Enamorada de mi estupido vecino.

Capítulo XXII

N. Maya…

Estaba con Madie fuera de la escuela esperando a los chicos que terminarán de alistarse, por alguna razón estaba nerviosa por salir con Alex algo raro ya que desde hace mucho salimos juntos pero ahora es diferente.

-Maya que tienes? – Madie me miraba raro.

-Nada, nada por que? – dije mirando hacia otro lado mientras tocaba mis aretes.

-Bien creo que tanto tu como yo no nos podemos seguir guardando esto verdad? – dijo ella quitando mi mano de mi oreja.

-De qué hablas? – preguntó te confusa, Madie me había ocultado algo?

-Habló de cuando rayos me ibas a contar que Alex y tu se besaron.. – dijo cruzándose de brazos.

-Tu nos..

-Si cariño los vi, Michael también cuando planeabas contarme eh? — dijo sería – soy tu mejor amiga eres una bestia.

-Ya esta bien Madie, lo siento pero ni yo lo había procesado bien – Si claro Maya y luego tu vas y lo besas – me perdonas? – le sonreí tiernamente.

-Ya que – dijo abrazándome – hubieras visto a Michael se aguanto mis gritos de emoción, amiga sabia que esto los uniría como antes pero no pensé que llegarán al punto de eso – dijo riendo.

-Ni yo se Madie – dije mirándola – hoy saldré con el..

-Ah, por eso tus nervios? – me sonrió – siempre salen juntos, pero si ahora es una cita no una simple salida.

-Si – dije pensando – y si la cago?

-Por qué dices eso? – empezó a reír – parece que sí te gusta, tranquila va a salir bien.

-Que saldrá bien? – era Lucas seguido de Michael y Alex.

-Hola Lucas – dijimos al unísono.

-Hola bellezas – nos abrazo – y.. Bellezos – miro a los chicos.

-Hola – dijeron ellos.

-Nos vamos? – preguntó Michael quiénes se iban con Madie y Lucas – vienen?

-No, iremos a otro lugar nos vemos chicos – dijo Alex sonriendo.

Madie me sonreía emocionada mientras Lucas tenía una cara entre sorpresa y confusión, de seguro luego me hará un interrogatorio. Mientras íbamos caminado Alex sacaba algo de su mochila.

-Toma – dijo dándome una mandarina – mi mamá trajo varias.

-Gracias – dije mientras reía.

-Pero no la abras ahorita, apestaras a mandarina – dijo mirándome.

-Bien y adonde vamos? – pregunte guardando la mandarina en mi mochila.

-Iba a invitarte un batido – me miro – quieres?

-Claro – dije y seguimos caminando hasta que llegamos.

Al ordenar los batidos, la chica miro a Alex con coqueteo mientras el no se daba cuenta, quería ver hasta donde llegaba la chica.

-Oye, toma – la chica le pasó su número escrito en un pedazo de papel.

-Oh, a quien quieres que se lo de – preguntó inocente, reí ante el gesto de la chica.

-Es para ti – dijo la chica sonriendo – tus batidos.

-Gracias – dije agarrando ambos batidos.

-Ay, que linda tu amiga – dijo la chica.

-Amiga? No veo a ninguna amiga, solo a mi novia – dijo sonriéndole a la chica – gracias por los batidos – Alex dejó el papel en el mostrador y tomó su batido de mi mano para luego entrelazarla con la mía.