HANA, EL REGRESO

CAPITULO 50 DEJAME SER FELIZ

Ashraf insistió de ahora en adelante y mientras Vincent permaneciera en Estambul de que saliera siempre acompañada de un guardaespaldas.

Ella sabia que Vincent se había vuelto un poco obsesivo por eso no se opuso aunque Ashraf no lo sabia y quizás la verdadera razón de el eran los celos, aun así accedió. Igual se sentía cuidada y amada por su maravilloso esposo.

Ese dia tendría ya la reunión definitiva con la gente de Migros y finiquitar el contrato.

Estaba feliz porque todos sus sueños se estaban cumpliendo y con el apoyo de su esposo, del único hombre que había amado y amaría siempre.

En la recepción se le informo que Kerem ozlem y Burack Belhum, propietarios de Migros ya la estaban esperando en la sala de junta y una eficiente secretaria la acompaño hasta allá, ella le pidió a Erdogan, su guardaespaldas asignado que lo esperara abajo, al principio se negó pero ella lo convenció.

Al entrar en la sala de juntas vio a Kerem y Burack que se levantaron con una gran sonrisa para darle la bienvenida mientras que otro hombre permanecía de espalda a ella mirando por el ventanal.

Su corazón se paralizo cuando el se volvió y se dio cuenta que era Vincent, pero que hacia allí, porque insistía en perseguirla.

Antes que ella reaccionara o dijera algo Kerem se adelanto para hacer las presentaciones respectivas.

- Hana te presento a Vincent Macallister, de Macallister c.a. es la empresa chocolatera mas importante en los Estados Unidos que casualmente cuando le hablamos de ti, y de nuestra futura sociedad, se intereso, ya que piensa expandir el área de sus productos, ya acaba de firmar un contrato con Hazal Biscuit Company y que te parece a ti también trabajar con el.

- Creo que eso es un tema que deberé hablar personalmente con el Sr . Macallister, por ahora solo quiero finiquitar ya el contrato con ustedes

- Que ya esta listo, sentémonos.

- Estoy segura Sra. Rahamm que cuando hablemos a solas podre convencerla- apunto con toda intención y doble sentido Vincent.

Hana ignoro su comentario y en los próximos minutos también hizo caso omiso de las miradas que le dirigía.

Cuando todo quedo firmado y aclarado todos los puntos, Hana salió de aquel lugar sintiendo que las piernas le temblaban, el solo pensar que Ashraf se enterara que había vuelto a ver a Vincent despertaría suspicacias y celos y no quería eso, no quería que una sombra oscura atentara contra la paz de su matrimonio.

Vincent la abordo cuando entro al ascensor y antes que ella pudiera hacer algo el entro y marco el piso y las puertas del ascensor se cerraron

- Vincent por favor déjame en paz, por lo hermoso que vivimos déjame ser feliz.

- Con mi hermanito, jamás-denegó mostrándose colérico.

- Es tu hermano no puedes ni debes odiarlo.

- Un hermano del que hasta hace poco supe de su existencia y que se robo al amor de mi vida. No puedo amarlo, tampoco albergar sentimientos filiales por el.

Hana se callo cuando el elevador se detuvo de pronto y ella se asusto sobremanera

- Porque detuviste el elevador- le reclamo

- Yo no lo detuve , se detuvo solo- respondió el

- Vincent no juegues, sabes que soy claustrofóbica

- Lo se crees que te haría algo así- hablo en tono afectado pues era cierto el jamás jugaría con ella y sus temores, siempre había querido cuidarla, protegerla y amarla y eso seguía presente independientemente de sus sentimientos lastimados.