Después de una noche terrible, en la que Louis solo dio vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño, se levantó temprano y sin desayunar se despidió con la excusa de que lo querían más temprano en la oficina. Harry llevaría a Ad al colegio esa mañana aunque era Louis el que lo hacía regularmente, pues él tenía un horario de oficina.
Se reunió con el abogado en casa de Ed para no ser vistos. Se sentía un poco ridículo jugando a las escondas. Después de lo que vivió estando en One Direction, se había propuesto no tener que hacer nada a escondidas de nuevo y aquí estaba, preocupado de los ojos curiosos y profundamente angustiado por Harry, nunca antes le había ocultado nada.
El abogado les pidió que no perdieran la calma, que hicieran sus actividades con normalidad y que reunieran toda la evidencia de Adeline, alguien no pasa por tu vida sin dejar un rastro. Aunque su identidad se había cuestionado debido al desafortunado hecho de que Simon borró todo rastro de su existencia, haciéndola pasar por muerta en el accidente que mató a sus padres, con todo y eso, tenían vídeos, cosas personales que ella usó y que conservaban y su acta de defunción real. Esperaban que esto fuera suficiente para convencer al juez de que era solo un terrible mal entendido.
Después de la reunión ambos regresaron a sus respectivos trabajos. Por la noche Harry le dijo a Louis que lo había llamado a la oficina y que le habían dicho que su primera junta era hasta después de mediodía. Louis inventó algo tonto y se escabulló al estudio hasta la hora de dormir.
Dos largos días pasaron sin noticias hasta que sonó su teléfono justo a la mitad de una película que estaban viendo los tres recostados en el sofá. Al ver el número no pudo disimular suficientemente bien su nerviosismo.
-¿No vas a contestar? – le preguntó Harry dándose cuenta de que guardaba rápido el teléfono.
-Todas las personas con las que quiero hablar ahora están aquí. – le respondió sinceramente.
Esa noche, luego de dormir a Ad, Harry confrontó a Louis decidido.
-Quiero que me digas qué está pasando. – le dijo mirándolo a los ojos, con firmeza.
Louis intentó pensar excusas, por un momento deseó que no lo conociera mejor que ninguna otra persona en el mundo, pero sus ojos lo desarmaron. Quería protegerlo pero se dio cuenta de que no había batalla que valiera la pena pelear si no era con él. Y le contó todo. Harry reflejó su preocupación, su desconcierto, su inquietud, todas esas emociones pasaron por su rostro mientras le mostraba la carta y le aseguraba que el abogado ya estaba revisando lo que debían hacer. Tantas cosas sintió Harry, le aterraba solo pensar en poder perder a su hija, le angustiaba no tener la mínima idea de quien pudiera estar haciendo esto, pero no hubo ni un solo reproche. Ni siquiera tuvo que preguntarle por qué no le había dicho nada, él lo sabía, lo amaba.
-Lo superaremos juntos. – Le dijo Harry a manera de conclusión.
Al día siguiente Harry reunió a Liam, Niall y Zayn y les explicó lo de la carta. Se suponía que sería un día especial, justo hoy comenzarían la planificación para regresar como One Direction, sincronizando sus agendas y proponiendo ideas de cómo querían que fuera su nueva música.
En cuanto escucharon las noticias y después de unos momentos de pasmo total, se concentraron en lo que tenían para comenzar a investigar.
Louis llegó con el abogado y les explicó ampliamente lo que necesitaban, lo primero y más importante era el acta de defunción y cualquier otro documento de identificación oficial. Les recomendó buscar en la empresa cualquier registro de su paso por ella y cualquier posible testimonio de alguna persona que la recordara o tratara con ella. Y buscar objetos personales que pudieran servir para tomar una muestra de ADN, que buscaran algún familiar o registro de escuela anterior, personas que pudieran identificarla. Y finalmente, les sugirió que hicieran la prueba de paternidad para determinar cuál de los dos era el padre biológico.
Les dejó una copia de los documentos de apelación, donde decía los datos de la investigación y se marchó quedando en comunicarles cualquier avance.
Los chicos se repartieron rápidamente las tareas. Ed que era el mejor con la computadora se encargaría de investigar todo lo relacionado con la demanda, para tratar de rastrear de donde venía en realidad.
Niall y Louis se dirigieron a MMRecords a buscar registros viejos e interrogar a la poca gente que quedaba trabajando allí desde su etapa anterior como Modest. Casi todos habían desertado cuando la administración se modificó. Le pidieron a Zayn que los acompañara pero insistió en quedarse en casa con Harry y Liam, quienes tenían la tarea más difícil de todas, buscarían en las cosas personales de Ad.
Harry y Liam
Harry aspiró y exhaló despacio y luego giró la manija de la puerta. La habitación estaba iluminada porque las cortinas estaban abiertas. Cada mes la mucama entraba a sacudir, con la instrucción de que no moviera nada. Ad solía jugar allí mucho cuando era más pequeña, se llevaba sus dinosaurios y jugaba largas horas, nunca fue una niña de muñecas. A veces Ed iba y se sentaba en el sofá y tocaba la guitarra para ella mientras jugaba. Ellos fueron los más valientes porque Harry todavía sentía que se le encogía el estómago por el dolor cada vez que intentaba entrar.
Lo único que les pareció útil fue un cepillo que seguía en el tocador. Harry abrió el closet, en donde permanecía su ropa colgada, solo había tres pares de zapatos en el piso y unos tenis adidas que Louis le había regalado. Quisieron comprarle mucho más y ella nunca aceptó, solía decir que no lo necesitaba y hasta ahora lo entendía, todas esas cosas que no tenían valor... no sin ella.
Liam tocó su hombro sacándolo de sus pensamientos. Zayn se despidió de ellos excusándose con algo a lo que no prestaron atención, de cualquier forma, no estaba ayudando en absoluto, desaparecía constantemente al baño, lo que atribuyeron a su dificultad de lidiar con esta situación. Su fuerte nunca había sido manejar circunstancias complicadas y no esperaban de él demasiado. Siguieron en el despacho, donde guardaban todos los documentos importantes, encontrando el acta de defunción y los documentos originales de la inseminación y la sucesión de derechos del bebé que ella les había firmado meses antes de que Ad naciera.
Louis y Niall
Después de varias horas, al final se rindieron. Checaron todos los archivos en los registros de la computadora, incluso sacaron las cajas de la bodega donde conservaban físicamente los contratos laborales pero no encontraron nada, ni un solo rastro de que hubiese trabajado allí.
Al cambiar la administración de la empresa, muchos directivos se fueron por iniciativa propia, incluidos los ancianos, que de inmediato integraron la competencia con gran éxito. No les fue difícil hacerlo, muchos artistas y una cantidad muy considerable de público que les retiró el apoyo a los chicos, se los entregó con gusto a sus opositores. Los conservadores y sobre todo los religiosos fanáticos, hicieron marchas y manifestaciones hasta el cansancio para reducirlos y casi lo logran. La opinión pública es tan insidiosa a veces, que resulta imposible evitarla.
El personal administrativo fue recortado casi a un tercio, quedando un edificio casi vacío, sin simpatizantes, casi sin público y carente de artistas qué representar, porque venir significaba correr el riesgo a perder sus carreras en este ojo de huracán.
Solían bromear diciendo que se quedaron con una empresa fantasma, pero si no hubiera sido porque ellos siguieron produciendo la música de Harry y Ed se habrían ido a la bancarrota en solo unos meses.
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Unbreakable
Fanfiction¿Te has preguntado alguna vez, qué sería de tu vida si hubieras tomado decisiones diferentes? Siete años después de perder a Adeline, inmersos en la vida que soñaron, Louis y Harry descubren que alguien trata de quitarles a su pequeña hija. Ahora d...