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Apenas desperté busqué instintivamente la litera de Zert.

Por supuesto que no lo encontré en esta, lo que me desilusionó bastante, pero que a la vez fue un golpe duro que me acercó a la realidad. Me quedé meditando todo lo sucedido por unos segundos. Demasiada información había entrado muy de repente, y el dolor de mi cabeza no paraba de aumentar. Además había recibido un fuerte golpe con el barco allá bajo del agua, sin mencionar los anteriores con Zert, y al parecer alguien me había puesto una venda en esta. Luego de procesar todo, tomé valor y decidí subir a cubierta...

... un dolorido silencio era lo único que me esperaba allí arriba.

Cuando aparecí por primera vez, todos giraron sus miradas hacia mí, haciendo que me sienta tan incómodo como avergonzado. Todos allí debían de saber lo sucedido, y por sus rostros me daba cuenta de que era un tema que habían sufrido bastante. Fuera de esto el Travesía sorprendentemente se mantenía aún a flote. Esto no significaba que no estuviese completamente hecho pedazos, pero debía admitir que la tripulación se las había arreglado para realizar varios arreglos. Yo traté avanzar por la cubierta, pero honestamente no sabía en qué dirección ir. Entonces se me ocurrió buscar a mi amiga, después de todo le debía las gracias por haberme salvado la vida cuando estaba por ahogarme. Además quería hablarle acerca de lo sucedido con Zert, ya que ella había estado en ese momento y de seguro lo había sufrido tanto como yo. Pero me decepcionó el no encontrarla siquiera en el timón, lo que me dejó tan solo y perdido como antes.

Entonces distinguí a Doc del otro lado el barco, junto al mascarón de proa, o mejor dicho lo que quedaba de este. Yo me acerqué a mi compañero pesando en que decir, pero mi mente no fue capaz de procesar la palabras, así que solo dije lo primero que salió de mi boca.

- Lo siento.

Mi amigo giró su mirada hacia mí al oírme. Sus ojos se veían tan tristes como su rostro, pero aun así tuvo las fuerzas para esbozarme una débil sonrisa.

- Te equivocas... no fue culpa tuya – dijo con seguridad – No lo fue de nadie.

- Pero lo perdimos de todas formas... - dije bajando la cabeza deprimido.

Doc apenas me escuchó me tomó del hombro y me dio una sacudida.

- ¡Oye chico, Zert no murió por que sí, lo hizo para salvarnos... a todos nosotros! – su voz era fuerte y bastante convincente, lo que no dejó de sorprenderme – Se sacrificó para que continuaros este viaje, y eso es lo que haremos... ¿De acuerdo?

Sus palabras fueron duras, pero lograron tener efecto en mí. Era cierto, y mis sueños me lo habían comprobado, Zert había dado su vida para que todos nosotros pudiéramos conseguir lo que tanto buscábamos. Pero no solo había logrado eso, sino que también había recuperado lo que realmente era valeroso para el... su familia. Asentí a mi amigo con una agradable sonrisa en mi rostro, la misma que me había causado el ver la escena de Ronnie, la hija de Zert, con sus brazos enlazados a los de su padre.

- De acuerdo.

Pase el resto del día con Lúnima en mi mano.

Antes me había ofrecido a ayudar en la reparación del barco, pero Doc me sacó rápidamente de mi trabajo con la excusa de que me hacían falta varias horas de práctica con la espada. Por supuesto yo no le refuté, y me dediqué a absorber cada conocimiento acerca de esta habilidad, la cual minuto a minuto fui perfeccionando. Me sorprendió como mi cuerpo fue adquiriendo más experiencia, y no solo eso, sino que gracias al consejo de Meg sobre el movimiento de mis pies, llegué a quitarle más de una vez la espada a mi compañero. Aquello me recordó el no haber visto a la capitana en lo que daba del día, algo realmente extraño y misterioso. Por supuesto la paciencia ya no era una de mis mejores virtudes, por lo que no dudé en quitarme la intriga preguntándole a Doc acerca del tema. Su rostro pareció confundido al escuchar mi pregunta, y tardó en querer responderme. Pero yo no iba a rendirme fácilmente, él era el sub capitán del barco, o eso era lo que él me había dicho, y de seguro estaba al tanto de cosas como esta.

TRAVESÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora