Fénix & Lux «ChanBaek»

2. La llegada y ultimas vacaciones

Del otro lado dos hermanos totalmente diferentes a los otros diez hermanos se encontraban empacando sus cosas sin saber la razón por lo cual lo hacían, fue en ese momento que una lechuza entro a la casa de la familia Park dejando caer una misteriosa carta sobre la mesa, la lechuza no espero a que dieran respuesta—o darle algo a cambio—porque en un abrir y cerrar de ojos la lechuza se encontraba saliendo por otra ventana. La madre de los dos hermanos restantes sonrío dándoles la orden a sus hijos a empacar.

—Ya tenemos todo listo, ¿ahora nos dirás?—habló el mayor rompiendo el incómodo silencio que se había producido

—Cambiaran de escuela—fue lo único que dijo la madre de los dos chicos, levantándose de la mesa, dando como fin a esta pequeña conversación se dirigió a su respectiva habitación

— ¿Te iras así nada más?—la voz gruesa del hermano menor retumbó por toda la casa

La pelirroja giro sobre sus talones retando con la mirada a su hijo menor.

— ¿Tengo que dar explicaciones?

—Por lo menos dinos porque nos vamos

Rodeo los ojos suspirando pesadamente, volvió a tomar asiento mirando a ambos chicos.

—Ha llegado una carga de Candergan—extendió la carta en dirección de los chicos—. Quieren que vayan a tomar clases ahí

—No iremos—dijo Kris

— ¿No?—reto como la mirada a su hijo mayor, miró a su hijo menor posando su mano sobre la suya tomándola para darle un ligero apretón—ChanYeol... ¿tú que dices?

— ¿Que digo?—bufo—Estoy de acuerdo con Kris, no iremos

Cansada pero manteniendo la poca paciencia que le quedaba puso su mejor cara para convencerlos—Por favor...es lo que más quiero en este momento, ¿se imaginan lo mucho que haremos en Candergan? Teniendo a mis dos hijos con el enemigo, dándonos información para poder atacar. ¡Eso es fabuloso!—tomó las manos de sus hijos dedicándoles una mirada acompañada de un pequeño puchero—Es lo que más quiero

ChanYeol desvió la mirada ahora mirando a su hermano, esos ojos marrón oscuro solo le decían un has lo que quieras, siempre te acompañaré. Suspiro pesadamente soltándose del agarre de su madre, tomó la carta al igual que sus maletas.

—Si mi querida madre lo desea—tomó su mano para depositar un cálido beso en ella—, lo tendrá

Orgullosa, sonrío asintiendo levemente dándole la aprobación.

—Son los mejores hijos que una madre malvada puede tener. —Sonrío falsamente tomando sus cosas, dispuesta a irse—Infórmenme de todo, que tengan un buen viaje

Dicho eso la pelirroja desapareció dejando a ambos chicos solos, el mayor suspiro negando con la cabeza, ¿es que nunca cambiara? Pensó. Tomaron sus cosas mirando el pequeño objeto extraño.

— ¿Esto qué es?—pregunto ChanYeol

—Solo aprieta el botón—YiFan apretó el botón rojo haciéndolos desaparecer, dejando un rastro de polvo en el lugar donde antes se encontraban

Ahora se encontraban viajando a Candergan, dejando su querido y horrible Dasdem solo por un berrinche de su madre.

—Descuida, tendrás lo que quieres—juro ChanYeol

[ . . . ]

— ¿Cómo se sienten?—pregunto la señorita Han viéndolos desde el retrovisor

En todo el camino la profesora había estado hablando con ambos hermanos teniendo ya fastidiado a la pequeña persona lado suyo.