. Si dejas de gritarme.- está suspiró y se apartó un mechón de cabello del rostro. -¿Llevas algo de papel y pluma encima? ¿Papel "especial"?-