Unbreakable

Esperando por ti

La junta continúo por un par de horas más, se integraron a ella, primero los ancianos y luego una joven que se identificó como Lucy, encargada de la logística de la futura gira y de agendar todos los proyectos de trabajo.

Aburridos y cansados, comenzaron a sentir que aquello de lo que habían escapado hace años, por fin los había alcanzado. El pasado encuentra la forma de repetirse si no encontramos primero, la forma de modificarlo. Y actuar siempre de la misma manera, inevitablemente conduce a los mismos resultados.

-Nos reuniremos mañana otra vez para empezar a trabajar en las composiciones y para hacer las primeras pruebas de imagen y vestuario – dijo Simon.

-Sentimos mucho decepcionarte pero el día de mañana ya tenemos planes. Por favor avisa a mi asistente personal para que te agende otra cita y hablaremos de la posibilidad de hacer lo que pides en otro momento.

-Tú no tienes asistente personal.

-No se te escapa nada, debe ser por eso que eres el jefe - respondió Louis con sarcasmo - Entonces, contrata una y luego agendas una cita.

-No puedes hacer esto.

- Entonces despídenos.

-¡Basta! – Dijo Simon enérgicamente, para que todos dejaran de reír – Creo que no están viendo la magnitud de lo que sucede. Si queremos que One Direction regrese con un éxito sin precedentes, necesitamos hacer un trabajo excelente y esta vez no permitiré que lo arruinen con sus tonterías.

-Nosotros amamos One Direction, ninguno de los cuatro queríamos dejarlo - replicó Louis - ¿Cómo puedes acusarnos de arruinarlo?

-¿Entonces por qué se separaron? - preguntó el más viejo de los ancianos.

-No lo hicimos - respondió Liam con esa sensatez que lo caracterizaba - El problema no era la banda, ni la música, ni los otros chicos, ni las fans, ni el dinero. El problema eran ustedes. Esa empresa que se dedicó a explotarnos con giras que no nos permitían dormir o descansar. Las entrevistas matutinas, las sesiones de fotos vespertinas, seguidas de presentaciones, seguidos de viajes en los que teníamos que hacerlo todo, aparte de escribir canciones y grabar.

-Lo mismo pasa con Larry Stylinson - dijo Harry - El conflicto nunca fue amarnos, el problema era tener que escondernos, tener que fingir que estábamos enamorados de alguien más, tener que despertar separados, solamente porque el resto del mundo no lo pudiera aceptar. Nadie debería tener que pasar por ese infierno.

-Y puedes estar completamente seguro de que no volveremos a pasar por eso nunca más -agregó Louis.

Simon los observó. Se habría enojado, sino tuviera la situación bajo su control. Pensó en aquellos chiquillos que audicionaron soñando que algún día podrían dedicarse de lleno a la industria musical. Recordó haber visto en ellos una chispa, ese "algo" especial en su interior, que le hizo saber, incluso entonces, que eran extraordinarios, si tan solo alguien les permitía demostrar de lo que eran capaces. Ni en sus más locas predicciones, habría imaginado la magnitud que tomaría su situación, pero sí había dicho que lograrían algo tan grande, tan poderoso, que su mensaje sería escuchado alrededor del mundo. Y había tenido razón. Sintió... orgullo.

-Está bien, les concederé esta pequeña victoria. Tienen unos días libres, hasta el gran evento publicitario. Disfruten de sus últimas vacaciones - hizo una pausa, pasando su mirada de uno en uno. Un gesto, que sintieron invasivo, como si pudiese adivinar lo que pensaban o saber lo que harían - Me retiro, pero antes de hacerlo, quiero que se tomen un momento para pensar en todo lo que han sido sus vidas, es su familia, en sus amigos, en sus carreras, en su futuro, y se pregunten, si son las mismas personas que fueron hace un año, hace un mes, hace un día, hace una hora. Tengan cuidado al elegir a sus enemigos, muchachos, porque uno termina pareciéndose a ellos.