25: « Yo pensab... »

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25: « Yo pensab

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25: « Yo pensab...»

Kyrae.

—¡¿Lista, cariño?!

—Uhm, creo que sí.

Entonces Justin saco sus manos de mis ojos y mi boca se abrió de inmediato al ver el nuevo sótano. ¡¿Pero qué es esto?! Un bar, una pared de botellas, una televisión, sofás de cuero, un... ¡¿eso es un tubo para bailar?!

—¿Qué es esto?

—¡Una habitación sin niños!

Mi prometido se acercó hacia la mini nevera y saco dos botellas de Heineken.

—¿Y ese tubo?

—Oh, es que siempre he querido que me bailes.

¿Pero qué clase de prometido tengo...? Bueno, no voy a negar que la idea resulta muy caliente, pero, ¿y si alguien lo veía? Si mis padres o suegros entraban aquí, iba a morirme de vergüenza.

—Celebra conmigo, Ky.

Tome la botella en mi mano y mire la mesa de pool, ¿cuándo metió eso aquí? Realmente estaba sorprendida, pero me agradaba la idea de tener esta habitación, ¡al fin Justin tuvo una buena idea! Y no se accidento poniéndolo en marcha.

—Creo que debemos ponerle llave a la puerta.

—¿Por qué?

—Por nuestros padres.

Entonces él soltó una carcajada, como si hubiera contando el mejor chiste del mundo y yo volví a fruncir el ceño al verlo de esa manera, ¿qué dije o hice? Uff, este hombre es demasiado raro, a veces es un infantil y otras veces es... bueno, algo casi, casi, casi maduro, pero que bah, no importa.

—No creo que mis padres se sorprendan con esto.

—¿A qué te refieres?

—Hubieron dos lamentables veces que los vi...

—¡No, cállate, uhg!

—¡Follando como...!

—¡No quiero escuchar!

—¡Conejos! —grito fuerte.

Mientras Justin se reía, yo intentaba no imaginar esa escena de mis suegros, ¡qué horrible, no! Yo los amo, ¡pero no quiero imaginármelos! Le saque la lengua y bebí mi cerveza para distraerme, pero no quite la mueca de mi rostro, que forma de traumatizarme.

—Perdona —dijo entre risas.

—Eres desagradable.

—Eso no dices cuando me la mam...

—¡Drew, basta! —corte de inmediato su frase.

Seguramente mi rostro estaba teñido de rojo por este idiota. No suele controlar su boca en palabras. Ojalá el niño nunca lo escuche hablar de esa manera o sus maestras tendrán un gran problema, y nosotros también.

Proyecto Bebé: Fuera de ControlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora