Almas gemelas (camren G!p adaptacion)

capítulo 52

Camila nunca se había sentido tan avergonzada, y lo peor era que ella no tenía nada de lo que avergonzarse. Además, hacía un momento ella estaba encantada con las atenciones de las dos rubias. Y de repente, se había levantado como alma que lleva el diablo al verla hablar con Bob. Y ahora se encontraba en la calle, yendo hacia algún lugar donde lauren  se sintiera más cómoda. Ni hablar.
—Ni hablar, monstruo —la miró a sus ojos llorosos y enrojecidos. Lauren  parecía débil.
La vaniria sintió una punzada al volver a oír esa palabra de su boca. Una boca carnosa, húmeda e hidratada.
—Oye, tú... —Bob apareció entre la multitud reunida en la calle. —¿Por qué no la sueltas? Ella no quiere irse contigo.
—Drama, drama —musitó dinah emocionada por los acontecimientos. —Una princesita despampanante entre un jugador de rugby y una mujer que parece uno de los inmortales. Mila, eres toda una rompecorazones.
Bob cogió a lauren por el hombro e inmediatamente wes y drew se le echaron encima. —Ni se te ocurra, chaval —dijo drew meneando la cabeza de un lado al otro. —Por tu bien. —Ya veo —murmuró mirando a lauren . —Así que tienes niñeras... ¿Eres una nena?
—Bob, déjalo —le dijo camila poniéndole una mano en el pecho. Lauren tenía mucha fuerza y podría hacerle daño.
Inmediatamente lauren  gruñendo le cogió de la muñeca y le apartó la mano de ella, mirándola iracunda. Se le removía el estómago cuando su cáraid tocaba a otro. —No lo toques, camila .
Camila apretó la mandíbula y sintió que la ira le recorría las entrañas y quemaba los últimos vestigios de su control y de su comprensión.
—Déjame en paz, lauren ... Me iré con quien me dé la gana... —le gritó apretando los puños a ambos lados de su cuerpo.
Lauren  la ignoró y la cogió de la mano, tirando de ella.
—Tu hermano es un poco posesivo, ¿no crees? —preguntó harry a Taylor
Taylor hizo una mueca con los labios. Bob era un inconveniente a su plan. Se suponía que camila debía arder de celos al ver a lauren  con keana y Lexa y que al sentir ese sentimiento su vena berserker tan territorial la hubiera hecho arrancarlq de ellas y después de una soberana bronca su vena vaniria la hubiera hecho comérsela entero. Alex le hizo eso a sinu y funcionó. Pero no, ese tal Bob estaba complicando las cosas.
—¿Sabes qué? Eres un auténtica hija de perra —le dijo camila mientras forcejeaba con ella. Para variar, no le contestó.
Entonces todo sucedió demasiado rápido. Bob corrió tras ellos y placó a lauren. tirándola al suelo. Camila apartó asustada. Lauren  gruñó de dolor y se quedó tosiendo, a cuatro patas.
Drew y wes fueron a por Bob y lo inmovilizaron. Dinah y harry corrieron y se colocaron al lado de camila . Taylor socorrió a lauren , que intentaba respirar.
Un montón de gente rodeó la escena y de repente se oyeron gritos espeluznantes. De los cristales del pub, salieron cuerpos despedidos que caían sin vida contra el arcén de la calle. Dos bestias inhumanas corrieron a cuatro patas, como los monos, y con un rugido mostraron los dientes llenos de sangre. —Lobeznos... —gritó drew. Wes y drew corrieron a detener a las bestias, sobrevolando los coches y saltando por encima de las cabezas de los peones. Tres hombres muy pálidos y delgados se acercaron a camila . las melenas negras y los ojos del mismo color. Las caras frías y sin expresión miraron a Taylor y la desafiaron. La gente corría desquiciada de un lado al otro.
Taylor  se movió a la velocidad de la luz y con un movimiento propio de un samurái sacó su puñal y lo clavó en el cuello de uno de ellos rebasándole la garganta. El vampiro cayó de rodillas sujetándose la carne abierta y haciendo aspavientos. Uno de los otros dos la cogió por la espalda y entonces harry lo golpeó con una de las maderas que habían salido despedidas del pub. El vampiro se giró hacia harry y sólo con la mirada lo hizo volar por los aires hasta que impactó en la ventana delantera de un Volkswagen rojo. La alarma empezó a sonar inmediatamente. Harry miró al vampiro y vio como este perdía el brillo malvado de sus ojos. Con los ojos abiertos dirigió la mirada a su pecho, y vio como la mano de taylor había hundido su daga hasta el corazón. Nada más quedar desplomado en el suelo, el cuerpo empezó a arder por sí solo. —Púdrete en el infierno —espetó taylor
Dinah estaba paralizada, el otro vampiro sonrió a camila y luego la miró a ella. Dinah no supo cómo lo logró, pero el vampiro la tenía entre sus brazos y ella tenía el cuello descubierto e inclinado hacia atrás.
—No, dinah... —gritó camila .
Camila corrió como un ciclón y cogió al vampiro por el pelo. Tiró de él y lo hizo volar por los aires. Impresionada por su fuerza, se miró las manos. Eran igual de frágiles que siempre, pero ella por dentro ya no lo era. Era una híbrida.
Dinah  salió de su letargo y miró extrañada alrededor. —¿Qué ha pasado?
—No te apartes de mí —le dijo.
Camila  colocó a dinah detrás de ella y miró hacia el cielo. Venían más, muchos más. Pero entonces divisó a un grupo de chicos que corrían hacia ellos.
Eran berserkers, liderados por Noah y Adam. Se colocaron a su lado y las rodearon haciendo de escudos humanos.
—Se acercan —les dijo mientras observaba el cielo.
Sus vaticinios se cumplieron. Un grupo de cinco vampiros aterrizaron sobre sus piernas y los rodearon. Uno de ellos se desvió y se centró en lauren , que todavía yacía postrada a cuatro patas, mirando impotente todo lo que pasaba. Dos lobeznos fueron a por taylor que luchó como pudo con ellos.
—camila  mi hermana... —gritó ella con el rostro asustado. Lauren  estaba indefensa.
En ese momento, las dos rubias la ayudaron a levantarse. Pero un lobezno se les acercó por detrás y ambas se tiraron encima de él dejando a laure  solq de nuevo. Lauren  perdía el conocimiento y apenas les prestaba atención.
Los berserkers se cargaron a los vampiros. Wes y drew llegaron a tiempo para detener a tres nosferátums más que llegaban recientemente. Parecía que llovían del cielo.
Drew esquivó un puñetazo, se agachó para esquivar una patada que le iba a la cara y cuando volvió a levantarse atravesó el pecho del vampiro con su propio puño. Enrabietado, cogió el cuerpo sin vida del vampiro y lo lanzó contra los Lobeznos que luchaban con taylor . Acompañando el impacto de los cuerpos, drew se lanzó sobre uno de ellos y le abrió la mandíbula con las manos hasta descoyuntarla y abrirle el cráneo.
Taylor  y él se miraron fijamente. Drew sacó el puñal de su bota, y de un salto bloqueó al otro lobezno que se lanzaba de nuevo a por ella. Le arrancó la cabeza con el puñal. La volvió a mirar. —¿Problemas? —le preguntó él. —No deberías estar aquí, taylor