Porque te quiero... {Flozmin}

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PDV Jazmín 

Flor me trajo hasta su habitación para estar solas un rato a lo que obviamente no opuse resistencia, porque a pesar de haber estado la mayor parte del día en mi casa no me molestaba, para nada, seguir estando con ella acá en el hotel. 

J: Somos lo que vos quieras que seamos - le sonrío, aunque dudo que ella me vea porque estamos a oscuras.

F: Y yo quiero ser todo con y para vos.

J: ¿Y qué es todo?

F: TODO - como que resalta la palabra y yo enseguida entiendo a qué se refiere.

J: ¿Segura?

F: Si, y no me lo preguntes de nuevo porque con lo indecisa que soy me arrepiento y te quedas '¡CON LA AMEJITA QUENCHI!' perdón, te quedas sola.

J: - trago saliva - Okay, pero ahora no pod...

F: - me interrumpe - Sí, ahora sí.

J: Pero tengo que vo...

F: - me vuelve a interrumpir - ¿No queres estar conmigo?

J: - suspiro - ¿De verdad me estas preguntando? ¿Como no voy a querer estar con vos? Sos hermosa y sabes que te quiero - acaricio su mejilla - pero quiero que las dos la pasemos bien, que sea especial, que sea perfecto, en el lugar perfecto y con la ambientación perfecta - le sonrío.

F: Vos sos perfecta.

J: Vos también sos perfecta - le doy un pico.

Se separa de mí y se sienta en la cama, me siento al lado de ella y agarro una de sus manos. 

J: Te invito a pasar el fin de semana en mi casa de Tigre.

F: ¿Tenes una casa en Tigre? - dice asombrada.

J: Sí, ¿nunca te hable de ella?

F: No creo que no.

J: Se me pasó entonces - me río - Hace mucho que no voy así que debe estar todo lleno de polvo, pero ese se puede arreglar.

F: Obvio y yo te voy a ayudar '¡CON UN BUEN POLVO!' 

Creo que nunca me reí cuando a Flor se le escapa algo porque obviamente sé que es por el Tourette, pero esta vez la carcajada me salió del dedo chiquitito del pie, me llevé mi mano derecha a mi panza porque me estaba doliendo de tanto reírme y me acosté. 

J: Perdón... perdón Flor...Ay son una mierda por reírme así.

F: - ella se empieza a reír también - No te preocupes, a mí también me da gracia - se acuesta al lado mío.

J: Pero una cosa es que te rías vos y otra muy distinta es que lo haga yo - trato de normalizar mi respiración - Perdón.

F: Igual no me molesta - me abraza - además me encanta cuando te reís. 

Nos quedamos ahí, un minuto o dos, calladas, quietas y a oscuras obviamente, hasta que siento el peso de la mitad superior del cuerpo de Flor sobre el mío. Siento sus labios sobre los míos, y siento su mano derecha sobre mi costado, cerca de mis costillas.