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Capítulo 36

Melody, ella ha vuelto aparecer. Simplemente no pudo dejarnos pasar nuestras vacaciones tranquilos. Se supone que según ella iba a pasarlas en Australia.

Miro a mi novia que sujeta con fuerza mi mano. No entiendo porque ella permite que Melody la trate mal. Me gustaría que se defendiera un poco. ¿Que tanto​ daño le ocasionaron para que cambiará como dice su forma de ser?

-Termina ya.-Le digo molesto. Varias personas me miran ahora. Mi voz ha sido algo elevada.
-¿Como te atreves a gritarle a una mujer?.-Me dice una señora molesta poniéndose al lado de Melody. Yo suspiro. - A las mujeres no se les grita. Se las respeta.
-Que ella respete a mi novia y yo la respetaré a ella. Así como ella merece respeto por ser mujer , mi chica y yo merecemos respeto por solo ser seres humanos.
-Eres un insolente. Alguien debería darte una lesión de como tratar a las mujeres.-Dice ella y mi novia me rodea con sus brazos desde atrás y besa mi mejilla.
-Ashton sabe como tratar bien a una mujer. De hecho, cualquier persona que conviva con el te diría que es uno de los pocos hombres que respeta tanto a las mujeres. Pero esta mujer de aquí, se ha encargado de hacerme la vida imposible en el instituto y ahora viene cuando estoy con mi novio  comiendo algo únicamente con el propósito de molestar y hacer una escena. Acá la que está faltando el respeto es ella y usted por meterse en una conversación ajena.

La señora me mira boquiabierta, se da media vuelta y se retira. Observo la sonrisa de Melody y yo río.

-Por eso jamás me he acostado contigo. Eres una víbora Melody. Tengo un primo igual a ti... Quizá hagan buena pareja.-Digo y me volteo para seguir comiendo con mi novia.

Melody dice algo pero tanto yo como mi novia la ignoramos. Disfrutariamos lo poco que nos queda fuera del instituto. Ya casi debíamos volver. Apartarnos de nuestras plácidas vacaciones.

*****

Miro a mi madre, me siento a su lado y sujeto su cabello mientras vomita. El vómito dejo de causarme asco, ya casi que me acostumbro.

-¿Estas bien?.-Le pregunto preocupado mientras la ayudo a ponerse de pie. Ella asiente y se enjuaga la boca.
-Si hijo, no te preocupes.-Me dice ella y me rodea con sus brazos. Besa mi mejilla y luego se separa. La miro con el ceño fruncido. ¿Cuando dejaría de mentirme?
-¿Estas embarazada?.-Pregunto inseguro.
-No mi amor, yo ya no tengo hijos, pero tengo nietos.
-¿Que es lo que sucede? No me vengas con que no tienes nada. Madison también lo ha notado.

La veo pasar la lengua por sus labios. Acaricia mi cabello y me sonríe.

-Tu no debes preocuparte mi amor. Esta todo bien, confía en mamá.
-No me mientas.-Le pido y ella suspira.
-Tu guardas secretos Ash. Déjame tener los míos.
-No respecto a mi salud mamá.
-No tengo nada Ashton. Solo fue un vomito. Déjame salir.-Me pide y suspiro.

Paso la mano por mi cabello despeinandolo. Salgo del baño y voy hacia mi habitación donde Madison mira algo en su teléfono. Me acuesto a su lado y ella me mira.

-¿Y el jugo?.-Pregunta y yo suspiro. Me doy media vuelta y miro al techo. -¿Ash?
-Necesito silencio... Por favor, cierra la boca.-Le pido y ella no me contesta.

Me quedo así unos cuantos minutos. Absorto en mis pensamientos. Pestañeo y miro mi habitación.

Estoy solo.

Enciendo el televisor pero nada me gusta.

Salgo de mi habitación en busca de mi novia. Se que le hable un poco mal pero estoy nervioso. Entro a la cocina y la busco, no hay señal de ella. Voy hacia la sala y solo veo a mi madre en el regazo de mi padre. Ellos me miran.

-¿Vieron a Madison?.-Pregunto y mi mamá niega.
-Se ha ido a su casa.-Dice mi padre. -Hace como una hora Ash.
-Gracias.

Tomo mi chaqueta, las llaves de mi auto y las de mi apartamento. Voy hacia la casa de Madison y toco timbre. Es cuestión de segundos cuando ella me abre la puerta. Me mira confundida.

-¿Que sucede Ash?.-Me pregunta y yo me encojo de hombros, me acerco a ella y la abrazo. Depósito un beso en su cuello.
-Nada. ¿Quieres ir por una pizza, amor?.-Le pregunto y ella se separa de mi. Me mira unos segundos y luego asiente.

Me invita a pasar a su casa y veo como ella va hacia su habitación, así que la sigo. Me siento en su cama mientras ella busca ropa en su armario. Sonrió cuando se quita la blusa y se pone otra.

-Tu siempre cambiándote delante mío.-Bromeo y ella me mira, me saca la lengua y luego ríe.
-Es mi habitación, puedo darme esa libertad.
-Apresurate preciosa, tengo hambre.-Le digo y ella asiente. Camina hacia mi y depósita un beso corto en mis labios.
-Ya estoy, lindo.

Una vez arriba del auto, conduzco hacia la pizzería cerca de mi apartamento, hacemos nuestro pedido y esperamos sentados. 

-Te ves hermosa.-Le digo y ella me sonríe. Se pone de pie y camina hacia mi. Yo observo cada paso que da.

¿Se puede estar tan enamorado?

-Crei que estabas molesto.-Me dice acariciando mi nuca. Se sienta con cuidado en mis piernas y yo la rodeo con mis brazos.
-No era contigo. Lo siento por hablarte mal.
-Descuida.-Dice ella antes de besar mis labios.
-Te amo, mucho.
-Y no sabes lo feliz que me hace eso. No hay nada tan lindo como amar y ser amado por esa persona especial. Tu eres mi persona Ash. Te amo también yo.
-Luego, podemos ir al apartamento y... Pasar la noche... Juntos.
-¿Que te refieres con juntos?.-Pregunta ella y yo no puedo creer que me sonrojo. Ella ríe y besa mi mejilla.-Si. Quiero.

Yo sonrió.

Esta noche le haría el amor a mi chica y borraría cualquier rastro de George de ella.

Como si fuera mio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora