HANA, EL REGRESO

CAPITULO 37 NECESITO CREER EN NUESTRO AMOR

Durante el vuelo, Ashraf noto que Hana estaba un poco triste y lo asocio al hecho que tal vez estuviera por venir su periodo ¿pero cuantas veces al mes sucedía eso? en fin si era eso para darle ánimos la atrajo a su pecho y le dio un beso que ella correspondió

Ella se aferro a ese abrazo esperando a través de el, vencer todas las dudas y el temor que tenia a su regreso a Estambul.

Al llegar de nuevo a su casa, ella subió de inmediato para empezar a desempacar sus cosas, y espero que el subiera con ella, pero le informo que tenia que hacer una llamada importante y se fue a su estudio.

El corazón de Hana se lleno de desconfianza, acaso la llamada tan importante que tenia que hacer era avisarle a su ex amante que ya había llegado y se verían pronto para trabajar, entre comillas

Saca eso de tu cabeza- se reprendió ella misma y se fue el baño para darse un baño y despejar su mente.

El entro al cabo de un tiempo, y la vio sentada en la cama con una expresión desvalida, definitivamente era su periodo y las consecuencias de sus hormonas revueltas

Ashraf inmediatamente fue hasta ella y la acuno en sus brazos de manera tierna y Hana aprovecho para pedirle:

—Por favor no salgas hoy, quédate conmigo.

—No pienso ir a ningún lado, tú eres mi prioridad.- le confirmo el besándola con extrema dulzura

Necesitaba hoy eso y creer en el amor que vence todos los obstáculos.

Esa noche Ashraf le demostró nuevamente como la deseaba y amaba y en sus brazos estaba su verdad, el amor que rompe con las tradiciones y que entre caminos de espinos suele salir adelante y ser fuerte ante las adversidades.

Tenía que confiar y creer en que no se puede amar a alguien y estar íntimamente con otra persona.

Ella amaba a Ashraf y jamás podría entregarse a otro hombre

Aunque el hecho simplemente de ser hombre, era el planteamiento en el cual muchos hombres se excusaban, "somos hombres y los hombres no piensan con el corazón sino con el libido.".

El sexo no es lo mismo que amor, pensó, y si solo el sexo en un tiempo lo unió a esa mujer, no debería preocuparse sino ocuparse en darle mucho amor y mucha pasión a su esposo.

Así que dispuesta busco sus labios y se movió de manera que el entendiera que quería que de nuevo hicieran el amor y el ni corto ni perezoso accedió renovando su deseo y su pasión que nunca se aplacaba.

Mas tarde Ashraf le comento

—Quiero que se llame Iskander

— ¿Quién?- pregunto sin entender

—Mi primer hijo, nuestro primer hijo – respondió y su cara era de extrema felicidad al imaginar esto pero Hana se tenso- aun no entiendo como no has salido embarazada, por falta de intentos no ha sido-bromeo- además ninguno de los dos se esta cuidando.

Ella callo, ¿que podía decir?, que ella si se estaba cuidando porque no quería tener hijospor ahora

El asocio su silencio a culpa, pensando quizás que la estaba cuestionando que algo andaba mal en ella así que se apuro a arreglar su indiscreción.

—No te preocupes, a veces pasa, esperaremos el tiempo que Allah haya dispuesto.

Ella se aferro mas a su abrazo y dejo que el sueño se llevar todas sus preocupaciones y sus temores.

Al día siguiente Hana despertó a la luz de un nuevo día, escucho la regadera en el baño y supo que ya Ashraf se estaba preparando para irse a su trabajo, eso la lleno de aprehensión

El salió con una toalla envuelta en su cintura, el pelo escurriendo un poco de agua y le brindo una gran sonrisa

—Buenos días amor, ¿te desperté?-fue a ella y le robo un beso mañanero y muy sensual.

—Ya te vas a trabajar-carraspeo sin poder evitar sentir molestia y una punzada de dolor en su corazon.

- Si y hoy ser un día largo- expuso sentándose en la cama para ponerse el pantalón y al estar de espalda no pudo ver el sentimiento amargo que expresaban los ojos verdes de Hana

El decidió jugarse el todo por el todo, aunque sabia que solo eso retrasaba el momento. Fue hasta el que ya se había puesto de pie y se estaba poniendo la camisa y se la quito y con sus manos recorrió el pecho masculino y le dio un corto beso en el cuello, entonces sintió como sus caricias tenían el efecto deseado.

Acerco su boca a la de el, en espera que el la tomara y así lo hizo.

Pero luego de varios húmedos y apasionados besos el la separo un poco frustrado por tener que poner un alto.

—No puedo Hana, realmente no puedo-le dijo en tono de disculpa- tengo una junta en 15 minutos, pero te prometo que en la noche te lo recompensare.

Hana solo pensó, primer round y ya ex amante le había ganado.

—Me das un beso- le pidió ella y el la beso, realmente deseaba quedarse, no había otra cosa que deseara mas que hacer el amor con su esposa, no importa cuanto lo hicieran siempre quería mas, pero debía cumplir con su compromiso, esta vez.

Cuando se fue, Hana se sintió perdida e inquieta y sin poder dominar los celos que se apoderaban de ella

Debió contarle a Ashraf sus dudas pero no quería parecer como una celopata compulsiva sin embargo estaba decidida a tomar el asunto en sus manos y buscarle una solución.

La solución para ella era clara, que esa mujer saliera de la vida de su esposo.