Capitulo XIX

605 46 0
                                    

(Ámbar sigue sobre el hombro de Simón mientras ése camina con ella hacia la salida del hospital, donde se encuentra con los amigos) 

Nina: ¿Qué pasa?—pregunta entre risas. 

Ámbar: Diganle que me suelte, me está secuestrando. 

Matteo: Lo siento pero no los metemos en problemas de pareja. 

Ámbar: Acabaré con tu vida, Matteo Balsano. 

Simón: La traeré en la moche, no se preocupen. 

Luna: No nos preocupamos. 

Ámbar: Veo cuánto me quieren, eh, están en mi lista negra. 

Jim: Pasenla bien Ámbar: Mi doctor se pondrá furioso. 

Nico: Negociaré con la doctora. 

Simón: Perfecto. (Simón empieza a caminar) 

Ámbar: Me las van a pagar traidores. (Dice Ámbar mientras Simón se aleja con ella) 

Ámbar: No me puedo creer que me hayas sacado del hospital a esta hora y cargada en tu hombro, Simón.—dice Ámbar tapando la cara con las manos. 

Simón: Vamos a dirvertirnos un poco. (Simón para un taxi y montan. El taxi los conduce hasta un hotel) 

Simón: Gracias.—dice Simón al taxista cuando bajan. 

Ámbar: No me digas que nos vamos a dirvertir en un hotel.—dice Ámbar tomando a Simón de la mano mientras se dirigen al interior del edificio. 

Simón: ¿Te parece si buscamos ropa para ti, primero? No quiero parecer el secuestrador de enfermos. 

Ámbar: Te recuerdo que me secuestraste. 

Simón: Lo hice por buena causa. (El portero se acerca a Simón) 

Portero: La señora Cecilia me dijo que vendría con su mujer. 

Simón: Sí, es ella.—dice Simón mostrando a Ámbar —¿Le dijo algo del vestuario? 

Portero: Sí, la señora les mostrará. 

Mujer: Siganme. (Ámbar y Simón caminan tras la mujer) 

Ámbar: ¿Quién es Cecilia? 

Simón: Una mujer. (Ámbar le golpea el brazo y Simón se ríe) 

Ámbar: Ya sé que es mujer, quiero saber qué clase de mujer es ¿es guapa? ¿es madura? ¿te gusta? 

Simón: ¿Por qué me preguntas eso? ¿estás celosa? 

Ámbar: ¿Es que debo estarlo? 

Simón: No, por supuesto que no. 

Ámbar: Más te vale, Simón Alvarez, no quisiera acabar en una cárcel por defender lo que es mío.

 Simón: No conocía esa parte agresiva de ti. 

Ámbar:Te aseguro que es una parte que no te gustaría conocer, así que espero que Cecilia no se te acerque. 

Simón: Sólo tengo ojos para ti. 

Ámbar: Lo sé, pero sos demasiado hermoso, es un riesgo.

(Ámbar va vestida de ropa simple, un short, una blusa y unas zapatillas, ella y Simón se dirigen al restaurante del hotel, donde se encuentra Cecilia esperando por ellos) 

Cecilia: Simón. —llama desde su mesa levantando la mano para que Simón los pudiera ver. 

Ámbar: ¿Es ella? 

Por tu AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora