La Reina de Arendelle

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Todo comienza un año después de la coronación de Elsa, la nueva Reina de Arendelle.

Casi todos los reinos aliados con Arendelle, sabían que la Reina tenía poderes, excepto los reinos de Overland y Bennett, ya que los reyes de estos dos reinos no habían asistido a la coronación de Elsa y no se enteraron.

Narra Elsa

Hoy estoy muy nerviosa, al fin conoceré el reino de Overland, pues habría una fiesta a la cual fuimos invitadas Anna y yo, me han contado maravillas de su Rey y claro, el pueblo no se queda atrás.

—¡Anna! ¿Ya estás lista?— llamé casi gritando atrás de la puerta, pues ya tenía 5 minutos ahí y Anna no contestaba.

—Si si,¡Ya voy Elsa!— escuché responder a Anna, tal vez estaba en el baño.

—Te esperaré en el jardín, ¡apúrate o llegaremos tarde!— dije un tanto desesperada.

Dicho eso me retiré al jardín como se lo había "gritado" a Anna, todo era tan pacífico en ese lugar, lleno de olores y colores hermosos, simplemente perfecto para relajarse un momento.

Me puse a pensar en lo mucho que ha mejorado mi relación con Anna en éste tiempo, ella y Kristoff han decido casarse en unos cuantos meses, 5 para ser exacta. Anna insiste en que debo encontrar a alguien pero, no me llama la atención tener pareja en estos momentos.

—Elsa, Elsa, ¡ELSA!— gritó Anna sacándome de mis pensamientos.

—Auch, casi me dejas sorda Anna— dije haciéndome la sufrida.

—Llevo aquí 2 minutos y no me haces caso, ¿en que piensas?— cuestiona ella con una sonrisa pícara.

—En tu boda, claro— y eso era un tanto verdad.

—Mm, esta bien, ¿ya estás lista?— preguntó Anna no muy convencida de mi respuesta.

—Sólo faltabas tú— respondí riendo y ella también rió.

Platicamos sobre cosas de la boda, Anna se veía muy feliz y eso me hace feliz a mí. Llegamos al barco en el que iríamos al reino de Overland, revisaron que todo estuviera en orden y partimos hacia Overland.

Fueron 6 largas horas, realmente ¡LARGAS!, cuando faltaba 1 hora para llegar decidí cambiarme, me puse el vestido que usé en mi coronación, en serio me encanta ese vestido, claro llevo mis guantes, no quería cometer una tontería en otros reinos; ya bastante tuve con el desastre que ocasioné en Arendelle.

Cuando llegamos un señor de unos 45 años aproximadamente nos recibió.

—¿Princesa y Reina de Arendelle?— preguntó el señor muy cordial.

—¡Si!¡Esas somos nosotras!— gritó Anna bajando del barco. Yo sólo asentí con una sonrisa al señor.

—Soy Darío, el Rey James de Overland me ha enviado para llevarlas hasta el castillo para que se instalen— se presentó Darío muy amable y haciendo reverencia.

—Muchas gracias, Darío , estamos agradecidas por sus servicios— contesté con una leve sonrisa.
Darío asintió y subimos a un carruaje y después de unos minutos llegamos al castillo de Overland.

Narra Anna

¡Wow! Las horas que pasamos en ese barco, realmente valieron la pena, éste reino es increíble, no más que Arendelle, claro.

Un señor, creo que su nombre es Darío, nos llevó hasta el castillo de Overland, en unos momentos volteé a ver a Elsa, y para mi sorpresa llevaba sus guantes de satén, iba a preguntar porqué los traía pero me imaginé que sería para evitar un "desastre" como Elsa lo llama, así que decidí guardar la pregunta para otra ocasión.

Hielo oscuro: tu mayor miedo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora