Justin y yo llevábamos una semana "viviendo" en mi casa. Hoy era el último día ahí, mañana regresábamos a Atlanta. ¿Por qué Atlanta? Porque Justin se había cambiado de casa, pero aún seguía conservando la de Los Ángeles. En Atlanta lo esperaban los chicos como Lil Za y Khalil. Tenía que admitir que a mí me encantaba Lil Za aunque el mundo entero dijera que era una mala persona, yo lo podía defender porque sabía que no era así.
— ¿Qué ves? -preguntó Justin entrando a mi habitación.
—Televisión. -respondí.
— ¿De que tipo? A eso me refiero.
—Aaah, es un festival.
"Y ahora con ustedes ¡Cachureos!" La presentadora anunció. Dios mío, amaba esto, Cachureos era un programa de televisión cuando yo tenía unos 6 ó 7 años me encantaban.
— ¡Dios mío Justin, tuvimos que ir a ahí! Me encanta eso. -exclame cuando los personajes salieron a escenario a bailar y cantar.
— ¿Qué es eso?
—Ven baila conmigo.
Me levanté de la cama y empecé a bailar. "Hay una mosca que se callo a la sopa, hay una mosca."
Les puedo jurar que Justin me miraba como si estuviera realmente loca, rodaba los ojos cada dos segundos y se reía de mí.
— ¡Párate! Mira, aquí tienes que bailar lo que tú quieras, cuando él dice "congelado" te quedas como una estatua. Ven inténtalo.
—No quiero. -Justin hizo un puchero.
—Ven no seas flojo, levántate.
Lo levante como pude y empecé a bailar, Justin ni se movía, creí decirle que cuando Marcelo de Cachureos dijera congelado uno no tenía que moverse.
— ¡Baila!
—No _____ qué vergüenza.
— ¿Acaso me tienes vergüenza? Baila conmigo.
Negó con su cabeza y a la vez empezó a reír. Al final de todo comenzó a bailar de la forma nigga que siempre lo hacía.
"Cuando diga una palabra..."
— ¡Congelado! -grité.
Nos quedamos como estatuas pero Justin empezó a reír. Amaba su risa.
—Perdiste. -dije mientras me lanzaba a sus brazos.
—Tu forma de bailar es muy graciosa, es imposible no moverse.
—Igual, has perdido.
—Bien, lo acepto, he perdido.
Saco su pantalón y pollera para luego quedar en bóxers, se acostó en la cama y palmeo su lado para que me acostara.
—Tengo que admitir que fue divertido. -dijo en mi oído.
—Sabía que te gustaría.
—Aunque bailas muy raro. -río.
—Cállate, no te rías de mí.
—Te amo...
—Yo también lo hago. ¿Sabes? Quiero llegar luego a Atlanta.
— ¿Por qué tan entusiasmada? -preguntó, su cara estaba en mí cuello, eso quería decir que sentía su respiración cada vez.
—Si lo digo, te enojarás.
—No, no lo haré. -dejo un pequeño beso en mi cuello.
—Es que... Estoy entusiasmada por conocer a Lil Za.
—Ya te dije que no lo conocerías. -su tono de voz cambió a uno totalmente serio.
—Justin, no seas así. Quiero conocerlo.
— ¿Para qué _____? Es igual a todos mis amigos.
—Sé que estás celoso porque quiero conocerlo, pero lo quiero hacer porque cuando veía sus vídeos en Instagram me reía mucho, aparte sé que es un buen amigo y eso.
—Pensaré en presentártelo.
— ¿Eso es un si? -dije feliz.
—Es un no sé, lo pensaré.
—No seas pesado.
—Lo pensaré ahora déjame dormir.
—Está bien, buenas noches.
Bese su frente con cuidado y acaricie su cabello, gruño, sabía que no le gustaba que se lo tocaran. Él decía que era feo, que no le gustaba pero era hermoso, cualquier persona daría todo por tener ese color y esa suavidad de cabello.
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— ¡¿Rodrigo llevas todas tus cosas?!
Mamá gritaba por toda la casa, de que se nos iba a ir el vuelo, que no volveríamos aquí en un buen tiempo así que teníamos que llevar todo, que estábamos atrasados y blah blah.
— ¡Sí mamá, estoy listo! -respondió mi hermano.
—_____ ¿Tú estás lista?
—Sip, ya vámonos.
—Avísale a Justin que vamos en camino.
Sacamos las maletas y algunas cajas para llevarlas al taxi que nos esperaba y nos fuimos rumbo al aeropuerto, donde nos esperaba Justin.
•De ____: Vamos en el taxi en este momento, así que espéranos.
No respondió, así que seguí con mi vista en el paisaje. El viaje hacía el aeropuerto fue largo, pues no quedaba muy cerca de mi casa.
Bajamos con las cosas y nos adentramos en el aeropuerto, ahí estaba Justin pegado a su celular.
—Hola. -dije llegando a su lado, me miro y sonrió.
—Hola, cariño. -se levanto del asiento y me beso.
—Ay Justin, disculpa la demora pero ya sabes, se demoran mucho. -dijo mi mamá.
—No te preocupes Carrie.
Mi hermano saludo a Justin con un saludo que ellos mismos habían inventado, Justin era tan inmaduro que seguía todos los juegos del pequeño.
—Bien, -dijo Justin- subamos al avión.
—Pero aun no llaman a nuestro vuelo. -dije con el ceño fruncido.
—Sabes muy bien que no puedo irme en un avión común y corriente, llame a mi vuelo privado.
— ¡Woo! Bro, ¿Tienes un avión privado? -pregunto mi hermano.
—Así es. -Justin asintió con una sonrisa.
—Que esperas... Es Justin Bieber. -tome mi maleta y empece a caminar donde se encontraban los aviones.
—No seas enojona, dame tu maleta.
—No estoy enojada. -le di una pequeña sonrisa. —Y no te preocupes la puedo llevar yo solita.
—Si tu dices... -Justin se encogió de hombros.
Caminamos hasta el gran avión que tenía Justin y subimos. Justin le dijo a mi hermano que podía jugar play station si quería, mi hermano no sabía decir no a esas cosas.
—Quiero una foto contigo. -dijo Justin sentándose a mi lado.
El avión despego y nos pusimos en marcha hacia nuestro destino. Atlanta.
—Tenemos fotos juntos Justin.
—Pero quiero una para subirla a Instagram, ya sabes.
—Bien, tómala.
—Dame un besito en la mejilla. -dijo Justin apuntando donde quería que lo besara.
Saco su iphone y abrió Instagram, puso la cámara y la puso frente de nuestros rostros mientras yo le besaba la mejilla y él sonreía. En la descripción puso; "Come back to Atlanta with a surprise! #loveu" {vamos devuelta a Atlanta y con una sorpresa!}
—Esta hermosa, una de mis favoritas, podrías mandarme-la.
—No, solo mía.
—Justin... También la quiero tener.
—Lo siento consíguete otra.
—Uh Justin, odio cuando te comportas así.
— ¿Como así? -frunció el ceño.
—Pesado, cargante.
— ¡Mentira! -exclamó- No soy ninguna de esas. Soy cariñoso, tierno, un amor.
—Si Justin si.
—Enojona si te la mandaré.
—Bien, así me gustas más.
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— ¡Voy a saludar a Lil Za! Esto es genial.
—No ____, ya pasa.
—Woah tu nueva casa es gigante.
Habíamos llegado a Atlanta a la nueva casa de Justin, esta era gigante, bueno la otra también pero ah que importa eran grandes ambas. No hallaba a la hora para que Lil Za bajara esa escalera, pero Justin no me dejaba, decía que no bajaría y que yo tampoco subiría. Estábamos en el comedor de la casa cuando bajo Khalil, también me caía bien pero no como Lil Za así que lo salude normalmente.
—Bro, tuviste suerte de recuperarla. -Khalil le dio unas pequeñas palmadas a Justin en su hombro.
—Así es Kalfani, mucha suerte.
—Khalil ¿puedo preguntarte algo? -dije tímida.
—Sí, dime.
—Umh, no te lo puedo decir frente a Justin, ven.
Lo tome del brazo y lo aleje de Justin. Si lo decía frente a Justin seguramente se enojaría.
— ¿Que quieres preguntarme? -dijo riendo.
— ¿Puedes presentarme a Lil Za por favor? Di que si, hago lo quieras pero quiero conocerlo.
—No hay problema, -Khalil río- ahora ven.
Fuimos de nuevo al comedor, Justin estaba confuso y con el ceño fruncido, es decir, es normal me lleve a su amigo para preguntarle algo y él ni siquiera sabe que cosa era.
—Bajo enseguida con él. -Khalil me susurro y yo asentí.
— ¿Qué le preguntaste _____? -dijo Justin serio.
—Nada malo, en serio.
—Quizá que cosa dijiste.
—No te enojes no hice nada malo.
—Mh, no te creo. -dijo.
—Bueno no me creas, no es mi problema.
— ¿Alguien quería conocerme? -dijo un voz detrás de mí.
Me di la vuelta para ver a un Lil Za totalmente sonriente. Miré a Justin quien me miraba serio y luego corrí a abrazar a Lil.
— ¡Por fin te puedo conocer! -grite emocionada.
—Digo lo mismo, pequeña.
—Oh Za, creo que tendrás que contarme muchos chistes mientras estés aquí.
—Seria un gusto. -me guiño un ojo. —Veo que Bizzle tiene mucha suerte de tenerte.
—Sí. -susurro un Justin, serio y frío.
—Tú tienes a Atifa y creo que es una excelente mujer aparte de ser hermosa. -dije yo.
—Oh sí, lo es. -Za asintió.
—Si no la llego a conocer dale mis saludos.
—La verás, hoy no porque anda con su familia, pero ya en unos días llegará nuevamente.
—Me alegro demasiado, creo que es mi día de suerte o no lo sé.
Justin estaba serio mirando un punto fijo, Khalil estaba en su iphone escribiendo algo, mientras que Za y yo nos estábamos riendo. Era muy divertido, hacía caras, me había contado de como se le había salido el diente y yo no paraba de reír.
— ¡Alto, alto, alto! -dije riendo. —Al menos déjame respirar.
—Si lo siento, creo que te conté demasiadas cosas.
—Deberías ser humorista. -reí más fuerte.
—_____ ¿por qué haces esos sonidos de cerdo?
—Lo siento se me salen por si solo.
Cuando me reía lo hacía para adentro en algunas ocasiones y salían esos sonidos de un cerdo, era vergonzoso.
—Eso si que es gracioso. -Za río.
—Es más vergonzoso que gracioso.
—Nah, creo que a mí me salen como hiena así que quédate tranquila, no eres la única.
—Za cállate, creo que voy a morir en cualquier momento por ataque de risa.
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Y ahora yo estaba acomodando mis cosas, Za y Khalil habían salido a un club nocturno, menos mal que a Justin no se le ocurrió ir ya que dijo que estaba cansado y sabía que cuando Justin iba a uno de esos cometía cualquier estupidez.
—Justin... ¿No me vas a hablar en toda la noche?
—Anda y dile a Za que te siga contando chistes.
— ¿En serio Justin? No puedes.
—Sí puedo, mira lo estoy haciendo.
—No entiendo porque te pones celoso, es decir, es tu amigo sabes que no me enamoraría jamás de él.
—Yo no estoy celoso.
—Si, lo que tu digas cariño.
— ¿Tendría que estarlo? -preguntó con el ceño fruncido.
—No lo sé, es tu problema no el mío.
—Me das a entender que si tengo que estar celoso.
— ¡No tienes porque estarlo! -grite.
—Claro que puedo, porque tú -me apunto- estabas coqueteando con mi amigo.
—Vaya Justin, no sabía que reírse era coquetear. Entonces tú coqueteas con todas.
—No es cierto.
—Así lo estás dando a entender, así que no digas que no es cierto.
—Pero bueno, el punto es que sí estabas coqueteando con mi amigo.
— ¿Te falla Justin? ¡Tú mismo sabes que al que quiero para toda mi vida eres tu, pero siempre llegas con algo y cagas todo!
Me encerré en el baño para ponerme mi pijama, odiaba con toda mi vida que Justin se pusiera así. Ahora uno no se puede reír con nadie porque ya estás coqueteando, según Justin.
—_____ abre la puerta.
—No.
—Abrela o te juro que la abro yo.
—Me da lo mismo.
—_____ estas agotando mi paciencia.
—When you ready come and get it na na na na na na na na. -comencé a cantar para molestarlo.
—Estas chistosa.
— Roller coaster, roller coaster Spinning all around and around for a while baby.
—Cantas mal, ya sale del baño.
—No escuches entonces.
—Es que estás gritando en ves de cantar.
— ¡People come and go! -grite más fuerte.
—Ya cállate por favor, pobres vecinos.
—Ni siquiera tienes vecinos, pobre.
—Cierto, no tengo. -susurro.
Salí del baño sin hacer ruido, Justin me miro y yo solo le di una pequeña sonrisa.
—Al fin.
— ¿Es que uno no puede hacer sus necesidades tranquila? Dios Justin.
— ¿Me vas a decir que estabas cagando? Eres asquerosa.
—Tú lo dijiste yo no fui, aparte no estaba haciendo excremento.
— ¿Entonces?
—Estaba haciendo pipimento, no mentira estaba haciendo pipi, lavando-me los dientes y eso.
—Realmente no estoy con una persona normal.
—Dijo el normal.
—Ya ven a acostarte tonta.
—Dijo el tonto.
Me acosté a su lado mientras él ponía su mandíbula en mi hombro y sentía su respiración en mi oreja.
—Don't need these other pretty faces. Cause when you're mine in the world. There's gonna be one less lonely girl.
Era lindo quedarse dormida mientras tu novio te cantaba una canción al oído y te decía que eras de él. Sí verdaderamente era lindo.
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HOLA PANES!!comenten,Voten ya saben ;)
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Yo Soy Belieber-Justin Bieber y tu
Fanfic¿Conocerlo eso parecia imposible? ¿Ir a sus conciertos ?¿Ser su novia? siempre lo apoyamos pero todo puede pasar en unos dias por eso..YO SOY BELIEBER
