Capítulo XXI

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N. Alex…

Se hacía tarde, venía caminando rumbo a mi casa junto con Maya, quien en todo el camino iba callada viendo hacia el suelo, luego de un intento de caso besar nos de nuevo entró la enfermera para limpiar mis raspones, Maya había salido para esperarme afuera parecía un pequeño y muy rojo tomate; la verdad nunca imagine tener el valor de hacer lo que hice, incluso nunca imagine que la llegaría a besar pero de algo si estaba seguro… quería que me tragara la tierra.

-Bueno, llegamos – le dije a Maya al notar que estábamos en medio de ambas casas.

-Si eso parece – dijo sin mirarme. Okey eso no me ayudaba hace menos de una hora nos besábamos y ahora siento que mate a alguien…

-Bueno, creo que te veré luego – dije sin expresión, solo quería meterme dentro de un basurero, le sonreí y decidí por caminar la poca distancia que me quedaba.

-Alex… - dijo Maya, quien me había tomado de la muñeca, voltee a verla encontrándome con esos ojos color miel – Alex perdóname…

-Perdonarte? Por que Maya, no hiciste nada malo, el que debería disculparse soy yo por no medir mis acciones… - dije apenado.

-No, perdóname por gritarte y empujarte no te merecías eso, solo tratabas de defenderme y yo voy y te golpeó, enserio Alex perdón… - dijo ella mirándome arrepentida.

-Esta bien Maya pero perdóname también por lo que paso ahí.. – me rasque la nuca – creo que no debí hacerlo sabes – reí… me quiero matar.

-Sabes, admito que fue la excusa más idiota para besarme pero.. – ella se acerca o a mi y se paro de puntitas – creo que fue la estupidez más bonita que pudiste haber hecho.

Fue lo último que dijo Maya antes de pegar sus labios con los míos, me tomo por sorpresa, no me imagine que ella llegara hacer algo así ya que claro yo lo había hecho pero que este acto provenga de ella me impacto, Maya paso su mano por mi mejilla mientras yi rodeaba su cintura, como era posible sentir que que es la primera vez que la besaba considerando lo que había pasado hace una hora atrás…

-Alex, donde dejaste el estambre de boli…

Rápidamente ambos volteamos a ver al dueño de esa voz, encontrándonos con Cris, quien tenía la boca abierta y nos señalaba para luego empezar a reír…

-Cris no me gusta Maya, deja de molestar, volvemos al tema de siempre que no me gusta bla bla bla – dijo riéndose. Maya estaba sonrojada pero la escena que estaba montando Cris le daba un poco de gracia.

-Te veo luego Maya.. – dije dándole una sonrisa.

-Esta bien, adiós – dijo y salió en dirección contraria hasta entrar a su casa.

-Tienes cinco segundo para correr antes que te mate – estaba a punto de matarlo ya que el había matado el momento entre Maya y yo. Al voltear Cris ya no estaba así que entre a mi casa directo a la habitación de Cris pero ni encontré a nadie.

-Perdón… - se escuchaba desde el closet.

-Créeme que si quisiera matarte, pero no puedo… - dije riendo, después que Maya me besara, tenía una cara de idiota.

-No se que te hizo Maya pero bien – dijo saliendo del closet.. – a ver joven idiota como paso? – dijo sentándose en su escritorio mientras acariciaba a bolita de grasa…

-Cris, bese a Maya – dije riendo.

-Eso lo note señor obvio – dijo rodando los ojos – pero que paso.

Luego de contarle a Crisny de golpearlo por cagarse de risa, lo encare el ni se salvaría con lo de Charlie

-Debí a ver apostado contigo, si hubiera ganado un buen dinero – dijo riendo – pero me asombras no pensé que eso llegaría a pasar…

Enamorada de mi estupido vecino.   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora