Omegas vs Alfas [Omegaverse]

38. Última oportunidad

Samuel 🅾

Pasaron dos semanas, llenas de sesiones de estudio y exámenes. Reduje las horas para ver al rubio, de vez en cuando iba a casa y gracias a esto fortaleció la relación con mis padres, conoció al omega de Damián; es agradable que se lleve mejor con mis padres, quisiera llevarme bien con su familia también, sus padres son un amor pero Cheiz se muestra desinteresado en mí.

Me hizo sentir culpable saber que era omega, juzgaba tanto al rubio (antes de salir con él) y pensaba que no sabría acerca de los problemas de los omegas, me trago mis pensamientos mejor. Louis ha estado al lado de su hermano y entiende más de lo que pensé sobre nosotros.

— Perfecto Samuel, estás precioso hoy, déjame abrazarte.

Corro hacia Louis y me lanzo a sus brazos, inhalo su aroma tropical y mis músculos se relajan; — Te amo, pequeño.  — aún no estoy acostumbrado a esas palabras, conllevan mucha responsabilidad decirlas pero yo también le amo, pero shhh no se lo digan, es muy confiado de si mismo.

— Te extrañé mucho rubio, al fin se acabó esta semana de exámenes. — terminé el abrazo y tomé su mano, hoy iremos a casa caminando.

— Por un momento quise mandar a la mierda las fórmulas y correr a tu casa.

— Te habría golpeado por abandonar... pero también besado.

Mis mejillas se encendieron, bueno, nuestras mejillas.

(...)

— Es un placer tenerte en casa,  Louis.

— Es un placer que me inviten a compartir la mesa con ustedes, señora Mckenner.

La comida de mamá estuvo estupenda y por alguna razón nada se quemó, papá lee su periódico y Damián aún no viene a casa.
Es muy extraño para mi el no tenerlo en casa, pero sus esfuerzos dieron fruto, con todos sus ahorros pudo sacar un apartamento y llevar a su omega a vivir con él.
De vez en cuando viene a casa a comer con nosotros, juega baloncesto con el rubio y creo que le cae mejor a Cheiz que yo. 

Tras lavar los platos subí a mi habitación, Louis debe estar esperándome. Mi teléfono vibra y logró contestar la llamada.

— ¿Quién habla?

— Hermosa gema, quería invitarte a un granizado. —lanzo un suspiro, no quiero salir hoy, solo quiero quedarme en casa con Louis.  — ¿Aceptas?

— Veras Dorian, estoy ayudando a mamá en algo. Hoy no puedo.

— Me encanta como mientes, hoy tu madre no tiene nada que hacer,  lo sé porque se lo dijo a mi padre pero si no quieres salir ya qué. — sentí mucha vergüenza —  Era la última oportunidad.

Colgó.

¿Última oportunidad?

No di importancia y subí con mi rubio.