CAPITULO 38

28 3 1
                                    

Casleb me está ocultando algo y creo que es su padre, su pasado, han vuelto. No estoy segura pero es algo que debo resolver y averiguar yo sola y por mí misma porque es algo muy personal de lo que los demás no se deben enterar. Casleb tiene un montón de carácter ¿cómo puede ser que soporte eso? ¿o a lo mejor no lo está soportando? Lo que tengo claro es que Casleb es indomable, imposible de someter o dominar. Y tengo claro que su padre tampoco lo puede hacer. De pequeño era otra cosa. Entonces, si su padre ha vuelto con la basura de antes, pero Casleb nunca dejaría que volviera con esa basura, ¿Cómo ha pasado? Casleb me lo está ocultando, no entiendo por qué. Soy su novia, se supone que debo estar ahí para apoyarlo sea cuando sea ¿por qué no está confiando en mí? ¿Qué está pasando? Me siento un poco dolida pero debería dejar que se explique, sobretodo en estos momentos. Le diré que lo sé.

Además ahora que lo pienso, el otro día dijo que había obras en su casa, no quería que fuera. ¿Estará su casa destrozada? Tampoco creo que sea así. A veces puedo llegar a exagerar… creo.

Me visto y desayuno un tazón de leche con chocolate, anoche también tardé en dormirme pensando en Casleb. Eso demuestra que es importante porque yo soy súper dormilona y caigo redonda al minuto. Al llegar al instituto me encuentro a Casleb de cara.

-Casleb, luego tenemos que hablar, espérame en el recreo. Te tengo que decir una cosa- le digo esto y entro en el aula-.

Llega la hora del recreo, por fin. Pido a las chicas que se adelanten y voy hacia Casleb.

-¿Qué me tenías que decir?- dice con mirada seria-.

-Casleb, ¿las cosas van bien en casa, con tu padre?- lo miro fijamente y siento que mi mirada es tan intensa que quema-.

-Sí, ahí van- dice y se cruza de brazos-.

-¿No se ha vuelto a repetir lo que pasaba antes?- compruebo mis teorías y veo si me dice la verdad o no-.

-No- se pasa la mano por el pelo bajo mi atenta mirada-.

-No me estás mintiendo ¿verdad?- le pregunto, por favor di que sí, por favor no me sigas mintiendo-.

Me mira con hastío, se le nota la molestia y la incomodidad. Se está cabreando, es irascible. Pero si me miente en esto me da igual lo enfadado que esté.

-Tsk, no ¿por qué estás tan insistente?- en serio, yo sí que me estoy cabreando. Me cruzo de brazos-.

-Pues resulta que te he oído hablando con Layse y he ido atando cabos y creo que es eso lo que te pasa. Pero he tenido que ir atando cabos yo porque tú te has comportado súper extraño, me has mentido y no has confiado en mí para algo tan serio. Soy tu novia ¿sabes? ¿si no te apoyo en estas cosas, para qué estoy?- al acabar mi discurso presiono los labios en espera de una respuesta-.

-¿Escuchaste? ¿Cuánto escuchaste?- no me lo creo-.

-¡Esa no es la cuestión! ¿Por qué sólo te fijas en eso? Me has mentido, ¿sí o no?

-Gabby, no tengo por qué decírtelo todo- espeta, wow, hacía tiempo ya desde que no me soltaba una espantada así. Lo miro en silencio para que procese lo que dijo. Lo hace y recula un poco- esto… deberíamos hablarlo en otro momento, en un lugar más adecuado- se ve el remordimiento escondido en su mirada, quiere escapar de la situación, y yo lo dejo. Por ahora-.

-Vale, ¿cuando acaben las clases?

-Sí- responde, y salgo del aula-.

Camino cabreada por el pasillo hasta que llego al patio, me siento con rudeza al lado de las chicas.

-¿Qué pasó?- se sorprende Alya-.

-Problemas en el paraíso- dice Vicky-.

-Estoy súper cabreada- apreto los puños- idiota…

Algún día: Corazon de MelónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora