Tal como te imaginé (Sesshome)

C 10: Rin, dragón, ojos abiertos

Días después, viernes, Biblioteca de la secundaria, 4:03 pm

Desde la aparición de Kikyo no han habido más ataques. Higurashi y su grupo logrado encontrar tres fragmentos más fácilmente sin necesidad de pelear contra yokais o humanos contaminados. Las reparaciones del gimnasio estaban casi listas y nadie se enteró de quién lo destrozó.

Pronto serán los exámenes y Kagome está preocupada, ha debido faltar a clases por su misión, por tal razón se encuentra en la biblioteca, debe esforzarse para aprobar con las mejores calificaciones, ella desea seguir siendo una alumna modelo.

Sesshomaru le acompañaba en la biblioteca, le pareció interesante un libro de Nicolás Maquiavelo (El príncipe), leía mientras la joven estudiaba.

Al llegar las seis salieron del edificio.

Caminaron por las abarrotadas calles, el sol daba el último acto de su hermosa y colorida obra para dar paso a la luna.

La azabache decidió acortar camino por un callejón.

Kagome se asustó, aparentemente alguien les seguía, cuando divisó una silueta asomarse por la esquina tembló.

Desde las sombras apareció una niña, no más de diez, la pobre criatura estaba sucia y andrajosa, se acercó a Sesshomaru.

-¡Hola señor!, al fin lo encontré- saluda con una afable sonrisa.

Sesshomaru y Kagome se le quedaron viendo.

-¿Conoces a ésta pequeña?- interroga Kagome acercándose a la niña.

-Sí, él me ayudó hace unos días- contesta ella -Quería volver a verlo para agradecerle

-¿Ayudar?- la joven sentía curiosidad.

-Fue cuando sucedió el ataque al centro comercial- aclara Sesshomaru sin mostrar emociones.

-Dime pequeña- se agacha hasta la altura de la niña -¿Cómo te ayudó Sesshomaru?

-Él me revivió- sonríe la niña.

-¡¿La reviviste?!- se impresiona volteando hacia el yokai.

-Pero antes me dio de comer- su sonrisa se ensanchó.

-¿Estás segura que fue él?- ahora veía a la niña, Higurashi no podía creer lo que sus oídos escuchaban, ¡Taisho ayudando a una humana!

-La vi robando comida mientras estaba en mis asuntos- agrega Sesshomaru.

-¿Y le ayudaste?- su confusión y sorpresa no disminuía por tan pequeña explicación.

-El dueño se dio cuenta y me atrapó, me golpeó muy fuerte pero...- miró a Kagome con sus ojitos alegres -Él me defendió y me dio comida...

-¿De dónde sacaste la comida que le diste?- pregunta al yokai.

-Se la robé al mismo sujeto- lanza con frivolidad.

-¿Y... cómo fue que te revivió?- pregunta a la pequeña con ternura.

-Bueno... un rayo me mató  mientras trataba de encontrar algo que robar en el centro comercial...- se avergonzo por lo último.

-Le alcanzó un ataque de Tokijin mientras aquél hombre era controlado por la energía maligna, fue patético- siempre con aire frío.

-Entonces la reviviste usando a Colmillo sagrado...- miró el rostro de aquél hermético hombre, no podía creer que él había hecho algo tan noble... -Sesshomaru...- sus ojos mostraban admiración.