Abrí los ojos y vi la cara de un psicópata delante de mí.
–Finalmente despertaste, preciosa. –Sonrió Ramsay, de manera malévola.
–¿Qué quieres de mí? –Gruñí, tratando de mostrarme fuerte, aunque era algo muy difícil de hacer.
–Vine a decirte que en cuanto termine el gran espectáculo que montaré en los jardines, estarás perdonada. –Sonrió.
–¿Espectáculo...? –Pregunté, algo temerosa.
–Verás... –Comenzó a decir.- Hay un maldito bastardo acompañado de mi esposa, ambos quieren quitarme el castillo de Winterfell y todo el Norte. No permitiré que eso pase. El espectáculo será la batalla.
¿Un bastardo...?
<<El bastardo de Winterfell.>>
Demonios. Ahora todo me recordará a Jon, ¿cierto?
–Llévenla a la ventana. –Dijo, para luego salir de la habitación con un portazo.
Entonces sus guardias me movieron con la "X" gigante de madera y me acomodaron frente a una ventana.
Entonces vi el tan mencionado "espectáculo."
Las tropas de Ramsay estaban a un costado, listas para pelear. En medio del campo de batalla habían "X" gigantes que ardían en fuego.
Y al otro lado había un ejército más pequeño que el de Ramsay.
¿Quién se atrevería a pelear contra este idiota loco?
Entonces agudicé mi vista y vi a Ramsay jalando a Rickon Stark con una gran cuerda. Cortó la cuerda y vi que le susurró algo.
Entonces Rickon empezó a correr por el campo de batalla, desesperado de llegar al otro lado.
Ramsay comenzó a lanzarle flechas con un arco, pero parecía que era muy malo en eso.
–Corre, Rickon. –Gruñí para mí.- Debes correr más rápido.
Entonces vi que poco a poco las flechas que Ramsay lanzaban se acercaban más y más a Rickon.
Y un tipo en caballo comenzó a correr hacia él.
–¡Zigzaguea, Rickon! –Chillé, como si fuera capaz de oírme.- ¡Zigzaguea!
Entonces el niño cayó al suelo, al parecer sin vida.
–¡No! –Sollocé, dejando que lágrimas comenzaran a caer por mis mejillas.
Y entonces el tipo en caballo paró delante de él.
Y lo reconocí.
Jon Snow.
El amor de mi vida.
El chico de ojos color tormenta y cabello castaño oscuro.
Estaba ahí.
Y acababa de ver a su hermano menor morir.
–¡Jon, sal de ahí! –Grité, desesperada.
Ahora no sabía qué carajos iba a suceder.
Las tropas de Jon comenzaron a prepararse para atacar, y las tropas de Ramsay comenzaron a atacar con sus arcos y flechas.
Entonces Jon comenzó a cabalgar hacia el ataque, siendo seguido por sus tropas.
La mitad de las tropas de Jon eran salvajes.
¿De dónde carajos había sacado el resto?
Entonces los dos ejércitos se encontraron en la mitad del campo de batalla y comenzó todo lo feo. Perdí a Jon de mi vista y comencé a buscarlo con desesperación.
Que no maten a Jon.
No otra vez.
No lo soportaría.
Mierda, tengo que salir de aquí.
Traté de zafarme del agarre de mis muñecas y piernas, pero solamente logré hacerme unas heridas muy feas que comenzaron a sangrarme.
Regresé mi mirada al campo de batalla con los ojos empañados por las lágrimas.
El ejército de Jon había sido acorralado por el ejército de Ramsay en una especie de círculo. Y yo estaba mirando. No podía ir a ayudar.
Mierda.
Los apuntaron con sus estacas, y comenzaron a cerrar el círculo hacia adentro.
Si no sucedía algo iban a morir todos.
–Dioses, ayúdenlos. –Rogué, llorando.- Por favor...
Y entonces un milagro sucedió.
Llegaron los caballeros del valle a salvar el día. Y la pelirroja que había abrazado a Jon estaba ahí sobre su caballo, observando orgullosa al ejército.
Poco a poco abrieron el círculo y mataron al ejército contrario.
Ramsay y dos de sus guardias cabalgaron para resguardarse dentro de los muros del castillo, y el ejército de Jon no tardó en aproximarse para comenzar a golpear la puerta.
El gigante salvaje destruyó la puerta, dando su vida a cambio.
Entonces vi a Jon y al pelirrojo Tormund entrar, dispuestos a matar a los guardias de Ramsay.
Una chispa de felicidad se encendió en mí. Seguían vivos.
Entonces vi otro rostro conocido entrar detrás de ellos y su ejército: Jackson Hornwood.
¿Qué carajos hacía él aquí?
¿Había desertado de la guardia?
Luego Jon golpeó a Ramsay y comenzó a golpear su cara, deformándolo.
–Dale más duro. –Susurré, para mí misma.- Lastímalo, hazlo sufrir.
<<Porque nada se compara con lo que me hizo a mí ayer.>>
Entonces giró para ver a la pelirroja y se detuvo.
Los guardias se lo llevaron al calabozo supongo, y el resto quitó los estandartes de los Bolton, reemplazándolos por los Stark.
Comencé a llorar de felicidad. Ramsay no podría tocarme más, y Jon estaba aquí.
Con la pelirroja, pero estaba aquí.
Al igual que Hornwood.
Luego escuché a los salvajes por los pasillos, y de repente la puerta de la habitación en la que estaba se abrió de golpe.
Cerré los ojos por impulso, ya que no sabía cómo reaccionar, ya que estaba desnuda, llena de golpes y heridas, además de atada de brazos y piernas a una gran "X."
No sé cómo reaccionaría yo.
–¡Mierda, hay alguien aquí! –Oí la voz de Tormund.
Joder. ¿Por qué tenía que ser él?
Entonces abrí los ojos y luego lo vi frente a mí.
–¡Qué alguien traiga a Jon Snow! ¡Rápido! –Gritó.- Sisabella, el nuevo corte te queda bien. –Dijo.
Traté de hablar, pero no supe qué decir. Lágrimas caían por mis ojos y luego perdí la consciencia.
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¡Hola, hola!
Espero que les guste el capítulo de la semana. Personalmente, la batalla de los bastardos es uno de mis capítulos favoritos de la serie así que me emocioné al escribirlo <3
También quiero decirles que estaré de viaje las próximas dos semanas y es complicado escribir desde una tablet, así que es probable que no suba capítulo hasta después del 5 de enero.
En fin, les deseo felices fiestas, y que Santa les regale a todas un Jon Snow <3
¡Besos!
Atte:
Lau:)
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The Crow Girl (Jon Snow)
Fanfiction¿Quién dijo que una mujer no puede ser parte de la guardia de la noche? A la mierda con el que haya dicho eso. Mi nombre es Sisabella Baratheon, y esta es mi historia. ...
